Seminario
Lección 146: Evalúa tu aprendizaje 9: Doctrina y Convenios 115–134


“Lección 146: Evalúa tu aprendizaje 9: Doctrina y Convenios 115–134”, Doctrina y Convenios: Manual del maestro de Seminario, 2025

“Evalúa tu aprendizaje 9”, Doctrina y Convenios: Manual del maestro de Seminario

Lección 146: Doctrina y Convenios 133–134

Evalúa tu aprendizaje 9

Doctrina y Convenios 115–134

Imagen
Templo de Salt Lake City

Llegar a ser más semejante a Cristo requiere un esfuerzo continuo y es un proceso que dura toda la vida. Evaluar periódicamente nuestro crecimiento espiritual puede ayudarnos a ver el progreso que estamos logrando y puede acercarnos más al Salvador. Esta lección puede ayudar a los alumnos a evaluar la forma en que su estudio de Doctrina y Convenios los ha ayudado a crecer espiritualmente.

Posibles actividades de aprendizaje

Progreso lento y constante

Valore la posibilidad de mostrar a los alumnos imágenes de diferentes etapas de la construcción del Templo de Salt Lake. Pregúnteles si saben cuánto tiempo tomó terminar este templo (cuarenta años). Podría pedirle a los alumnos que compartan si sienten que el tiempo y el esfuerzo que requirió terminar el templo valió la pena y por qué.

Imagen
Construcción del Templo de Salt Lake City 1

Utilizada con permiso, Sociedad Histórica del Estado de Utah

Imagen
Construcción del Templo de Salt Lake City 2
Imagen
Construcción del Templo de Salt Lake City 3
Imagen
Construcción del Templo de Salt Lake City 4

Ayude a los alumnos a comparar su crecimiento espiritual con la construcción del templo. Una manera de hacerlo es invitarlos a pensar en la experiencia de los constructores al trabajar en este largo proyecto. Podría hacer las preguntas siguientes:

  • ¿Cómo se habrían sentido al ver todo el trabajo que aún quedaba por hacer después de trabajar diez o veinte años?

  • Si fueran uno de los obreros, ¿qué podría haberlos motivado a seguir trabajando?

  • ¿De qué forma creen que la experiencia de los obreros podría compararse con nuestros esfuerzos por crecer espiritualmente y llegar a ser más semejantes al Salvador?

Dedica un momento a meditar acerca de tu vida y lo que has hecho para tratar de ser más semejante a Jesucristo. Piensa en la forma en que estás progresando, incluso de maneras pequeñas, para llegar a ser más semejante a Cristo.

  • Aunque el proceso es largo, ¿qué estás aprendiendo acerca del valor de esforzarse por llegar a ser más semejante a Jesucristo cada día?

Pida a los alumnos que hablen de lo que hayan aprendido y cómo sienten que han progresado en las últimas semanas. A fin de ayudarlos a compartir, podría invitarlos a repasar lo que hayan aprendido recientemente de su estudio de Doctrina y Convenios. Podría alentarlos a repasar su diario personal o a ver lo que han marcado recientemente en su ejemplar de las Escrituras.

Las actividades siguientes pueden brindar a los alumnos la oportunidad de explicar lo que están aprendiendo, evaluar y compartir sus sentimientos, y hablar sobre su progreso al vivir los principios del Evangelio. Si el estudio de la clase de Doctrina y Convenios 115–134 se centró en verdades diferentes a las de las actividades siguientes, podría adaptar las actividades para incluir esas verdades.

Explicar la importancia del bautismo por los muertos

A fin de dar a los alumnos la oportunidad de explicar la doctrina del bautismo por los muertos, considere mostrar la imagen siguiente de una pila bautismal del templo y presentar una situación hipotética como la que se encuentra a continuación.

Imagen
pila bautismal del templo

Aubrie y sus amigas están entusiasmadas por ir al templo. Una amiga, que no está familiarizada con los templos, nota su entusiasmo y más tarde le pregunta a Aubrie sobre lo que hacen en los templos. Aubrie busca una foto de una pila bautismal del templo en su teléfono y comienza a explicar acerca del bautismo por los muertos.

Dé a los alumnos la oportunidad de compartir lo que dirían si se les pidiera que explicaran a un amigo el bautismo por los muertos. Podría invitar a los alumnos a hacer una dramatización de dos en dos o en grupos pequeños.

