Lección 211: Enseñanzas de los líderes de la Iglesia

“Decisiones para la eternidad”

Estudiar las enseñanzas de los líderes de la Iglesia

En el transcurso del año, los alumnos tendrán varias oportunidades de aprender en Seminario de las enseñanzas de líderes inspirados de la Iglesia de Jesucristo en los últimos días. Esta lección ofrece un ejemplo de cómo los maestros podrían utilizar el documento “Plantilla: Enseñanzas de los líderes de la Iglesia” para guiar a la clase en el estudio de estos mensajes. El ejemplo que se utiliza en esta lección es “Decisiones para la eternidad” por el presidente Russell M. Nelson (devocional mundial para jóvenes adultos, 15 de mayo de 2022, broadcasts.ChurchofJesusChrist.org). Esta lección puede ayudar a los alumnos a profundizar su comprensión de los principios que los ayudarán a prepararse para la vida eterna.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

Nota: Esta lección ofrece un ejemplo de cómo los maestros podrían utilizar el documento “Plantilla: Enseñanzas de los líderes de la Iglesia” para ayudar a los alumnos a estudiar los mensajes de los líderes de la Iglesia. Puede adaptar las ideas de esta lección, utilizar una combinación diferente de ideas de la plantilla o utilizar sus propias ideas que satisfagan mejor las necesidades de sus alumnos.

Comenzar la lección

Comience la lección de manera que despierte el interés de los alumnos y los ayude a preparar su mente y su corazón para la experiencia de aprendizaje. Considere utilizar una declaración o concepto del discurso del presidente Nelson “Decisiones para la eternidad”. El siguiente es un ejemplo de cómo comenzar la lección.

Escriba la declaración siguiente en la pizarra e invite a los alumnos a pensar en su futuro en esta vida y en la eternidad:

En un discurso dirigido a los jóvenes adultos, el presidente Russell M. Nelson expresó lo siguiente:

Quiero hablarles sobre su futuro (Russell M. Nelson, “Decisiones para la eternidad”, devocional mundial para jóvenes adultos, 15 de mayo de 2022, broadcasts.ChurchofJesusChrist.org)

Responde las preguntas siguientes en tu diario de estudio:

• ¿Cuáles son tus pensamientos y sentimientos cuando piensas en tu futuro en esta vida y en la eternidad?

• Si pudieras hablar sobre tu futuro con el profeta de Dios, ¿qué le preguntarías?

Podría invitar a algunos alumnos a compartir lo que escribieron en su diario de estudio. También podría invitar a los alumnos a escribir en la pizarra algunas de sus preguntas sobre su futuro. Esas preguntas podrían ayudarlos a prepararse para estudiar el mensaje.

Estudiar el mensaje

Mientras los alumnos estudian, anímelos a centrarse en aumentar su conocimiento y fortalecer su testimonio del Padre Celestial y Jesucristo. Invítelos a anotar los pensamientos y sentimientos que puedan provenir del Espíritu Santo mientras estudian.

En esta parte de la lección, utilizarán la idea “Buscar” de la sección “Estudiar el mensaje” del documento “Plantilla: Enseñanzas de los líderes de la Iglesia”. El objetivo de esta sección es ayudar a los alumnos a centrar su estudio del discurso.

Si los alumnos no tienen acceso al discurso del presidente Nelson “Decisiones para la eternidad”, puede entregarles los tres volantes que contienen partes de sus palabras. Podría dividir la clase en tres grupos y pedir a cada uno que estudie un volante diferente. También podría imprimir copias de todo el discurso para que los alumnos lo estudien en grupos pequeños. Invite a los alumnos a seguir las instrucciones siguientes mientras completan la actividad.

Mientras estudias el discurso del presidente Nelson “Decisiones para la eternidad”, busca verdades que te puedan ayudar a prepararte para tu futuro en la tierra y la vida eterna con el Padre Celestial y Jesucristo. También puedes buscar enseñanzas que respondan las preguntas sobre tu futuro que escribiste en tu diario de estudio o en la pizarra.

