Lección 181: Desarrollar autosuficiencia

Fe en Jesucristo para desarrollar autosuficiencia

Superar los obstáculos por medio del Señor

Además de bendecirnos con el perdón y la sanación del pecado, el poder del Salvador puede bendecirnos en situaciones cotidianas como la formación académica, el empleo y las relaciones interpersonales. Cuando ejercemos fe en Jesucristo, lo invitamos a ayudarnos a ser más autosuficientes en todos los aspectos de nuestra vida. El objetivo de esta lección es ayudar a los alumnos a ejercer fe en Jesucristo para desarrollar autosuficiencia.

Posibles actividades de aprendizaje

Mover montes

Podría dibujar un monte en la pizarra e invitar a los alumnos a dibujar uno similar en sus diarios de estudio, cubriendo aproximadamente la mitad superior de una página. Diga a los alumnos que imaginen que el monte se interpone entre ellos y el desarrollar la autosuficiencia espiritual y temporal. (Si los alumnos necesitan ayuda para comprender lo que significa la autosuficiencia, explique que incluye cosas como obtener su propia fortaleza espiritual, obtener una educación académica y ganar suficiente dinero para satisfacer sus necesidades).

Pídales que escriban dentro del monte algunos de los obstáculos que estén afrontando que les dificulten desarrollar autosuficiencia en diferentes aspectos de su vida. (Algunos ejemplos podrían ser la falta de empleo o de oportunidades educativas, la salud o la necesidad de apoyo de seres queridos). Invite a los alumnos que así lo deseen a escribir en la pizarra, dentro del monte que usted dibujó, algunos de los obstáculos que afrontan.

• ¿En qué sentido los obstáculos de la vida pueden parecer montes a veces?

• ¿Cuáles son las distintas maneras en que las personas responden a este tipo de desafíos?

Podría invitar a los alumnos a meditar en cómo planean lidiar con los obstáculos que les impiden lograr la autosuficiencia. Invítelos a lo largo de la lección a buscar con espíritu de oración cómo recibir fortaleza del Salvador para vencer los desafíos que afrontan.

Invitar el poder del Salvador a nuestra vida

El presidente Russell M. Nelson dio el consejo siguiente a aquellos que enfrentan desafíos difíciles en sus vidas.

Mis queridos hermanos y hermanas, mi llamado a ustedes […] es que comiencen hoy a aumentar su fe. Mediante su fe, Jesucristo aumentará la capacidad de ustedes para mover los montes que haya en su vida, aunque sus desafíos personales puedan ser tan grandes como el monte Everest […].

Sus montes serán distintos, no obstante, la respuesta a cada uno de sus desafíos es aumentar su fe (Russell M. Nelson, “Cristo ha resucitado; la fe en Él moverá montes”, Liahona, mayo de 2021, págs. 102–103).

• ¿Cómo resumirías lo que el presidente Nelson enseña?

  Los alumnos podrían elaborar diversos resúmenes con reflexiones. Una verdad importante es la siguiente: A medida que aumentamos nuestra fe en Jesucristo, Él aumentará nuestra capacidad para superar los desafíos.

• ¿Cómo se pueden aplicar esas enseñanzas del presidente Nelson a nuestros esfuerzos por lograr la autosuficiencia en nuestra vida?

Imagina que tienes un amigo que necesita un poco de ayuda para creer que Jesucristo realmente lo ayudaría con los obstáculos de su vida. Busca un pasaje del Dominio de la doctrina de cualquier libro de las Escrituras que pueda ayudarle a sentir el deseo de Jesús de ayudar y Su poder para hacerlo.

Entre los pasajes del Dominio de la doctrina que los alumnos podrían encontrar se incluyen los siguientes:

• Proverbios 3:5–6: “Confía en Jehová con todo tu corazón […] y él enderezará tus veredas”.

• Mateo 11:28–30: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar”.

• Santiago 1:5–6: “Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios”.

• 1 Nefi 3:7: “Iré y haré lo que el Señor ha mandado”.

• 2 Nefi 28:30: Dios dará “a los hijos de los hombres línea por línea, precepto por precepto”.

• Éter 12:27: “Si los hombres vienen a mí […] entonces haré que las cosas débiles sean fuertes para ellos”.

• Doctrina y Convenios 6:36: “Mirad hacia mí en todo pensamiento; no dudéis; no temáis”.

• ¿Qué pasaje escogiste? ¿Cómo podría ese pasaje ayudar a tu amigo a comprender el deseo que el Salvador tiene de ayudarlo y Su poder para hacerlo?

