Recognizing Inaccurate Thought Patterns
Vivir el Evangelio

¿Alguno de ellos te resulta familiar?

07/17/24 | 2 min de lectura
Reconocer los pensamientos distorsionados es el primer paso para adquirir una actitud positiva.

Todos tenemos algún pensamiento negativo de vez en cuando. Pero a veces quedamos atrapados en patrones de pensamiento que son negativos y erróneos. A menudo, eso ocurre cuando asumimos lo peor o sacamos conclusiones apresuradas.

Esta es una lista de patrones de pensamiento distorsionado.

  1. Todo o nada: Considerar que algo o alguien es completamente bueno o malo. Cuando utilizas palabras como siempre o nunca.
    Ejemplo: “¡Siempre digo lo que no debo!”.
  2. Juzgar mal: Considerar algo que sucedió y hacer una afirmación general o incorrecta al respecto.
    Ejemplo: “Me cuesta entender las Escrituras, así que debo ser tonto”.
  3. Sacar conclusiones apresuradas: Interpretar los pensamientos de los demás o dar por hecho el peor resultado posible.
    Ejemplo: “Simplemente sé que todos se están riendo de mí”.
  4. Personalizar: Culparte a ti mismo por una situación que en realidad estaba afectada por muchos factores.
    Ejemplo: “No me devolvieron la llamada, así que deben estar enfadados conmigo”.
  5. Razonamiento emocional: Juzgar una situación basándote en cómo te sientes.
    Ejemplo: “No soy feliz, así que debo haber hecho algo malo”.
  6. Generalizar en exceso: Centrarse en una vivencia y generalizarla de modo que se aplique a todas las experiencias.
    Ejemplo: “No obtuve el trabajo que solicité, así que obviamente nunca nadie me contratará”.
  7. Filtro mental negativo: Centrarte en un detalle negativo y obsesionarte con él.
    Ejemplo: “Obtuve una calificación sobresaliente en mi examen, pero no alcancé el 100 %”.
  8. Descartar lo positivo: Rechazar todas las experiencias positivas porque sientes que no cuentan.
    Ejemplo: “Sí, batí mi marca personal, pero todavía soy mucho más lento que todos los demás, así que no tiene importancia”.
  9. Magnificar: Exagerar tus debilidades o compararlas con las fortalezas de los demás.
    Ejemplo: “El entrenador va a ver mis zapatos viejos y me echará del equipo”.
  10. Declaraciones de “debería”: Decirte a ti mismo cómo deberían o no deberían ser las cosas.
    Ejemplo: “Debí haberlo sabido”.

¿Reconoces alguno de estos patrones de pensamiento en tu propia vida? Presta más atención a tus pensamientos esta semana. La próxima semana compartiremos ideas para desarrollar patrones de pensamiento más positivos.

Recuerda, eres asombroso, extraordinario y maravilloso. ¡No le creas a nadie que te diga lo contrario! Todos somos una obra en proceso.

Lista de ideas

Puede ser útil hacer una lista de los pensamientos distorsionados que experimentas. Te mostraremos cómo utilizar esa lista como una herramienta positiva la próxima semana.

Nota: Esto es parte de una serie continua de mensajes sobre la resiliencia emocional, adaptado de este manual.

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