Solo para la versión digital: Jóvenes adultos
Salir con personas del sexo opuesto con un plan y un propósito
Estas son algunas cosas que he aprendido y pueden hacer que tu experiencia de salir con personas del sexo opuesto sea más sencilla y menos estresante.
Salir con personas del sexo opuesto. El solo mencionarlo puede generar una variedad de respuestas: una sonrisa, un ceño fruncido, un revoleo de ojos, nervios e incluso náuseas. Claramente, el salir con personas del sexo opuesto no es igual para todos. He escuchado a jóvenes adultos referirse al salir en este tipo de citas como un gozo, una molestia, un trayecto, un destino, una tragedia y un triunfo. Hace poco, estaba conversando con una joven que, con una sonrisa burlona, se refirió a sus salidas en citas como “inexistentes”.
Después de pasar más de doce años impartiendo clases a jóvenes adultos sobre el salir en citas con personas del sexo opuesto y de preparación para el matrimonio, he encontrado dos palabras que resumen la experiencia de muchos de ellos: complicada y compleja.
Por otro lado, he visto que algunos principios bien comprendidos pueden hacer que la experiencia de salir con personas del sexo opuesto sea más sencilla y mucho menos estresante. Todo comienza con una comprensión sólida del propósito de Dios para el matrimonio y la función que el salir con personas del sexo opuesto puede desempeñar a la hora de establecer los cimientos para un matrimonio exitoso.
El propósito de Dios para el matrimonio
Puede resultar incómodo decirlo en voz alta, pero la idea general de salir con personas del sexo opuesto siendo jóvenes adultos es que conduzca al matrimonio, o al menos esperamos que así sea. El matrimonio entre un hombre y una mujer, a su vez, nos conduce a llegar a ser más como nuestros padres celestiales, teniendo una familia propia.
He escuchado a muchos jóvenes adultos decir que la idea de casarse es aterradora porque conocen a muchas personas cuyos matrimonios no funcionaron. Sé que es una triste realidad, pero casarse y no divorciarse puede ser menos una cuestión de suerte y más una cuestión de planear e implementar. A la vez, cuanto más comprendamos el Plan de Salvación, más comprenderemos la función del matrimonio en dicho plan.
El élder Gary E. Stevenson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó:
“Satanás entiende que la familia es fundamental en el plan de felicidad del Señor […]. Se está esforzando por sembrar las semillas oscuras del temor en su corazón, cualquier cosa que les impida experimentar la parte más gloriosa y gratificante de la vida terrenal: la brillante santidad y felicidad que provienen de encontrar un compañero eterno y de traer a los hijos del Padre Celestial a este mundo.
“Al afrontar la decisión de comenzar su propia familia eterna, no esperen por causa del miedo. Recuerden la Escritura: “No temas, cree solamente” [Marcos 5:36]. Mi matrimonio y mi familia son […] una manifestación personal y literal del gran plan de felicidad para mí. Les prometo que lo mismo puede ser cierto para ustedes. El centrarse en la gozosa luz que brinda la vida familiar expulsará el temor”1.
A fin de estar motivados a salir en citas con personas del sexo opuesto, debemos ver el matrimonio como algo más que un mandamiento; debemos aceptar la verdad de que el matrimonio puede ser, y es, una parte maravillosa y gozosa del plan del Padre Celestial para Sus hijos. Tener un compañero al que se ama y una familia a la que se aprecia conduce a los mayores gozos de la vida terrenal y de la eternidad. Si no fuera así, el Padre Celestial no nos guiaría por ese camino. El presidente Russell M. Nelson enseñó: “[La] proclamación sobre la familia nos ayuda a darnos cuenta de que el matrimonio celestial proporciona mayores posibilidades de obtener la felicidad que cualquier otro tipo de relación”2.
Salir en citas de manera adecuada para casarse de manera adecuada
El presidente Spencer W. Kimball (1895–1985) enseñó en cierta ocasión que casarse adecuadamente requiere un noviazgo adecuado3, lo cual puede parecer más fácil de decir que de hacer. El presidente Thomas S. Monson (1927–2018) dio instrucciones cruciales a los jóvenes adultos de la Iglesia en cuanto al tema: “Busquen a alguien con quien sean compatibles”4.
Breve y sencillo, pero tan profundo.
Sin embargo, ¿cómo encontramos a ese alguien? ¿Y cómo sabemos si somos compatibles?
