Lección 27: Doctrina y Convenios 18:1–13: “Recordad que el valor de las almas es grande a la vista de Dios”
“Doctrina y Convenios 18:1–13: ‘Recordad que el valor de las almas es grande a la vista de Dios’”, Manual del maestro de Seminario de Doctrina y Convenios, 2025
“Doctrina y Convenios 18:1–13”, Manual del maestro de Seminario de Doctrina y Convenios
“Recordad que el valor de las almas es grande a la vista de Dios”
En respuesta a los primeros líderes de la Iglesia que buscaban la voluntad del Señor sobre cómo edificar Su Iglesia, el Señor dio una revelación a José Smith, Oliver Cowdery y David Whitmer que está registrada en Doctrina y Convenios 18. El Señor enseñó a estos hombres verdades importantes acerca del valor de nuestra alma. Esta lección puede ayudar a los alumnos a sentir que el valor de sus almas es grande a la vista de Dios.
Algunas posibles actividades de aprendizaje
Nuestro valor
En el mundo en que vivimos, podemos sentirnos tentados o presionados a determinar nuestro valor basándonos en _______________.
Dedica un momento para meditar sobre cómo te sientes en cuanto a tu valor personal y por qué te sientes así. ¿En qué tiendes a basarte para determinar tu valor? A medida que estudies hoy, busca verdades que puedan ayudarte a sentir el valor que tienes a la vista de Dios.
El Señor enseña acerca del valor de las almas
En junio de 1829, José Smith, Oliver Cowdery y David Whitmer recibieron una revelación conocida como Doctrina y Convenios 18. La revelación era sobre el llamamiento de Doce Apóstoles en los últimos días y la edificación de la Iglesia. Además de estas instrucciones, el Señor compartió con Oliver y David verdades poderosas acerca de nuestro valor.
¿Qué te gustó o qué aprendiste de estos versículos?
¿Cómo el sufrimiento y la muerte del Salvador por nosotros demuestran lo que valemos para Él?
¿Qué efecto tendría en nosotros el determinar nuestro valor basándonos en el amor del Padre Celestial y el Salvador por nosotros en lugar de basarnos en etiquetas mundanas?
Profundiza tu comprensión
Después de concederles tiempo suficiente, dé a los alumnos la oportunidad de compartir lo que aprendieron. Ellos podrían hablar primero en grupos de a dos y, luego, los alumnos que así lo deseen podrían compartir con la clase.
Cree un ambiente en el que todos se sientan respetados y sepan que se valoran sus contribuciones: Busque oportunidades para agradecer a los alumnos sus respuestas y hacerles saber que valora su participación. Para obtener más capacitación sobre cómo comunicar su valor, véase la capacitación titulada “Cree un ambiente en el que todos se sientan respetados y sepan que se valoran sus contribuciones”. Esta capacitación se encuentra en Habilidades para el desarrollo del maestro.
A la clase puede resultarle útil recopilar en la pizarra una lista de los recursos favoritos de los compañeros de clase. Los alumnos pueden copiar esta lista para consultarla personalmente.
Establecer una relación con tu vida
Relatar historias o experiencias actuales podría ayudar a los alumnos a sentir el valor que tienen para Dios. Antes de pedir a los alumnos que analicen la pregunta siguiente, considere compartir su propio ejemplo de la forma en que ha sentido el valor que usted tiene para Dios. También podría mostrar el video “La esperanza de la luz de Dios” (6:46), que se encuentra disponible en LaIglesiadeJesucristo.org, e invitar a los alumnos a buscar cómo un hombre llegó a conocer su valor a los ojos de Dios.
¿Qué experiencias de tu vida o de la vida de otras personas te han ayudado a sentir que el valor de tu alma es grande a la vista de Dios?
Invite a los alumnos a hacer algo para reflexionar más profundamente sobre su valor a la vista de Dios durante la próxima semana o incluso la siguiente. Concédales tiempo de la clase para preparar lo que harán. La lista siguiente incluye ideas que podría compartir. La lección “Evalúa tu aprendizaje 2” dará seguimiento a las experiencias de los alumnos con esta actividad.
Determina cómo vas a meditar sobre tu valor a la vista de Dios durante las próximas semanas. A continuación, se indican algunas maneras en que puedes hacer esto:
Crea un recordatorio y colócalo donde puedas verlo regularmente. Puede ser un cartel o el fondo de pantalla de un teléfono inteligente que incluya una imagen e incluso palabras de las Escrituras.
Ora cada mañana y noche para comprender más claramente cómo te ve tu Padre Celestial.
Planifica tiempo regular para reflexionar en tu diario acerca de tu valor.
Dedica tiempo en varias ocasiones a leer y estudiar más profundamente tu bendición patriarcal. Piensa en la forma en que podrías verla de otra manera para comprender realmente lo que tu Padre Celestial quiere que sepas y sientas sobre ti.
Dé testimonio del amor de Dios y del valor infinito de cada alumno, que se demuestran mediante la expiación del Salvador.
Memorizar
Quizás quiera ayudar a los alumnos a memorizar la referencia y la frase clave del Dominio de la doctrina durante esta lección y repasarlos en lecciones futuras. La frase clave correspondiente a Doctrina y Convenios 18:10–11 es la siguiente: “El valor de las almas es grande a la vista de Dios”. En los materiales del apéndice que se encuentran bajo el encabezamiento “Actividades de repaso del Dominio de la doctrina” hay ideas para las actividades de memorización.