¿Qué ideas mundanas te rodean y a veces te dificultan discernir la verdad? Los santos de Corinto estaban confundidos por ideas mundanas y el apóstol Pablo intentó ayudarlos a ver cómo podían aprender verdades espirituales duraderas. Esta lección te ayudará a invitar al Espíritu Santo para poder aprender cosas espirituales.
“Pero, ¿cómo lo sabe?”
El presidente Boyd K. Packer (1924–2015), del Cuórum de los Doce Apóstoles, contó el siguiente relato:
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Último retrato oficial del élder Boyd K. Packer, del Cuórum de los Doce Apóstoles, 2000. Él falleció el 3 de septiembre de 2015.
Al viajar en un avión iba sentado junto a un hombre que profesaba ser ateo y que insistía en su incredulidad tan tenazmente que sentí la necesidad de expresarle mi testimonio. “Está equivocado”, le dije, “hay un Dios. ¡Yo sé que Él existe!”.
“No lo sabe, ¡nadie lo sabe! ¡No puede saberlo!”, protestó él. Cuando vio que yo no cedía, el ateo, que era abogado, hizo lo que quizás sea la pregunta clave en lo que respecta al tema del testimonio. “Muy bien”, habló en tono despectivo y burlón. “Usted dice que sabe… Pero, ¿cómo lo sabe?”.
(Véase Boyd K. Packer, “Lámpara de Jehová”, Liahona, octubre de 1983, págs. 27–28)
¿Has visto este tipo de preguntas en el mundo actual?
¿Cómo responderías a la pregunta de ese hombre?
Mientras estudies, reflexiona sobre qué tan bien entiendes cómo aprender verdades espirituales y busca ideas que puedan ayudarte a aprender más.
Aprender verdades espirituales
Los santos de Corinto habían confundido ideas y prácticas mundanas con vivir el Evangelio. Como resultado, cayeron en muchos errores. Pablo les escribió para ayudarlos a comprender cómo aprender cosas espirituales.
Lee 1 Corintios 2:9–14 en busca de ideas que nos puedan ayudar a aprender verdades espirituales.
Ten en cuenta que el “hombre natural” que se menciona en el versículo 14 es “[l]a persona que se deja influir por las pasiones, los deseos, apetitos y sentidos de la carne en lugar de escuchar la inspiración del Santo Espíritu” (Guía para el Estudio de las Escrituras, “Hombre natural”, scriptures.ChurchofJesusChrist.org).
¿Qué versículos o frases te llamaron la atención? ¿Qué te gustó de ellos?
¿Qué aprendiste sobre el Padre Celestial y Su amor por ti en el versículo 9?
¿Qué verdades encontraste sobre la forma en que el Padre Celestial revela conocimiento a Sus hijos?
Una verdad que se enseña en estos versículos es que podemos conocer y entender las cosas de Dios únicamente por medio de Su Espíritu.
Como un posible ejemplo de no entender cómo aprender verdades espirituales, lee lo que sucedió cuando el presidente Packer trató de explicarle cómo sabía que Dios era real al ateo del avión:
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Último retrato oficial del élder Boyd K. Packer, del Cuórum de los Doce Apóstoles, 2000. Él falleció el 3 de septiembre de 2015.
Cuando usé las palabras Espíritu y testigo, el ateo respondió: “No sé de qué me está hablando”. Las palabras oración, discernimiento y fe no tenían para él ningún significado.
(Véase Boyd K. Packer, “Lámpara de Jehová”, Liahona, octubre de 1983, págs. 27–28)
Aprender por el Espíritu
1. Crea una lista de verdades en tu diario de estudio según se indica en el siguiente párrafo. Luego, responde las dos preguntas que siguen.
En tu diario de estudio, enumera algunas verdades espirituales que has aprendido por medio del Espíritu Santo. Además, enumera algunas verdades sobre las que deseas obtener un testimonio. Algunos ejemplos podrían incluir lo siguiente: El Padre Celestial es real y me ama, Jesucristo es mi Salvador y José Smith fue un profeta de Dios.
Elige dos de las verdades que encontraste y contesta las siguientes preguntas:
¿Cómo te indicaría el mundo que descubras la verdad sobre este tema?
¿Qué hiciste o qué podrías hacer para llegar a conocer la verdad por medio del Espíritu Santo?
Si deseas obtener más información sobre el aprendizaje de la verdad por medio del Espíritu Santo, podrías estudiar algunos de los siguientes recursos:
Ayudar a los demás a aprender por medio del Espíritu
Lee lo siguiente para completar la historia del presidente Packer. Cuando el hombre del avión rechazó las explicaciones del presidente Packer, el presidente Packer se sintió inspirado a pedirle al hombre que describiera el sabor de la sal:
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Último retrato oficial del élder Boyd K. Packer, del Cuórum de los Doce Apóstoles, 2000. Él falleció el 3 de septiembre de 2015.