Decisiones para la eternidad, Parte 1

Mi propósito esta noche es asegurarme de que sus ojos se abran totalmente a la verdad de que esta vida realmente es el tiempo en que llegan a decidir qué tipo de vida quieren vivir ustedes para siempre. Ahora es su tiempo “de preparación para presentarse ante Dios” [véanse Alma 12:24; 34:32] […].

Cada decisión justa que tomen aquí generará enormes dividendos ahora, pero las decisiones justas de la vida terrenal reportarán unos dividendos inimaginables en la eternidad. Si eligen hacer convenios con Dios y son fieles a esos convenios, tienen la promesa de “gloria [aumentada] sobre su cabeza para siempre jamás” [Abraham 3:26] […].

El adversario, por supuesto, no quiere que ustedes siquiera piensen en el mañana, y mucho menos en la vida eterna. Pero, por favor, no actúen con ignorancia o ingenuidad sobre las oportunidades y los desafíos de la vida terrenal. Teniendo esto en cuenta, hay tres verdades fundamentales que deben entender y que los ayudarán a prepararse para su trayectoria futura […].

Primero, conozcan la verdad de quiénes son. Creo que si el Señor estuviera hablándoles directamente esta noche, la primera cosa que se aseguraría de que entendieran es cuál es su verdadera identidad. Mis queridos amigos, ustedes son literalmente hijos procreados como espíritus de Dios. Ustedes han cantado esta verdad desde que aprendieron las palabras del himno “Soy un hijo de Dios” [Himnos, nro. 196]. Pero ¿ha quedado esa verdad eterna grabada en sus corazones? ¿Los ha rescatado esa verdad cuando han tenido que enfrentarse a la tentación?

Temo que hayan oído tan a menudo esta verdad que les suene más como un eslogan que como una verdad eterna; y, sin embargo, la manera en la que piensan sobre quiénes son realmente ustedes afecta a casi toda decisión que tomarán […].

¿Quiénes son ustedes?

Primero y más importante, son hijos de Dios.

Segundo, como miembros de la Iglesia, son hijos del convenio; y tercero, son discípulos de Jesucristo.

Esta noche, les ruego que nunca reemplacen estos tres identificadores primordiales e inmutables por otros, porque el hacerlo podría obstaculizar su progreso o encasillarlos en un estereotipo que posiblemente podría frustrar su progreso eterno […].

Por supuesto, hay muchas etiquetas que pueden resultar importantes para ustedes. Por favor, no me malinterpreten, no estoy diciendo que otras maneras de designarnos e identificarnos no tengan significado. Lo que estoy diciendo sencillamente es que ningún identificador debería desplazar, reemplazar o tener prioridad por sobre estas tres denominaciones perdurables: “hijo de Dios”, “hijo del convenio” y “discípulo de Jesucristo”.

Cualquier otra forma de identificarnos que no sea compatible con estas tres designaciones básicas tarde o temprano los defraudará. Otras etiquetas los decepcionarán con el tiempo porque no tienen el poder de llevarlos a la vida eterna en el reino celestial de Dios […].

No se confundan al respecto: su potencial es divino. Si lo buscan con diligencia, Dios les dará destellos de quiénes pueden llegar a ser (Russell M. Nelson, “Decisiones para la eternidad”, devocional mundial para jóvenes adultos, 15 de mayo de 2022, broadcasts.ChurchofJesusChrist.org).

Decisiones para la eternidad, Parte 2

Segundo: conozcan la verdad de lo que Dios el Padre Celestial y Su Hijo Jesucristo les han ofrecido.

En resumen, ¡les han ofrecido todo!

El plan del Padre Celestial para Sus hijos nos permite vivir donde y como Él vive y, finalmente, llegar a ser cada vez más semejantes a Él. Su plan pone a nuestra disposición las más ricas bendiciones de toda la eternidad, incluyendo el potencial de llegar a ser “coherederos con Cristo” [Romanos 8:17].

