El mar Rojo

4 – 10 abril

Éxodo 14–17

“Estad firmes y ved la salvación [de] Jehová”

Dios mandó a Moisés que escribiera en cuanto a sus experiencias “para memoria en un libro, y [se lo dijera] a Josué” (Éxodo 17:14). Del mismo modo, registrar sus experiencias espirituales les ayudará a usted y a sus seres queridos a recordar la bondad del Señor.

Anote sus impresiones

Los israelitas estaban atrapados; tenían el mar Rojo a un lado y al ejército de Faraón que avanzaba por el otro. En apariencia, su escape de Egipto sería fugaz. No obstante, Dios tenía un mensaje para los israelitas que deseaba que recordaran durante generaciones: “No temáis […]; Jehová peleará por vosotros” (Éxodo 14:13–14).

Desde aquella ocasión, cuando el pueblo de Dios necesitó fe y valor con frecuencia ha recurrido a este relato sobre la milagrosa liberación de Israel. Cuando Nefi quiso inspirar a sus hermanos, dijo: “… seamos fuertes como Moisés; porque él de cierto habló a las aguas del mar Rojo y se apartaron a uno y otro lado, y nuestros padres salieron de su cautividad sobre tierra seca” (1 Nefi 4:2). Cuando el rey Limhi quiso que su pueblo cautivo “levanta[ra] [la] cabez[a] y [se] regocija[ra]”, les recordó ese mismo relato (Mosíah 7:19). Cuando Alma quiso testificar a su hijo del poder de Dios, también se refirió a aquel relato (véase Alma 36:28). Y cuando nosotros necesitemos ser liberados —cuando necesitemos un poco más de fe, cuando necesitemos “esta[r] firmes y ve[r] la salvación [de] Jehová”—, podemos recordar cómo “salvó Jehová aquel día a Israel de manos de los egipcios” (Éxodo 14:13, 30).

Ideas para el estudio personal de las Escrituras

Éxodo 14

Dios tiene el poder para liberarme.

Al leer Éxodo 14:1–10, imagine cómo se habrán sentido los israelitas al ver que se acercaba el ejército de Faraón. Quizás sienta que necesita de un milagro para sobrevivir a algún desafío difícil que esté afrontando. ¿Qué aprende en Éxodo 14:13–31 que pueda ayudarle a procurar la liberación de Dios en su vida? ¿Qué ha aprendido sobre la forma en que Dios nos brinda liberación en la adversidad? Medite sobre el modo en que ha visto Su poder para liberar en su vida.

Véanse también Doctrina y Convenios 8:2–3; L. Tom Perry, “El poder de librarse”, Liahona, mayo de 2012, págs. 94–97; Mapas bíblicos, nro. 2, “El éxodo de los Israelitas de Egipto y su entrada en Canaán”.

Éxodo 15:22–27

El Señor puede hacer que lo amargo sea dulce.

Al leer en Éxodo 15:22–27 acerca de los viajes de Israel hacia la tierra prometida, piense en las cosas de su vida que le hayan parecido “amargas”, como las aguas de Mara. Considere las siguientes preguntas al meditar sobre esos versículos: ¿Cómo puede el Señor hacer que lo amargo de su vida sea dulce? ¿Qué valor han tenido esas experiencias en su vida? ¿Qué le sugieren los versículos 26 y 27 acerca de la forma en que el Señor nos bendice cuando escuchamos Su voz?

Éxodo 15:23–27; 16:1–15; 17:1–7

Puedo confiar en el Señor, aún durante los momentos difíciles.

Resulta tentador criticar a los israelitas porque murmuraban o se quejaban cuando sus circunstancias se tornaban difíciles, incluso después de todo lo que Dios había hecho por ellos. No obstante, al leer Éxodo 15:23–27; 16:1–15; 17:1–7, piense si alguna vez usted ha hecho lo mismo. ¿Qué aprende de las experiencias de los israelitas que pueda ayudarle a murmurar menos y confiar más plenamente en Dios? Por ejemplo, ¿qué diferencias observa entre el modo en que los israelitas reaccionaban ante las dificultades y el modo en que lo hacía Moisés? ¿Qué le enseñan estos versículos sobre Dios?

