2011
Ideas para la noche de hogar
Junio de 2011


Ideas para la noche de hogar

Este ejemplar contiene artículos y actividades que se podrían utilizar en la noche de hogar. A continuación figuran algunos ejemplos:

“El verdadero camino a la felicidad”, pág. 28: Después de compartir este artículo con su familia, considere las siguientes preguntas: ¿de qué manera influyen la felicidad futura las decisiones que tomamos ahora? ¿Cómo podemos estar seguros de que estamos tomando las decisiones correctas?

“El poder de la formación académica”, pág. 42: El autor de este artículo quedó impresionado con lo que dijo el presidente Gordon B. Hinckley acerca de los estudios: “Ustedes necesitan toda la educación posible. Sacrifiquen… cualquier cosa a fin de que ello les habilite para desempeñar el trabajo del mundo”. Analicen en familia el principio del sacrificio y las bendiciones que provienen de él.

“Enseña a un hombre a pescar”, pág. 54: Lea o haga un resumen de este artículo con su familia. ¿Cómo se preparó Ezra para afrontar sus pruebas? ¿De qué manera lo ayudó nuestro Padre Celestial? Hablen de lo que pueden hacer en familia a fin de prepararse.

“Confía en el Señor”, pág. 60: Lean el artículo en familia. Considere la idea de pedir a los integrantes de la familia que hablen de experiencias en las que sus oraciones fueron contestadas. Hable sobre las distintas maneras en que nuestro Padre Celestial contesta las oraciones y la importancia de confiar en Él.

Las preguntas de mi hija

En calidad de obispo de nuestro barrio, insté a los padres a dar la oportunidad a sus hijos de enseñar la lección en la noche de hogar. Mi esposa y yo decidimos hacer lo que yo había sugerido.

Primero fue el turno de nuestro hijo y disfrutamos su lección acerca de la oración. El lunes siguiente le tocó el turno a nuestra hija. Ella se había bautizado hacía apenas unos meses. El tema que escogió fue las creaciones de Dios. Ella hizo una serie de preguntas, las que respondimos por turno. Luego dio su testimonio y terminó.

Entonces mi hijo exclamó: “Todavía no nos has enseñado nada, sólo nos hiciste preguntas”. Pero yo le dije a mi familia que me había sentido conmovido cuando mi esposa, al contestar una de las preguntas, dijo que agradecía a Dios la creación de la unidad familiar y de que le hubiera dado una familia maravillosa y un esposo amoroso. Les dije que mi corazón se llenó de gratitud cuando nuestra hija más pequeña respondió la pregunta: “¿Quién creó el mundo?” con una exclamación: “Jesús”. Muchas otras respuestas me parecieron sobrecogedoras por su profundidad.

Así que, a pesar de que mi hija no “enseñó” la lección de la manera en que mi hijo esperaba que lo hiciera, su lección, y otras que mis hijos han enseñado, son mis noches de hogar preferidas.

Richard Ikpegbu, Nigeria