Dios lo sabe todo y lo ve todo. En toda la eternidad, nadie los conocerá mejor o se preocupará más por ustedes que Él. Nadie estará más cerca de ustedes que Él. Pueden volcar su corazón a Él y confiar en que Él enviará al Espíritu Santo y ángeles para cuidar de ustedes. Él demostró Su más grande amor cuando envió a Su Hijo Unigénito para morir por ustedes, para ser su Salvador y su Redentor.

Mediante Su expiación, el Señor Jesucristo venció al mundo [véanse Juan 16:33; Doctrina y Convenios 50:41]. Por tanto, Él es “poderoso para […] limpiar[los] de toda iniquidad” [Alma 7:14]. Él los librará de sus circunstancias más agobiantes a Su manera y en Su propio tiempo. Conforme ustedes vengan a Él con fe, Él los guiará, preservará y protegerá. Él sanará sus corazones rotos y les dará consuelo en su angustia [véanse Lucas 4:18; Alma 7:10–12]. Él les dará acceso a Su poder y hará que lo que parece imposible en sus vidas sea posible […].

Dios tiene un amor especial por cada persona que hace convenio con Él en las aguas del bautismo, y ese amor divino se profundiza a medida que se llevan a cabo y se cumplen fielmente convenios adicionales. Y luego, al final de la vida terrenal, ¡qué preciada es la reunión de cada hijo del convenio con nuestro Padre Celestial! [véase Salmo 116:15].

Él también se preocupa profundamente de que cada uno de Sus hijos tenga una oportunidad de escuchar las buenas nuevas del Evangelio restaurado. El Padre Celestial ha estado enviando hijos Suyos a la tierra por más de seis milenios. La mayoría de esas personas no han recibido todavía las ordenanzas que los habilitarían para obtener la vida eterna. Esta es la razón por la que los templos tienen tanta importancia, es la razón por la que el recogimiento de Israel en ambos lados del velo es la causa más importante de la tierra en la actualidad. Ustedes, mis queridos compañeros en esta santa obra, cumplen una función esencial en este recogimiento, y les agradezco por ello (Russell M. Nelson, “Decisiones para la eternidad”, devocional mundial para jóvenes adultos, 15 de mayo de 2022, broadcasts.ChurchofJesusChrist.org).

Decisiones para la eternidad, Parte 3

Conozcan la verdad relacionada con la conversión de ustedes. La verdad es que ustedes deben hacerse responsables de su propia conversión; nadie más puede hacerlo por ustedes.

Entonces, ¿puedo invitarlos a hacerse algunas preguntas? ¿Desean sentir paz en cuanto a las preocupaciones que actualmente los agobian? ¿Desean conocer mejor a Jesucristo? ¿Desean aprender cómo Su poder divino puede sanar sus heridas y debilidades? ¿Desean experimentar el dulce y reconfortante poder de la expiación de Jesucristo actuando en sus propias vidas?

Buscar respuestas a estas preguntas requerirá esfuerzo, mucho esfuerzo. Les ruego que se hagan cargo de su propio testimonio. Trabajen para conseguirlo; háganse responsables de él. Cuídenlo, nútranlo de manera que crezca, aliméntenlo con la verdad. No lo mezclen con las filosofías falsas de hombres y mujeres incrédulos para luego preguntarse por qué se está debilitando

Practiquen la oración humilde, sincera y diaria. Nútranse con las palabras de los profetas antiguos y modernos. Pídanle a Dios que les enseñe cómo escucharlo mejor. Dediquen más tiempo a ir al templo y a la obra de historia familiar.

Al hacer de su testimonio su prioridad mayor, observen cómo se producen milagros en sus vidas.

