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Lección 5—Doctrina y Convenios 1:30–33: “La única iglesia verdadera y viviente”


“Lección 5—Doctrina y Convenios 1:30–33: ‘La única Iglesia verdadera y viviente’”, Doctrina y Convenios: Manual del maestro de Seminario, 2025

“Doctrina y Convenios 1:30–33”, Doctrina y Convenios: Manual del maestro de Seminario

Lección 5: Doctrina y Convenios 1

Doctrina y Convenios 1:30–33

La única Iglesia verdadera y viviente

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el logo oficial de la Iglesia

En Su prefacio de Doctrina y Convenios, el Señor proclamó la importancia de la Iglesia de Jesucristo recientemente restaurada. Declaró que la Iglesia es “la única iglesia verdadera y viviente sobre la faz de toda la tierra” (Doctrina y Convenios 1:30). La finalidad de esta lección es ayudar a los alumnos a sentir la importancia de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días como la única Iglesia verdadera.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

La Iglesia del Señor

Para comenzar la lección, podría compartir la pregunta siguiente y las declaraciones que la acompañan e invitar a varios alumnos a expresar sus respuestas.

¿Por qué algunas personas podrían estar de acuerdo o en desacuerdo con las declaraciones siguientes?

  1. No creo que necesite una iglesia.

  2. Todas las iglesias son igualmente verdaderas.

  3. La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es la única iglesia verdadera.

Podría pedir a los alumnos que evalúen en silencio sus propias opiniones en cuanto a esas declaraciones.

Con tantas religiones y opiniones diferentes, puede ser difícil saber qué es verdad. El Señor nos ha dado guía por medio de las Escrituras para ayudarnos a confiar en lo que es verdadero y para saber lo que Él desea para nosotros.

Como prefacio de Doctrina y Convenios, el Señor reveló una advertencia “a todo pueblo” (Doctrina y Convenios 1:4). Como parte de Su mensaje, el Señor hizo una clara declaración respecto a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Lee Doctrina y Convenios 1:30 y busca la manera en que el Señor describe a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Doctrina y Convenios 1:30 es un pasaje del Dominio de las Escrituras. Usted podría invitar a los alumnos a marcar los pasajes del Dominio de la doctrina de una forma especial para que puedan localizarlos con facilidad.

  • ¿Qué encontraste?

“… la única iglesia verdadera y viviente sobre la faz de toda la tierra”

Considere invitar a los alumnos a marcar en sus Escrituras la frase del encabezado anterior. Dedique un tiempo a ayudar a los alumnos a entender lo que significa que la Iglesia es tanto verdadera como viviente. Una manera de hacerlo consiste en lo siguiente:

Haga dos columnas en la pizarra. Invite a los alumnos a estudiar el volante y a marcar frases que los ayuden a entender cómo la Iglesia es tanto “verdadera” como “viviente”.

La Iglesia verdadera y viviente

El élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó lo siguiente:

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Élder David A. Bednar

El Señor ha declarado que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es “la única iglesia verdadera y viviente sobre la faz de toda la tierra” (D. y C 1:30). Esta Iglesia restaurada es verdadera porque es la Iglesia del Salvador; Él es “el camino, y la verdad y la vida” (Juan 14:6). Y es una iglesia viviente debido a las obras y los dones del Espíritu Santo (David A. Bednar, “Recibe el Espíritu Santo”, Liahona, noviembre de 2010, pág. 97).

El presidente Dallin H. Oaks, de la Primera Presidencia, enseñó lo siguiente:

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Presidente Dallin H. Oaks

Hay tres características: (1) la plenitud de la doctrina, (2) el poder del sacerdocio y (3) el testimonio de Jesucristo, que explican por qué Dios ha declarado […] que esta es la única iglesia verdadera y viviente sobre la faz de toda la tierra […].

El Evangelio restaurado de Jesucristo lo abarca todo, es universal, misericordioso y verdadero […].

Como resultado de tener el poder del sacerdocio, los líderes y miembros debidamente autorizados de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días reciben el poder para llevar a cabo las ordenanzas requeridas del sacerdocio, como el bautismo, conferir el don del Espíritu Santo y la bendición y el reparto de la Santa Cena.

Nuestro amado profeta […], al igual que cada profeta y Presidente de la Iglesia, posee las llaves del sacerdocio, las cuales le dan derecho a recibir revelación para toda la Iglesia. Esta Iglesia es “viviente” porque tenemos profetas que siguen dándonos la palabra del Señor necesaria para nuestros tiempos.

La tercera razón por la que somos la única iglesia verdadera es que tenemos la verdad restaurada acerca de la naturaleza de Dios y de nuestra relación con Él; es por eso que tenemos un testimonio singular de Jesucristo (véase Dallin H. Oaks, “La única iglesia verdadera y viviente”, Liahona, agosto de 2011, págs. 49, 50, 51).

Invite a los alumnos a compartir lo que hayan marcado. Podrían escribir lo que encontraron en las dos columnas de la pizarra. Podría preguntar a los alumnos cómo nos bendice el Señor por medio de cada aspecto de Su Iglesia que marcaron. Para ayudar a los alumnos a entender el punto del presidente Oaks en cuanto a nuestro testimonio único de Cristo, podría pedirles que intercambien ideas respecto a las verdades que hayan aprendido del Padre Celestial y Jesucristo por medio del profeta José Smith, el Libro de Mormón o los profetas modernos. Podrían agregar sus pensamientos a la columna “Verdadera”.

Si fuera necesario, ayude a los alumnos a comprender que el testimonio del Señor en el que declara que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es “la única iglesia verdadera y viviente” no significa que otras iglesias no posean nada de verdad.

Las bendiciones de la Iglesia de Jesucristo

Después de declarar que la Iglesia es “la única iglesia verdadera y viviente”, el Salvador agregó algunas razones por las que Él restauró Su Iglesia. Lee Doctrina y Convenios 1:31–33 y busca lo que Él enseñó.

Los alumnos podrían conversar con un compañero y resumir lo que aprendieron de esos versículos. Luego, podrían analizar juntos la pregunta siguiente.

  • ¿Cómo te ayuda la Iglesia verdadera y viviente de Jesucristo a acudir a Él en busca del perdón?

Brinde a los alumnos la oportunidad de expresar lo que hayan aprendido durante esta lección. Una manera de hacerlo consiste en invitar a los alumnos a responder la situación hipotética siguiente en sus diarios de estudio. Cuando hayan terminado, considere invitar a varios alumnos a hablar sobre lo que escribieron.

Imagina que alguien te pregunta qué hace que tu Iglesia sea diferente a las demás. ¿Cómo podrías responderle a esa persona de una manera que pueda ayudarle a desear saber más acerca de la Iglesia? Podrías incluir lo siguiente en tu respuesta:

  1. Lo que aprendiste hoy del testimonio del Señor sobre Su Iglesia y la forma en que te sientes al respecto

  2. Maneras en que has sentido o visto que la Iglesia es verdadera o viviente

  3. Bendiciones que has recibido como miembro de la Iglesia de Cristo

Para concluir, podrías compartir tu propio testimonio de las bendiciones de la Iglesia verdadera y viviente de Jesucristo y cómo el pertenecer a ella te ha ayudado a acercarte más al Salvador.

Memorizar

Tal vez desee ayudar a los alumnos a memorizar la referencia y la frase clave del pasaje durante esta lección y repasarlas en lecciones futuras. La frase clave del pasaje es “La única iglesia verdadera y viviente”. En los materiales del apéndice que se encuentran bajo el encabezamiento “Actividades de repaso del Dominio de la doctrina” hay ideas para las actividades de memorización.

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