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Alma 42, Parte 1: “Un Dios perfecto, justo y misericordioso también”


“Alma 42, Parte 1: ‘Un Dios perfecto, justo y misericordioso también’”, El Libro de Mormón: Manual del maestro, 2024

“Alma 42, Parte 1”, El Libro de Mormón: Manual del maestro

Alma 42, Parte 1

“Un Dios perfecto, justo y misericordioso también”

Alma, hijo, abraza a su hijo Coriantón

Vivir en un mundo caído con nuestra perspectiva terrenal limitada puede hacer que sea difícil comprender la naturaleza completa y perfecta de nuestro Padre Celestial y de Su plan. A Coriantón también le costaba entender la realidad de la justicia y la misericordia de Dios. Alma lo ayudó a ampliar su perspectiva de nuestro amoroso Padre Celestial y de Su plan para nosotros. La finalidad de esta lección es ayudarte a entender mejor la naturaleza del Padre Celestial como un ser justo y misericordioso.

Orar por los alumnos. Una manera de aumentar su amor por los alumnos es orar por ellos. Así como el Salvador oró por Pedro personalmente (véase Lucas 22:32), usted puede orar al Padre Celestial por cada alumno por su nombre. Invite al Padre Celestial a ayudarlo a comprender mejor las necesidades de los alumnos y las maneras en que puede tenderles una mano.

Preparación del alumno: Podría invitar a los alumnos a conversar con un familiar o un amigo acerca de algunas de las diferentes ideas que las personas tienen sobre el carácter de Dios.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

Para comenzar la lección, podría dividir a los alumnos de dos en dos. Entregue una de las siguientes situaciones hipotéticas a cada compañero. Invítelos a leer sus situaciones hipotéticas y luego a analizar lo que podría estar equivocado en cuanto a las suposiciones de Gabe y Elsie.

La justicia y la misericordia de Dios

Lee las situaciones hipotéticas siguientes:

  • Gabe está tomando decisiones que lo llevan a quebrantar los mandamientos de Dios. Al principio se sentía un poco culpable, pero decidió que si el Padre Celestial ama tanto a Sus hijos, no lo castigaría por sus pecados.

  • Elsie se siente angustiada porque se había arrepentido de un pecado que había cometido y sentía que había sido perdonada, pero luego se volvió a equivocar. Cree que no hay esperanza para ella porque siente que mintió a Dios en cuanto a su arrepentimiento.

Hay muchas personas que malinterpretan el equilibrio amoroso y perfecto de la justicia y la misericordia del Padre Celestial y de Jesucristo. Al estudiar la lección de hoy, piensa en las bendiciones que recibes debido a que Dios es justo y misericordioso.

Alma ayudó a Coriantón a entender el plan de Dios

Considere invitar a los alumnos a repasar las preocupaciones de Coriantón en Alma 40–41. Si no las recuerdan, remítalos a Alma 40:1; 41:1. Podría anotar las preocupaciones de Coriantón en la pizarra a medida que los alumnos las mencionen.

Mientras Alma continuaba aconsejando a Coriantón, percibió que a su hijo le preocupaba algo en cuanto a Dios y Su plan.

Lee Alma 42:1 y busca la inquietud de Coriantón.

Podría añadir esta inquietud a la lista de la pizarra y, debajo, podría hacer una lista de las respuestas de los alumnos a las preguntas siguientes.

  • ¿Cuáles son algunas suposiciones que podrían llevar a alguien a pensar que es injusto que Dios castigue a los pecadores?

  • ¿Cuál es el peligro de este tipo de malentendidos?

  • ¿Qué malentendidos similares ves en la actualidad?

Esta podría ser una buena oportunidad para que los alumnos compartan lo que aprendieron en su preparación para la clase.

Alma trató de ayudar a Coriantón compartiendo con él una perspectiva más amplia de Dios y Su plan. Comenzó explicando que la caída de Adán y Eva en el Jardín de Edén trajo la muerte espiritual (la separación de Dios) y la muerte temporal (la muerte del cuerpo mortal) (véase Alma 42:2–8). Luego, enseñó a Coriantón la relación de la Caída con la justicia y la misericordia de Dios.

Lee Alma 42:9–12 y busca los efectos de la Caída.