Si tienen preguntas, y espero que las tengan, busquen respuestas con el ferviente deseo de creer. Aprendan todo lo que puedan sobre el Evangelio y asegúrense de acudir a fuentes llenas de verdad para encontrar guía. Vivimos en la dispensación en la que “nada se retendrá” [Doctrina y Convenios 121:28]; por ello, con el tiempo, el Señor contestará todas nuestras preguntas

Mientras tanto, sumérjanse en la rica provisión de revelación que tenemos al alcance de nuestra mano. Les prometo que, al hacerlo, se fortalecerá su testimonio, incluso aunque algunas de sus preguntas todavía no tengan respuesta. Sus preguntas sinceras, hechas con fe, siempre los llevarán a tener mayor fe y más conocimiento […].

Al hacerse responsables de su propio testimonio y hacerlo crecer, se convertirán en un instrumento más poderoso en las manos del Señor. Estarán inspirados por “una causa mejor” [Alma 43:45]: ¡la causa de Jesucristo!

No hay nada que esté ocurriendo en esta tierra que sea más importante para Él que el recogimiento de Israel. Hagan saber a su Padre Celestial que quieren ayudar en esta obra. Pídanle que los ponga a trabajar en esta causa gloriosa. Y luego den un paso atrás y maravíllense de lo que ocurre cuando permiten que Dios prevalezca en sus vidas.

Mis queridos jóvenes amigos, ¡los amo! Gracias. Creo en ustedes. Como profeta del Señor, los bendigo para que conozcan la verdad de quiénes son y que atesoren la verdad de lo que verdaderamente es su glorioso potencial. Los bendigo para que se hagan responsables de su propio testimonio y los bendigo para que tengan el deseo y la fortaleza de guardar sus convenios.

A medida que lo hagan, les prometo que experimentarán crecimiento espiritual, estarán libres del miedo y tendrán una confianza que ahora escasamente pueden imaginar. Tendrán la fortaleza para tener una influencia positiva mucho más allá de su capacidad natural, y les prometo que su futuro será algo mucho más apasionante que cualquier cosa que puedan creer ahora (Russell M. Nelson, “Decisiones para la eternidad”, devocional mundial para jóvenes adultos, 15 de mayo de 2022, broadcasts.ChurchofJesusChrist.org).

Invite a los alumnos a reflexionar sobre qué aprendieron que pueda ayudarlos a prepararse para su vida futura en la tierra y en la vida eterna. También podrían reflexionar sobre cuáles de sus preguntas sobre el futuro fueron contestadas y de qué forma. Podría pedir a algunos alumnos que digan cómo fueron contestadas sus preguntas.

Profundizar la comprensión

En esta parte de la lección, utilizarán la idea “Crea algo” de la sección “Profundizar la comprensión” del documento “Plantilla: Enseñanzas de los líderes de la Iglesia”.

El objetivo de esta sección es ayudar a los alumnos a reflexionar y analizar el discurso del presidente Nelson “Decisiones para la eternidad”.

Reflexiona sobre lo que aprendiste mientras estudiabas el mensaje del presidente Nelson. Crea algo que pueda ayudarte a recordar lo que aprendiste o que pueda inspirar a otros a prepararse para un futuro y una vida eterna significativos. A continuación, hay algunos ejemplos de lo que podrías crear:

• Un dibujo

• Un poema

• Un meme

• Una publicación en las redes sociales

  Si es posible, puede entregarles papel y otros materiales necesarios. Cuando los alumnos hayan terminado, considere invitar a algunos a compartir lo que hayan creado. A medida que hablen, podría hacerles preguntas de seguimiento como las siguientes:

• ¿Qué parte del mensaje del presidente Nelson te inspiró a crear esto? ¿Por qué te inspiró?

• ¿Cómo podría el recuerdo de ese mensaje guiarte ahora y en el futuro?

• ¿Cómo podría tu creación motivar a alguien a acudir al Padre Celestial y a Jesucristo?

Considere compartir su testimonio sobre las verdades que lo inspiraron del mensaje del presidente Nelson. Anime a los alumnos a actuar de acuerdo con la inspiración que hayan sentido.