2007
Reuniones de superación personal, de la familia y del hogar
Marzo de 2007


Reuniones de superación personal, de la familia y del hogar

En las reuniones trimestrales de superación personal, de la familia y del hogar, las hermanas pueden “tener un sentido de unidad al participar en actividades que aumentan la fortaleza espiritual, desarrollan las habilidades personales, fortalecen el hogar y la familia y ejercen la caridad por medio del servicio”, dice la hermana Parkin. “En esas reuniones, se fortalecen los lazos de la hermandad, se extiende amistad hacia los miembros nuevos y los menos activos, y se encuentran abundantes oportunidades misionales”.

Los siguientes son ejemplos de lo que han hecho algunas estacas y barrios en sus reuniones de superación personal, de la familia y del hogar.

Un barrio conmemoró la creación de la Sociedad de Socorro con un programa llamado “Hermandad: Un tapiz de amor”. Estaba basado en el discurso que el presidente James E. Faust, Segundo Consejero de la Primera Presidencia, pronunció en la reunión general de la Sociedad de Socorro en septiembre de 20021. Al terminar la cena, ocho hermanas compartieron sus experiencias y sus pensamientos sobre lo que significa para ellas que la Sociedad de Socorro sea un lugar donde aprender, hacer amistades eternas, disfrutar de la hermandad y brindar servicio.

La reunión de superación de una estaca se centró en edificar nuestra fe en Jesucristo e incluyó una reunión de testimonios. Stephanie Wilkey, presidenta de la Sociedad de Socorro de esa estaca, escribe: “Habíamos sentido la inspiración de tener una reunión de superación personal, de la familia y del hogar basada en uno de los principios de la caridad: la bondad. Nos costó toda nuestra fe seguir las impresiones que habíamos recibido como presidencia para llevar a la práctica esa idea. Mis consejeras me aseguraron que las hermanas asistirían a la reunión y que se pondrían de pie y compartirían con nosotras las impresiones de su corazón. ¡Y vaya si vinieron! Cerca de 350 colmaron el centro de reuniones una tarde de viento y lluvia. Se pusieron de pie y abrieron sus corazones las unas a las otras con magníficos testimonios relacionados con la manera de aplicar el principio de la bondad a su diario vivir. Cuando las hermanas salieron del centro hora y media más tarde, expresaron con palabras y lágrimas que habían sentido el amor del Señor y que estaban muy agradecidas por haber asistido”.

En otra estaca, Mickie Neslen, presidenta de la Sociedad de Socorro, se percató de que la estabilidad económica contribuye al fortalecimiento de las familias. Ella y la presidencia de estaca prepararon una reunión de estaca de superación personal, de la familia y del hogar, viajando de barrio en barrio para presentarla. Comenzaba con una lección espiritual sobre finanzas y luego se invitaba a las hermanas a visitar cinco talleres diferentes con presentaciones de 15 minutos impartidas por hermanas bien preparadas:

  1. “Cómo elaborar un presupuesto” mostraba las diversas maneras de administrar y gestionar el dinero valiéndose de libretas, sobres o programas informáticos.

  2. “Consejos prácticos sobre cómo ahorrar dinero” versaba sobre maneras sencillas de ahorrar cada día.

  3. “Finanzas para niños” demostraba cómo enseñar las finanzas a los más pequeños a través de una variedad de métodos, incluidos algunos juegos que requerían la participación de los asistentes.

  4. “Prepárense para el futuro” repasaba información sobre seguros de discapacidad, atención asistencial, atención a la tercera edad y otras inquietudes relacionadas con la jubilación.

  5. “El costo del crédito” señalaba los peligros de la deuda y cómo evitarla.

Estas reuniones de superación contribuyeron a formar y a fortalecer a las hermanas de maneras muy importantes.

Nota

  1. Véase “Todas son enviadas del cielo”, Liahona, noviembre de 2002, pág. 110.