Naturalmente, después de varios intentos, no pudo hacerlo. No pudo comunicarme, por medio de las palabras solamente, una experiencia tan común y ordinaria como la de gustar la sal. De nuevo le expresé mi testimonio y le dije: “Sé que Dios existe. Usted ridiculizó ese testimonio diciéndome que si yo verdaderamente lo sé, debo ser capaz de explicarle exactamente cómo sé. Mi amigo, hablando desde un punto de vista espiritual, he probado la sal. No me es posible comunicarle verbalmente cómo he adquirido este conocimiento de la misma forma en que usted no ha podido decirme qué sabor tiene la sal. Pero le repito, ¡Dios existe! ¡Es un Dios vivo! Y simplemente porque usted no lo sabe, no trate de decirme que yo tampoco lo sé” […].
Desde esa experiencia, nunca más me he sentido humillado ni avergonzado por no poder explicar solo por medio de la palabra todo lo que sé espiritualmente.
(Véase Boyd K. Packer, “La lámpara de Jehová”, Liahona, diciembre de 1988, pág. 35)
2. Responde las siguientes preguntas en tu diario de estudio:
¿Por qué el Espíritu Santo es una mejor fuente de conocimiento que la sabiduría y el razonamiento del mundo?
¿Qué puedes hacer para buscar conocimiento del Padre Celestial?
Si lo deseas, escribe en tu diario de estudio lo que te gustaría hacer para seguir aprendiendo la verdad por el poder del Espíritu Santo.
Opcional: ¿Quieres aprender más?
¿Qué puedo hacer para aprender cosas espirituales?
El élder Paul V. Johnson, de los Setenta, declaró:
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El élder Paul V. Johnson, del Cuórum de los Setenta, retrato oficial, 2021.
Las respuestas a preguntas espirituales las reciben los que no endurecen su corazón, los que piden con fe, los que creen que recibirán y los que guardan diligentemente los mandamientos.
(Paul V. Johnson, “Un modelo para aprender temas espirituales”, transmisión vía satélite de Seminarios e Institutos de Religión, 7 de agosto de 2012, broadcasts.ChurchofJesusChrist.org)
¿Se pueden utilizar cosas como el método científico y la lógica por sí solos para comprender las verdades del Evangelio?
El presidente Dallin H. Oaks, de la Primera Presidencia, declaró:
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Retrato oficial del presidente Dallin H. Oaks, tomado en marzo de 2018.
Cuando buscamos la verdad sobre la religión, debemos utilizar métodos espirituales apropiados para esa búsqueda: la oración, el testimonio del Espíritu Santo y el estudio de las Escrituras y de las palabras de los profetas actuales. Siempre me entristece oír de alguien que habla sobre la pérdida de la fe religiosa debido a las enseñanzas seculares. Aquellos que una vez tuvieron visión espiritual pueden sufrir ceguera espiritual que se han causado ellos mismos. Como dijo el presidente Henry B. Eyring: “Su problema no reside en lo que creen que ven, sino en lo que no pueden ver” [Henry B. Eyring, To Draw Closer to God: A Collection of Discourses, 1997, pág. 143].
Los métodos de la ciencia nos llevan a lo que llamamos verdad científica, pero la “verdad científica” no es la totalidad de la vida. Aquellos que no aprenden “por el estudio como por la fe” (Doctrina y Convenios 88:118) limitan su comprensión de la verdad a lo que pueden verificar por medios científicos. Eso pone límites artificiales en su búsqueda de la verdad.
(Véase Dallin H. Oaks, “La verdad y el plan”, Liahona, noviembre de 2018, pág. 25)
¿Cómo puede el Espíritu Santo comunicarme la verdad?
El élder Richard G. Scott (1928–2015), del Cuórum de los Doce Apóstoles, declaró:
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Último retrato oficial del élder Richard G. Scott, del Cuórum de los Doce Apóstoles, 2004. Él falleció el 22 de septiembre de 2015.
Puedes aprender cosas de vital importancia por medio de lo que oigas, lo que veas y, en especial, lo que sientas, según la impresión del Espíritu Santo. Muchas personas limitan su aprendizaje principalmente a aquello que oyen o a lo que leen. Sé prudente. Desarrolla la habilidad de aprender también por lo que ves y, particularmente, mediante lo que el Espíritu Santo te haga sentir. Busca de manera consciente y constante aprender de lo que sientes. Tu capacidad para hacerlo se ampliará mediante la práctica repetida. Se requiere una gran fe y esfuerzo para aprender por lo que sientes del Espíritu. Pide esa ayuda con fe y vive digno de ella.
(Richard G. Scott, “How to Learn by the Spirit”, New Era, septiembre de 2014, pág. 48)
