Al grano

¿Por qué permite Dios que sucedan cosas malas a las personas buenas?

The Resurrected Christ [El Cristo resucitado], por Wilson Ong

Para hacer frente a las injusticias de la vida, necesitamos perspectiva y fe.

La perspectiva proviene de entender el plan del Padre Celestial. Somos seres eternos a quienes se nos ha permitido venir a la tierra para que podamos llegar a ser más como el Padre Celestial. Mientras estamos aquí, sufrimos tentación, pesar, dolor y sufrimiento. Algunos sufrimientos vienen porque Dios permite que las personas ejerzan su albedrío, y algunas decisiones pueden traer sufrimiento a ellas mismas o a otras personas. Otras veces tal vez no sepamos exactamente por qué las personas sufren, pero sabemos que en el plan del Padre Celestial, esas cosas pueden darnos experiencia y ser para nuestro bien al final (véase Doctrina y Convenios 122:7).

Jesucristo ha vencido todas las cosas por medio de Su Expiación y Resurrección. Cuando veamos las injusticias de esta vida, podemos ejercer fe en Él y en el plan de nuestro Padre Celestial. Podemos confiar en que el Salvador hará que todo esté bien al final, y por medio del Espíritu Santo, podemos recibir consuelo y fortaleza en nuestras pruebas.

Si escogemos tener fe y perseverar hasta el fin, se nos promete “paz en este mundo y vida eterna en el mundo venidero” (Doctrina y Convenios 59:23).