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Hacer buenas preguntas

Toma apuntes y responde a las preguntas aquí.

Repasar

En “Resolver problemas”, aprendiste a solucionar problemas. Analiza cómo has utilizado el proceso de resolución en tres pasos.

Aprender

A veces es difícil hacer preguntas en clase. Puede que estés demasiado nervioso para hablar delante de los demás o que te preocupe que los demás piensen que tu pregunta es una tontería. No eres el único; a muchos estudiantes no les gusta hablar delante de los demás. Sin embargo, es importante recordar que todo aprendizaje comienza planteando preguntas. Los hijos de Dios siempre se han hecho preguntas al buscar conocimientos y respuestas. Las preguntas han conducido a descubrimientos en la historia y a la restauración de la Iglesia de Jesucristo. Las preguntas sinceras conducen a bendiciones de gran conocimiento.

Es importante que hagas preguntas que te ayuden a recopilar más información para que puedas entender lo que estás aprendiendo. En el ejemplo siguiente, Hali está en la Escuela Dominical y no entiende de qué manera puede recibir respuestas a sus oraciones. Lee las preguntas que se plantea y lo que hace al buscar conocimiento.

• Hali podría preguntarse: “¿Responderá el Padre Celestial a mis oraciones?”.

Esta es una buena pregunta, pero el maestro simplemente podría responder “Sí” y seguir adelante. Hali quiere saber más, así que formula estas preguntas:

• “¿Por qué iba el Padre Celestial a responder a mis oraciones?”.

• “¿Cómo responderá el Padre Celestial a mis oraciones?”.

Son preguntas que darán lugar a respuestas detalladas.

Ilustración de una mujer

Mientras el maestro responde a sus preguntas, Hali se da cuenta de que sigue sin entender. Pide a su maestro que repita la respuesta y la explique, e intenta no preocuparse por lo que piensen los demás alumnos. Recuerda que es importante que aprenda y comprenda.

Durante la clase, a Hali se le ocurren otras preguntas y las anota para no olvidarlas. Decide formular a sus padres las demás preguntas cuando vuelva a casa.

Después de la clase, otros alumnos le dicen a Hali que tenían las mismas preguntas, pero que tenían miedo de hacerlas. Dan las gracias a Hali por ser valiente y hacer buenas preguntas.

Puedes hacer todo lo que hizo Hali en la Escuela Dominical o en la Iglesia para aprender más cuando no entiendas algo.

Actividad

Con un compañero, lleva a cabo el siguiente juego de preguntas. En este juego, harás preguntas para obtener información. Observa qué preguntas te ayudan a obtener información y cuáles no. Tendrás que pensar bien tus preguntas. Sigue estos pasos:

1. El compañero A elige una imagen sin decirle al compañero B lo que ha elegido.

2. El compañero B solo puede hacer tres preguntas para averiguar qué imagen ha elegido el compañero A. El compañero A solo puede responder con la palabra “sí”o con la palabra “no”. El compañero B tendrá que hacer muy buenas preguntas. Si el compañero B pregunta: “¿Es un animal?” y el compañero A responde que sí, el compañero B no tendrá mucha información. Sin embargo, si el compañero B pregunta: “¿Tiene piel?” y el compañero A dice que sí, el compañero B tendrá más información para adivinar correctamente qué imagen ha elegido el compañero A.

3. Después de que el compañero B haya adivinado correctamente la imagen del compañero A (o haya hecho tres preguntas), el compañero B elige una imagen y el compañero A hace tres preguntas.

Cuadrícula con fotos de animales

¿Qué has aprendido sobre cómo hacer preguntas que te pueda ayudar en la escuela? Las preguntas que haces, ¿cómo pueden ayudarte a recopilar información y a comprender lo que estás aprendiendo?

Hablar con tu familia

Habla con tus amigos o familiares sobre ocasiones en las que se hayan sentido nerviosos al hacer preguntas. ¿Qué has aprendido sobre la importancia de hacer buenas preguntas?