Véanse también 1 Nefi 2:11–12; “El pecado de la murmuración” (video), ChurchofJesusChrist.org.

El maná de Dios alimentó a Israel en el aspecto físico; también necesitamos alimento espiritual a diario. Fresco de Leopold Bruckner

Éxodo 16

Debo procurar alimento espiritual a diario.

Hay muchas lecciones espirituales que podemos aprender del milagro del maná, el cual se encuentra en Éxodo 16. Note las instrucciones detalladas que se dieron a los israelitas sobre cómo recolectar, utilizar y conservar el maná (véase Éxodo 16:16, 19, 22–26). ¿Qué halla en esas instrucciones que se aplique a usted conforme procura alimento espiritual a diario?

Véanse también Juan 6:31–35, 48–58 y los videos “El pan de cada día: Modelos”, “El pan de cada día: Experiencia” y “El pan de cada día: Cambio” (ChurchofJesusChrist.org).

Éxodo 17:1–7

Jesucristo es mi roca espiritual y el agua viva.

Mientras lee Éxodo 17:1–7, piense en el Salvador. ¿En qué sentido es Jesucristo como una roca para usted? (Véanse Salmo 62:6–7; Helamán 5:12). ¿En qué sentido es como el agua? (Véanse Juan 4:10–14; 1 Corintios 10:1–4; 1 Nefi 11:25).

Ideas para el estudio familiar de las Escrituras y la Noche de Hogar

Éxodo 14:13–22.Es posible que a los miembros de la familia les divierta tratar de “dividir” el agua en un tazón o en una bañera, tal como Moisés dividió el mar Rojo. Ayúdeles a entender que las aguas del mar Rojo no podrían haberse dividido sin el poder de Dios. ¿De qué manera hemos observado el poder de Dios en nuestra vida y en la de nuestros antepasados?

Éxodo 15:1–21.Tras cruzar milagrosamente el mar Rojo, los israelitas cantaron un cántico de alabanza que se conoce como el cántico de Moisés y que se halla en Éxodo 15:1–21. Como familia, examinen esos versículos en busca de expresiones que testifiquen de lo que Dios hizo por los israelitas, así como otras expresiones significativas. Luego, podrían cantar algún himno que recuerde a la familia lo que Dios ha hecho por ustedes.

Éxodo 16:1–5; 17:1–7.La lectura de Éxodo 16:1–5 y 17:1–7 podría conducir a un análisis sobre el Salvador como el Pan de Vida, como el Agua Viva y como nuestra Roca. ¿De qué manera esos relatos nos recuerdan lo que Jesucristo hace por nosotros? Como parte del análisis, podrían leer Juan 4:10–14; 6:29–35, 48–51; Helamán 5:12; Doctrina y Convenios 20:77, 79.

Éxodo 17:8–16.Tal vez podrían representar el relato sobre cómo Aarón y Hur le sostuvieron las manos a Moisés, y hablar en cuanto al modo en que aquello puede simbolizar cómo sostenemos a quienes Dios ha llamado a liderar. Además, podrían comparar el ejemplo de Aarón y Hur con la murmuración de los israelitas en contra de Moisés (que se describe en los capítulos 15–17). ¿Cuáles son algunas de las formas en que podemos ayudar y sostener a nuestros líderes? ¿Qué bendiciones recibimos nosotros y nuestros líderes al hacerlo?

Para consultar más ideas sobre cómo enseñar a los niños, véase la reseña de esta semana de Ven, sígueme — Para la Primaria.

Canción que se sugiere: “Oh Dios de Israel”, Himnos, nro. 5.

Cómo mejorar el estudio personal

Busque sus propias reflexiones espirituales. En el estudio individual y en el familiar, no se limiten a los versículos que se indican en estas reseñas de estudio. Es probable que el Señor tenga mensajes para usted en estos capítulos y que no se recalquen aquí. Procure recibir inspiración con espíritu de oración.

Ilustración de Moisés al dividir el mar Rojo, por Robert T. Barrett.