  • ¿Qué efectos de la Caída encontraste?

Las respuestas de los alumnos a la pregunta anterior pueden aclarar lo que entienden y si necesitan ayuda para entender algo. Ayude a los alumnos a entender que, debido a la Caída, la humanidad llegó a ser carnal, sensual y diabólica (Alma 42:10), y a estar “separad[a] de la presencia del Señor” (Alma 42:11). No podemos superar esa separación de Dios por nosotros mismos.

Luego, a fin de preparar a los alumnos para aprender más acerca de la justicia y la misericordia en la siguiente sección de la lección, podría invitarlos a escribir sus propias definiciones de ambas palabras, de una o dos oraciones cada una. Luego, lea las definiciones siguientes y pida a los alumnos que comparen sus definiciones con las que se dan en Temas del Evangelio. Permita que los alumnos hagan cualquier pregunta que puedan tener.

  • Justicia: “En términos de las Escrituras, la justicia es la ley inmutable que trae las consecuencias de las acciones. Debido a la ley de la justicia, recibimos bendiciones cuando obedecemos los mandamientos de Dios. La ley de la justicia también exige que recibamos un castigo por todo pecado que cometamos” (Temas del Evangelio, “Justicia,” topics.ChurchofJesusChrist.org).

  • Misericordia: “La misericordia es el trato compasivo que se da a una persona más allá de lo que se merece, y se logra mediante la expiación de Jesucristo” (Temas del Evangelio, “Misericordia,” topics.ChurchofJesusChrist.org).

Lee Alma 42:13–15 y determina lo que Alma enseñó acerca de Dios y Su plan.

  • ¿Qué aprendes en cuanto al plan de Dios?

  • ¿Qué verdades aprendes sobre Dios en estos versículos?

Entre otras verdades, ayude a los alumnos a entender la importancia de saber lo siguiente: Dios es perfecto, justo y misericordioso. Aunque en estos versículos se mencionan verdades importantes acerca de la expiación de Jesucristo y la función del arrepentimiento, estos temas se explorarán más profundamente en la próxima lección.

La justicia y la misericordia de Dios

El élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó en cuanto a la justicia y la misericordia de Dios:

14:51

La justicia es un atributo esencial de Dios. Podemos tener fe en Dios porque Él es perfectamente digno de confianza. En las Escrituras se nos enseña que “Dios no anda por vías torcidas, ni se vuelve a la derecha ni a la izquierda, ni se aparta de lo que ha dicho; por tanto, sus sendas son rectas y su vía es un giro eterno” [Doctrina y Convenios 3:2], y que “Dios no hace acepción de personas” [Hechos 10:34]. Confiamos en la divina cualidad de la justicia para así tener fe, confianza y esperanza.

Sin embargo, debido a que Dios es perfectamente justo, hay algunas cosas que no puede hacer: no puede ser arbitrario y salvar a algunos y expulsar a otros; Él “no pued[e] considerar el pecado con el más mínimo grado de tolerancia” [Doctrina y Convenios 1:31]; no puede permitir que la misericordia robe a la justicia [véase Alma 42:25].

Una evidencia contundente de la justicia de Dios es que Él ha establecido el principio de la misericordia para acompañarla. Debido a que Él es justo, ha concebido los medios para que la misericordia desempeñe su función indispensable en nuestro destino eterno (véase D. Todd Christofferson, “Libres para siempre, para actuar por sí mismos”, Liahona, noviembre de 2014, pág. 17).

  • ¿Qué te ayuda a comprender esta declaración acerca de Dios?

Podría invitar a los alumnos a escribir sus respuestas a la siguiente pregunta y a completar las siguientes declaraciones por su cuenta, y luego pedirles que las compartan con un compañero, un grupo pequeño o con toda la clase.

Imagínate que tienes un amigo que tiene la misma inquietud que Coriantón y te pregunta cómo puede ser justo que Dios castigue a los pecadores.

  • ¿Qué le dirías a tu amigo para ayudarlo a entender la justicia y la misericordia de Dios? (Incluye versículos o frases de Alma 42:9–15).

Completa estas declaraciones:

  • La justicia de Dios me bendice porque

  • La misericordia de Dios me bendice porque

Valore la posibilidad de compartir su testimonio de la justicia y la misericordia de Dios.