“Tres principios fundamentales para usar la tecnología y los medios de comunicación”, Liahona, marzo de 2024.
3 principios fundamentales para usar la tecnología y los medios de comunicación
A medida que la tecnología continúa evolucionando, estos enfoques respecto de los medios de comunicación nos ayudarán a avanzar con sabiduría.
La tecnología está en constante cambio. Y cada avance tecnológico ha traído consigo nuevas maneras de usar los medios de comunicación. La imprenta cambió significativamente quién podía acceder a las palabras escritas. La radio y la televisión cambiaron radicalmente la forma de comunicar noticias, información y entretenimiento. Internet cambió la cantidad de contenido al que podíamos acceder y quién podía crearlo. Las redes sociales cambiaron nuestra capacidad para encontrar personas y comunicarnos y conectarnos con ellas. A medida que surge la inteligencia artificial, nos enfrentamos a nuevas preguntas.
Las nuevas tecnologías nunca son del todo buenas ni del todo malas. Más bien, suelen ser como una lupa que puede magnificar nuevas oportunidades y preocupaciones. Al esforzarnos por ser más como Cristo, lo que importa es nuestra respuesta a las nuevas tecnologías y a los medios de comunicación que pueden traer a nuestra vida.
Un enfoque basado en principios
Por supuesto que no hay una lista de reglas que guíen nuestras decisiones en cuanto a la tecnología y los medios de comunicación. En cambio, podemos aprender principios que nos ayuden a tomar decisiones. El élder Dieter F. Uchtdorf, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó: “Los principios son eternos y universales. Las reglas o aplicaciones específicas de tales principios funcionan bien en algunos lugares, pero no en otros. Lo que nos une es Jesucristo y las verdades eternas que Él enseñó, aun cuando las aplicaciones específicas varíen con el tiempo y de una cultura a otra”1.
Seguir los principios basados en las verdades del Evangelio nos ayudará a permanecer en la senda de los convenios. El Espíritu nos guiará mientras nos esforzamos por tomar decisiones basadas en esos principios. ¿Qué principios pueden guiar nuestras decisiones en cuanto a la tecnología y los medios de comunicación?
1. Puedo utilizar mi albedrío moral para tomar decisiones a fin de controlar la tecnología. Esta no me controla a mí.
A veces puede parecer que la tecnología se está apoderando de su vida. Es importante recordar que puede tomar decisiones para controlar la tecnología. Esta no lo controla a usted. Puede elegir intencionadamente utilizar la tecnología y los medios de comunicación para hacer el bien y buscar cosas que sean “virtuos[as], o bell[as], o de buena reputación, o dign[as] de alabanza” (Artículos de Fe 1:13).
El Señor dijo: “Yo, el Señor, tengo una obra grande para ti” (Doctrina y Convenios 112:6). Considere cómo puede utilizar la tecnología para llevar a cabo esa gran obra y permanecer “anhelosamente consagrad[o] a una causa buena” (Doctrina y Convenios 58:27). Puede que necesite utilizar la tecnología en su trabajo. Puede utilizarla para encontrar formas sanas de entretenimiento. Puede ayudarle a conectarse con otras personas. Y puede ayudarle a aprender, progresar y llevar a cabo la obra del Señor. Sin embargo, otros usos pueden distraer, ser inapropiados o perjudiciales. En lugar de permitir que la tecnología lo controle, utilice la sabiduría y la guía del Espíritu para tomar decisiones que le den el control.
2. Cuando utilizo mi albedrío moral para planificar con anticipación, me siento mejor y tomo mejores decisiones.
Tal vez haya tenido alguna experiencia en la que tomó una decisión en cuanto a la tecnología que no le pareció correcta. Puede que haya tenido que ver con los medios de comunicación que usó o con el tiempo que dedicó a una determinada actividad. En lugar de obsesionarse con los errores cometidos, es más saludable centrarse en seguir creciendo. Si planifica con anticipación, tomará mejores decisiones que si toma todas las decisiones en el momento. Puede establecer pautas personales de acuerdo con las normas del Evangelio para ayudarle a tomar buenas decisiones.
Si se da cuenta de que utiliza los medios de comunicación de manera indebida o en exceso, tenga el valor de esforzarse por cambiar. Por ejemplo, si ciertas formas de medios de comunicación no lo inspiran ni lo hacen sentir bien, modifique sus hábitos. Si utiliza la tecnología para consumir medios de comunicación o adopta comportamientos que sabe que no son correctos, tenga el valor de cambiar, y tenga paciencia consigo mismo mientras se esfuerza por realizar esos cambios. Piense en algunas cosas prácticas que puede hacer para cambiar. Por ejemplo, si le resulta más difícil tomar buenas decisiones en determinados momentos del día, puede planificar los momentos en los que utilizará la tecnología y los momentos en los que no.
Del mismo modo, si utiliza la tecnología para fortalecerse a sí mismo, conectarse con los demás y llevar a cabo la obra del Señor, y siente el Espíritu, siga haciendo esas cosas. Si es verdaderamente sincero consigo mismo en cuanto a sus decisiones, su fe en el Señor puede ayudarlo a utilizar su albedrío de una manera que lo haga sentir mejor y seguir tomando mejores decisiones.
3. Puedo utilizar mi albedrío moral para hacer una pausa y descansar.
Tal vez sienta que las preguntas sobre la tecnología y los medios de comunicación son constantes. ¿Cuánto es demasiado? ¿Debo aumentar o disminuir mi uso de los medios de comunicación y la tecnología? ¿Estoy utilizando mi tiempo sabiamente? Trate de no dejar que pensamientos como estos lo abrumen. Recuerde que está bien hacer una pausa y descansar de los medios de comunicación. Un descanso puede ser elegir actividades que no sean mirar una pantalla por unas horas o incluso dejar de utilizar ciertas tecnologías, como las redes sociales, durante un período prolongado.
La tecnología brinda grandes bendiciones para ayudarnos a permanecer conectados con los demás; sin embargo, que podamos estar conectados en cualquier momento no significa que debamos estarlo en todo momento. El Señor nos recuerda: “Quedaos tranquilos y sabed que yo soy Dios” (Doctrina y Convenios 101:16). Asegúrese de dedicar tiempo a comunicarse con Él.
Sea prudente
A medida que la tecnología continúa evolucionando, todos tendremos que tomar muchas decisiones. En lugar de buscar reglas y listas específicas en la Iglesia, podemos acudir al Padre Celestial, al Salvador, a las Escrituras y a las palabras de los profetas modernos en busca de principios que nos ayuden a guiar nuestras decisiones. El Espíritu nos ayudará a saber si nuestras decisiones son correctas. Las palabras de Jacob son válidas tanto hoy como cuando las enseñó por primera vez: “¡Oh, sed prudentes! ¿Qué más puedo decir?” (Jacob 6:12).