Para casi todos, encontrar a alguien requiere salir en citas con personas del sexo opuesto. Esas salidas o citas deben tener propósito y significado. Idealmente son el tipo de citas que nos ayudan a probar la compatibilidad. Estas citas también nos dan la oportunidad de aprender las habilidades —sí, las habilidades— de crear una relación significativa.
Primero, el mayor desafío: conseguir citas. Se podría dedicar un artículo entero a este tema, pero permíteme sugerir cinco palabras sencillas: “Para salir más, sal más”. A cualquier persona que desee salir más en citas y llegar a conocer a más personas, le recomiendo que se involucre y salga. Tal vez requiera un poco de esfuerzo encontrar lugares con personas como tú, pero valdrá la pena la inversión.
Uno de los mayores predictores de compatibilidad entre los cónyuges es la similitud en los intereses. Al ir a actividades y lugares que te interesen, encontrarás a otras personas que comparten tus intereses. Siempre es útil recordar que conocer a alguien requiere conocer a alguien.
Compatibilidad: Un proceso de dos pasos
Imagínate el salir con personas del sexo opuesto como un proceso de dos pasos de comprobación de la compatibilidad. Primero, al comenzar a salir en citas, trata de salir con una variedad de personas. Conocer una variedad de personalidades te ayudará a saber con qué tipo de persona te complementas bien y qué buscar en una pareja. Esa es una de las razones por las que los profetas han aconsejado a los adolescentes que eviten las relaciones exclusivas hasta que sean mayores y, en cambio, “entabl[en] buenas amistades con muchas personas”5.
Salir con personas variadas puede ser difícil; no todos tienen la oportunidad o la opción de salir en muchas citas casuales, y también existe el peligro de obsesionarse demasiado por encontrar a la elusiva pareja perfecta.
Afortunadamente, no es necesario salir mucho en citas “formales” para aprender mucho. La mayoría de nosotros tenemos la oportunidad de interactuar con hombres y mujeres diversos todos los días. Si somos sabios, podemos utilizar esas relaciones para identificar las cualidades que deseamos buscar en un cónyuge.
Segundo, cuando comiences a salir con alguien con más seriedad, ten varias citas. Con demasiada frecuencia veo a parejas pasar todas las citas sentadas en un sofá viendo sus programas favoritos de televisión para luego quejarse de que su cónyuge no es lo que ellos pensaban que eran.
Para enseñar el valor del tener varios tipos de citas, le mostré a mi clase de Instituto una imagen que parece ser un rompecabezas a medio armar del rostro de mi esposa. Cuando les pregunto cómo se relaciona con el salir con personas del sexo opuesto, la respuesta suele ser: “Estás armando a tu esposa”. Sin embargo, si miras de cerca, verás que estoy quitando piezas del rompecabezas para descubrir su imagen completa, que se encuentra debajo. Cada pieza del rompecabezas representa una interacción (o cita) que descubre algo sobre la personalidad de mi esposa.
Diferentes tipos de interacciones revelarán diferentes cualidades acerca de ella. Si quiero aprender acerca de su espiritualidad, debemos hacer algo juntos que esté basado en el aspecto espiritual. Del mismo modo, si quiero saber cómo se relaciona con los niños, deberemos pasar tiempo con niños.
Confía más, preocúpate menos
Cuando estés en pleno proceso de salir en citas para evaluar la compatibilidad, recuerda que el salir con personas del sexo opuesto puede y debe ser agradable. ¡El salir con personas del sexo opuesto es una oportunidad para conocer a personas nuevas, crear amistades y salir y hacer algo! Una primera cita no tiene que ser una prueba de fuego que determine la posibilidad de encuentros futuros. Incluso si no has encontrado a tu cónyuge, al menos has encontrado una nueva amistad.
Todos debemos esforzarnos por lograr el matrimonio eterno, pero el preocuparse demasiado por salir con personas del sexo opuesto y por el matrimonio, y en especial el medir tu autoestima por el éxito en tus citas, sin duda te hará infeliz. Encontrar un cónyuge compatible y hacer que tu matrimonio funcione puede ser un trayecto maravilloso y lleno de fe.
Hay gran paz al saber que seremos bendecidos con todo lo que necesitemos para la felicidad y el progreso conforme nos centremos en nuestros convenios y en los propósitos y las promesas de nuestro amoroso Padre Celestial.