Después de que los alumnos hayan tenido la oportunidad de hacer una dramatización, invítelos a repasar lo que aprendieron de Doctrina y Convenios 124, 127 y 128 para ver si hay algo que añadirían a su explicación. Podría pedir a los alumnos que repasen juntos, en grupos, con las preguntas siguientes en mente.

  • ¿Cuáles son algunas de las cosas que Aubrie podría compartir para ayudar a su amiga a entender esa sagrada ordenanza como parte del Plan de Dios?

  • ¿Qué podría Aubrie ayudar a que su amiga comprenda acerca del Padre Celestial o Jesucristo?

Una vez que los alumnos hayan repasado y analizado la doctrina del bautismo por los muertos, podría darles otra oportunidad de hacer una dramatización de la situación hipotética e incluir lo que aprendieron.

Participar en la obra del templo y de historia familiar

El objetivo de esta actividad es ayudar a los alumnos a que hablen de la manera en que han participado en la obra del templo y de historia familiar. En primer lugar, podría ayudar a los alumnos a recordar algunas de las grandes bendiciones relacionadas con llevar a cabo la obra del Señor al compartir la declaración siguiente.

El presidente Henry B. Eyring, de la Primera Presidencia, enseñó lo siguiente:

Imagen
Presidente Henry B. Eyring

Muchos jóvenes han descubierto que dar de su tiempo para hacer investigación de historia familiar y la obra del templo ha aumentado su testimonio del Plan de Salvación; ha aumentado la influencia del Espíritu en su vida y disminuido la influencia del adversario; los ha ayudado a sentirse más cerca de su familia y más cerca del Señor Jesucristo. Han aprendido que esta obra no solo salva a los muertos; nos salva a todos nosotros (véase D. y C. 128:18) (Henry B. Eyring, “Congregar a la familia de Dios”, Liahona, mayo de 2017, pág. 22).

  • ¿Qué bendiciones has descubierto al participar en la obra del templo y de historia familiar?

En las lecciones de Doctrina y Convenios 127–128, es posible que haya invitado a los alumnos a hacer un plan para participar en esta obra de alguna manera. Dé tiempo a los alumnos para que reflexionen sobre su plan y aliéntelos a compartir lo que hayan hecho.

Si fuera necesario, podría recordarles algunas de las maneras en que podrían elegir participar. Estas podrían incluir diferentes actividades en FamilySearch.org o en la aplicación Árbol Familiar. Considere invitar a los alumnos a describir o, si es posible, a mostrar a la clase lo que han hecho o aprendido. Es posible que los alumnos hayan asistido al templo para participar en ordenanzas sagradas por familiares fallecidos. Podría invitarlos a expresar los sentimientos que tengan acerca de esa experiencia.

Sentir una mayor confianza en Dios durante las pruebas

Es posible que haya utilizado piedras ásperas y lisas como lección práctica al enseñar Doctrina y Convenios 122; si es así, considere mostrarlas otra vez. Estas piedras pueden hacer recordar a los alumnos lo que han aprendido y permitirles hablar de sus sentimientos sobre el propósito de las pruebas y de la confianza en Dios al experimentarlas. Si cree que resultaría útil, podría recordar a los alumnos algunas de las lecciones sobre este tema. Es posible que los alumnos hayan aprendido acerca de las pruebas en Doctrina y Convenios 98, 101, 105, 111, 121–123 y otras secciones. También podrían recordar lecciones valiosas sobre la confianza en Dios de la lección sobre la expulsión de los santos de Misuri.

Podría invitar a los alumnos a repasar versículos de las Escrituras que puedan ayudar, y que analicen lo que hayan aprendido.

  • ¿De qué manera las cosas que aprendiste te han ayudado a sentirte de forma diferente en cuanto a tus pruebas?

  • ¿Qué has aprendido sobre el Padre Celestial y Jesucristo al experimentar momentos difíciles?

Invite a los alumnos a escribir en su diario sus sentimientos acerca de cómo el Padre Celestial y Jesucristo los han ayudado durante sus pruebas. Pídales que piensen en cómo lo que han aprendido y experimentado ha influido en su fe en Jesucristo. Quizás quiera invitar a aquellos alumnos que se sientan cómodos, a que compartan lo que escribieron. Brinde oportunidades para que den su testimonio de la ayuda divina que han recibido.

Imprimir