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¿Por qué tenemos adversidades?


¿Por qué tenemos adversidades?

Como parte del plan de nuestro Padre Celestial, debemos experimentar adversidad durante la vida terrenal. En algunos casos, la adversidad es el resultado de nuestras malas decisiones o de las decisiones de los demás. Otras pruebas son simplemente una parte natural de nuestra experiencia terrenal. A pesar de que son difíciles, nuestras tribulaciones nos ayudan a crecer espiritualmente y a llegar a ser más como Jesucristo.

Prepararse espiritualmente

Piense en las pruebas que ha tenido en su vida. ¿Cómo le ha fortalecido el Salvador en esos momentos difíciles?

Es posible que algunos de los jóvenes a los que enseña ya hayan afrontado graves padecimientos. Todos ellos tendrán que confiar en la gracia del Salvador para recibir ayuda durante las pruebas que tengan a lo largo de la vida.

Con espíritu de oración, estudie los siguientes materiales de consulta y pasajes de las Escrituras. ¿Qué impresiones recibe a medida que estudia?

2 Nefi 2:11 (Debe haber oposición en todas las cosas)

Mosíah 23:21 (Dios nos da adversidad para poner a prueba nuestra fe)

Éter 12:27 (Dios nos da debilidad para que seamos humildes)

D. y C. 101:1–9 (A veces la adversidad se presenta por motivo de las malas decisiones que tomamos)

D. y C. 121:7–8; 122:4–9 (Las pruebas nos sirven de experiencia y son para nuestro propio bien)

Yoon Hwan Choi, “No mires a tu alrededor, ¡mira hacia arriba!”, Liahona, mayo de 2017, págs. 90-92.

Dallin H. Oaks, “Oposición en todas las cosas”, Liahona, mayo de 2016, págs. 114–117.

Koichi Aoyagi, “Persevera en tu camino”, Liahona, noviembre de 2015, págs. 126–128.

Neil L. Andersen, “Torbellinos espirituales”, Liahona, mayo de 2014

Adversidad”, Leales a la Fe, 2004, págs. 12–15.

Videos: “Dios nos apoyará”, “El sacerdocio puede bendecir a nuestra familia durante las pruebas”, “Reconstruyendo vidas”

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Enseñar a la manera del Salvador

El Salvador empleaba las Escrituras para enseñar y testificar acerca de Su misión. Esta lección contiene muchos pasajes poderosos de las Escrituras que enseñan la manera en que el Salvador nos fortalecerá durante nuestras pruebas. A medida que los jóvenes estudien y analicen esos pasajes, el Espíritu Santo les testificará de su veracidad.

Permita que los jóvenes dirijan

Un miembro de la presidencia del cuórum (o un ayudante del obispo en el cuórum de presbíteros) dirige la reunión. Él dirige a los demás jóvenes para que deliberen en consejo en cuanto a los asuntos del cuórum, les enseña sus deberes del sacerdocio (usando las Escrituras y el librito Mi Deber a Dios), los alienta a compartir las experiencias que han tenido al cumplir con su deber a Dios e invita al asesor o a otro miembro del cuórum a enseñar una lección del Evangelio. Puede prepararse llenando una Agenda de la reunión del cuórum durante una reunión de presidencia.

Comience la experiencia de aprendizaje

Elija alguna de las ideas siguientes, o utilice las suyas, para repasar la doctrina de la lección de la semana anterior y presentar la de esta semana:

  • Pida a los jóvenes que piensen en algo que hayan aprendido la semana anterior, que lo escriban y que lo compartan con el cuórum. Utilice esto como punto de partida para presentar la lección de esta semana.

  • Como cuórum, repasen la descripción que hace el élder Neil L. Andersen de los árboles que crecen en lugares de mucho viento (en su discurso “Torbellinos espirituales”). ¿Qué enseña este ejemplo a los jóvenes acerca de la adversidad? Invítelos a leer el discurso en busca de consejos que sientan que los ayudarán a soportar los torbellinos espirituales.

