Oración dedicatoria

Templo de Tuxtla Gutiérrez, México, 12 de marzo de 2000

Nuestro amado Padre Celestial, Tú, gran Elohim, Tú, que eres el gobernador del universo y el Padre del género humano, nos dirigimos a Ti en oración en este día histórico. Nos encontramos reunidos para celebrar la terminación de este hermoso templo, esta sagrada Casa del Señor.

Con la autoridad del santo sacerdocio y en el nombre de Jesucristo, Tu Hijo Amado, dedicamos a Ti y a Él éste, el Templo de Tuxtla Gutiérrez, México, de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Se levanta como un lugar de gran belleza en esta ciudad. Acéptalo y concédele la presencia de Tu Santo Espíritu para bendición de todos los que entren en esta santa estructura.

Dedicamos el edificio junto con los terrenos que lo rodean. Dedicamos la estructura desde los cimientos hasta la parte superior de la aguja más alta donde se encuentra la estatua de Moroni. Dedicamos las salas y los pasillos, el bautisterio, las instalaciones para la administración de la ordenanza de la investidura, las salas de sellamiento con sus sagrados altares, todo ello a Ti, para que Tus divinos propósitos en beneficio de Tus hijos se cumplan.

Que lo usemos para aquello para lo cual ha sido creado. Que sea una estructura santificada, un lugar de ordenanzas sagradas, la Casa del Señor a la cual vengamos como Tus Santos de los Últimos Días.

Rogamos que ahora sea reservada para los que sean hallados dignos delante de ti de entrar por sus portales. Que nunca sea profanada ni deshonrada en ninguna manera. Que sea protegida de los elementos de la naturaleza. Que ninguna persona sin autorización entre por las puertas de ésta, Tu casa.

Suplicamos Tus bendiciones sobre los hombres y las mujeres fieles que servirán aquí, y, de un modo particular, sobre el presidente del templo y sus consejeros y sobre la directora de las obreras y sus ayudantes. Bendícelos para que se regocijen en la gran oportunidad de servir a los de Tu pueblo. Guárdalos del cansancio al trabajar ellos en Tu edificio sagrado. Bendice a todos los que trabajen aquí para que lo hagan con el verdadero espíritu del Maestro a quien sirven. Lo que aquí se efectuará, todo ello es parte del divino plan de felicidad que Tú has trazado para Tus hijos e hijas de todas las generaciones. La plenitud del sacerdocio se ejercerá aquí. Ésta será una casa de instrucción, una casa de convenios, una casa de ordenanzas. Rogamos que los que reciban estas ordenanzas las recuerden siempre y vivan dignos de los convenios que hagan contigo, querido Padre.

Rogamos que los santos fieles del distrito de este templo miren hacia esta santa estructura, que vengan aquí con frecuencia y que prueben las cosas agradables que aquí se ofrecen.

Imploramos Tus bendiciones sobre esta nación de México donde viven tantos de los hijos e hijas del Padre Lehi. Bendice a éstos, Tus hijos. Sácalos de las profundidades de la pobreza. Brinda nueva luz y entendimiento a sus mentes. Haz que se regocijen por el amparo que Tú les das. Que tengan alimentos en su mesa y ropa para vestirse, techo sobre sus cabezas y todo lo que sus corazones deseen con rectitud. Al pagar ellos sus diezmos y ofrendas, abre las ventanas de los cielos y derrama bendiciones sobre ellos, de acuerdo con Tu antigua promesa de la que se habla en Malaquías.

Rogamos por Tus siervos, los misioneros, dondequiera que sean llamados a trabajar, que sean protegidos del daño y del mal, y que sean guiados a aquellos que han de aceptar su mensaje.

Padre, Tus hijos e hijas reunidos en ésta, Tu santa casa, acudimos a Ti con amor de igual manera que a Tu Hijo. Rogamos que recordemos siempre los convenios que hemos hecho contigo. Suplicamos que podamos crecer con Tu favor y participemos de Tu Espíritu divino. Todo esto pedimos con humildad y agradecimiento en el nombre del Señor Jesucristo. Amén.