2008
EL MODO DE VESTIR Y LA APARIENCIA
Octubre de 2008


EL MODO DE VESTIR Y LA APARIENCIA

La salida de compras

Viste de manera recatada (modesta) para demostrar respeto por Dios y por ti mismo. Nunca rebajes tus normas en el vestir en ninguna ocasión. No desfigures tu cuerpo con tatuajes ni perforaciones.

Mi mamá y yo estábamos de compras cuando encontré una falda negra que pensé que “tenía” que comprar; me la probé y salí para mostrársela a mi madre. Vaciló un poco antes de decirme: “Becky, creo que es demasiado corta”. Le contesté que a mí no me parecía así y que todas las chicas de la escuela las usaban de ese modo, algunas mucho más cortas. Pasé varios minutos tratando de convencerla para que le gustara la falda.

Al fin me dijo firmemente: “Es demasiado corta y no la vamos a comprar. Quítatela”.

No pude comprender por qué era tan estricta conmigo, especialmente porque yo pensaba que tenía edad suficiente para decidir por mí misma lo que iba a ponerme encima. Nuestra salida de compras se arruinó y regresamos a casa en silencio.

Después, mamá me dijo: “Becky, la razón por la que no te dejé comprar la falda es que cuando te la pones, no pareces tú. Es demasiado corta y no refleja lo que tú eres en realidad: una hija de Dios”.

Su explicación me enseñó un principio que siempre recordaré: Soy una hija de Dios, y todo lo que haga y lleve puesto refleja lo que pienso de mí misma y lo que siento por mi Padre Celestial y por mi Salvador.

La modestia en el vestir es una lucha constante, pero estoy agradecida porque no caí ante la tentación ni puse en peligro mis normas. Sé que si llegamos a entender de verdad que somos hijos de Dios, venceremos nuestros deseos de vestirnos como la gente del mundo.