Aprender juntos

Cada una de las actividades siguientes ayudará a los miembros del cuórum a aprender acerca del propósito de la adversidad. Siguiendo la inspiración del Espíritu, elija las que considere más útiles para su cuórum:

  • Lleve una cadena o la imagen de una cadena a clase. ¿Qué pasaría si uno de los eslabones de la cadena se fuera a romper? ¿Cómo podemos asegurarnos de que seremos un eslabón fuerte en nuestra familia eterna? Invite a los jóvenes a buscar cómo ha contestado el élder Yoon Hwan Choi a esta pregunta en su discurso “No mires a tu alrededor, ¡mira hacia arriba!” comenzando con el párrafo que empieza con: “Todos nosotros estamos en el centro de una familia eterna”. ¿Cómo miró hacia Cristo el élder Choi y su familia en los relatos que ha compartido? ¿Cuáles son algunos de los momentos en los que “no siempre es fácil mirar hacia arriba”? ¿Qué sugerencias ha dado el élder Choi en el último párrafo de su discurso para ayudarnos a “siempre mirar hacia [Cristo]”durante la adversidad?

  • Invite a un joven a leer el relato del discurso del élder Koichi Aoyagi “Persevera en tu camino”, que comienza con el párrafo en donde describe el accidente automovilístico. ¿Qué les enseña esta historia a los jóvenes acerca de por qué experimentamos pruebas en esta vida? Considere con antelación la posibilidad de invitar a un joven para que comparta una experiencia de cuando él u otro familiar creció o se fortaleció por medio de una prueba. Él también podría compartir un relato de su historia familiar que enseñe este principio. 

  • Pida a cada joven que anote una prueba que esté pasando él o algún miembro de su familia. Invite a los jóvenes a estudiar los pasajes de las Escrituras de esta reseña u otros que ellos conozcan, y que busquen enseñanzas sobre por qué tenemos adversidades. Invítelos a compartir lo que hayan encontrado. ¿Cómo podría ayudarles ese pasaje de las Escrituras a superar la prueba que anotaron?

  • Lean juntos los primeros dos párrafos sobre la “Adversidad” en Leales a la Fe. ¿Cuál es la función de la adversidad en el plan de nuestro Padre Celestial? Asigne a cada miembro del cuórum una de las tres secciones restantes sobre la adversidad en Leales a la Fe y pídales que se preparen para enseñar al resto del cuórum lo que hayan aprendido de la sección que les ha tocado. Aliéntelos a compartir un relato o una experiencia personal relacionada con lo que han leído.

  • Dibuje una línea vertical en el centro de la pizarra y escriba “¿Por qué tenemos adversidades?” como título de una columna y “¿Cómo podemos afrontar los desafíos de nuestra vida?” como título en la otra columna. Divida el discurso del élder Dallin H. Oaks “Oposición en todas las cosas” en secciones y asigne a cada joven una sección para leer. Pida a los jóvenes que busquen respuestas a estas preguntas y que las escriban en la parte de la pizarra que corresponda. ¿Qué otras cosas han aprendido los jóvenes de estos discursos? También podría mostrar uno de los videos que se sugieren en esta reseña para ayudar a los jóvenes a encontrar respuestas adicionales a las preguntas de la pizarra.

  • Con la autorización del obispo, invite a los padres de los jóvenes a que compartan con el cuórum la forma en que Jesucristo les ha ayudado a superar sus pruebas. ¿Qué aprendieron de sus experiencias con la adversidad? Pida a los padres que compartan un pasaje de las Escrituras como parte del análisis.

Pida a los jóvenes que compartan lo que hayan aprendido. ¿Comprenden por qué tenemos adversidad? ¿Qué sentimientos o impresiones tienen? ¿Desean hacer otras preguntas? ¿Resultaría útil dedicar más tiempo a esta doctrina?

Sugerencia para la enseñanza

“Disponga las sillas del salón de manera que pueda ver el rostro de cada persona y que al mismo tiempo cada persona pueda ver su rostro” (La enseñanza: El llamamiento más importante, 2000, pág. 77).

Invítelos a actuar

El joven que dirige concluye la reunión. Él podría:

  • Dirigir un análisis sobre cómo el cuórum puede cumplir con su deber del sacerdocio de ayudar a los demás en sus padecimientos. Escribir planes que los ayuden a completar la sección “Prestar servicio a los demás” del librito Mi Deber a Dios.

  • Compartir su testimonio de la forma en que el Salvador lo haya fortalecido en momentos difíciles.