• ¿Qué experiencia personal podrías compartir para ayudar a tu amigo a saber que Jesús está dispuesto a ayudarnos y que es capaz de hacerlo?

Considere invitar a los alumnos a crear dos columnas debajo del monte que dibujaron en la página de su diario. En la parte superior de una de las columnas podrían escribir “Mi parte en el desarrollo de la autosuficiencia”. En la parte superior de la otra columna podrían escribir “Cómo puede bendecirme el Salvador”.

Podría mostrar o distribuir copias de la declaración siguiente. Invite a los alumnos a leerla y a buscar lo que podrían agregar a ambas columnas. Los alumnos podrían trabajar de forma individual, de dos en dos o en grupos pequeños.

El obispo W. Christopher Waddell, del Obispado Presidente, explicó cómo nuestros esfuerzos y nuestra fe en el Señor trabajan juntos.

Desde el comienzo de los tiempos, el Señor ha proporcionado guía para ayudar a Su pueblo a prepararse espiritual y temporalmente contra las calamidades y las dificultades que Él sabe que vendrán como parte de esta experiencia terrenal. Estas calamidades pueden ser de naturaleza personal o colectiva, pero la guía del Señor nos proporcionará protección y apoyo en la medida en que atendamos a Su consejo y actuemos en consecuencia […].

El Señor no espera que hagamos más de lo que podemos, pero sí espera que hagamos lo que podemos hacer, cuando podamos hacerlo […].

Estar preparado temporalmente y ser autosuficiente significa “creer que por medio de la gracia, o el poder habilitador de Jesucristo, y nuestro propio esfuerzo, podemos obtener todos los elementos espirituales y temporales indispensables de la vida que requerimos para nosotros mismos y nuestra familia” (W. Christopher Waddell, “Había pan”, Liahona, noviembre de 2020, págs. 42, 43, 44).

Divida a los alumnos en grupos de dos o tres y completen la actividad y el análisis que se describen a continuación. Algunos ejemplos que los alumnos encuentren podrían incluir a José Smith, quien necesitaba respuestas para obtener más fortaleza espiritual (véase José Smith—Historia 1:8–20) y al hermano de Jared, que necesitaba proveer para las necesidades temporales de su familia mientras viajaba a la tierra prometida (véanse Éter 2:18–3:6).

Busca un relato de las Escrituras o de la historia de la Iglesia de alguien que haya utilizado tanto sus propios esfuerzos como su fe en Jesucristo para superar los obstáculos que le impedían progresar.

• ¿Qué obstáculos afrontaron?

• ¿Qué esfuerzos personales hicieron para superar el obstáculo?

• ¿Cómo los ayudó el Señor gracias a su fe?

  Cuando los alumnos hayan terminado el análisis en grupo, invite a un miembro de cada grupo a escribir en la pizarra, en la cima del monte, el nombre de la persona de las Escrituras o de la historia de la Iglesia en que pensaron.

  Analicen la pregunta siguiente como clase.

• ¿Qué aprendiste de esas personas que puedes aplicar a tus propios esfuerzos por desarrollar autosuficiencia con la ayuda del Salvador?

¿Cómo podría funcionar esto en la vida cotidiana?

Ayude a los alumnos a entender cómo podrían adoptar medidas prácticas al mismo tiempo que confían en que el Padre Celestial y el Salvador bendecirán sus esfuerzos. Podría invitar a los alumnos a elegir una de las situaciones hipotéticas siguientes y pensar en cómo la persona podría ejercer fe en Jesucristo a medida que se esfuerza por llegar a ser más autosuficiente.

1. Un joven quiere servir en una misión y obtener formación académica, pero no tiene suficiente dinero para ninguna de las dos cosas.

2. Una joven tiene problemas de salud que le impiden acceder a muchos de los trabajos que están al alcance de los demás.

3. Un joven sufre ansiedad grave. Las situaciones sociales, incluso los estudios y el empleo, son muy desafiantes para él.

4. Una joven desea tener éxito en la escuela, pero no puede aprender como muchos de sus compañeros de clase. Como consecuencia, le preocupa que no la acepten en la universidad donde espera estudiar.

Considere la posibilidad de utilizar preguntas como las siguientes para ayudar a los alumnos a analizar estas situaciones hipotéticas:

• ¿Qué acciones podría realizar esta persona para responder a su problema de una manera que permita que el Señor la ayude?

• ¿Qué podrían hacer para ejercer la fe en Jesucristo?

• ¿A quién podrían pedirle consejo? ¿De qué manera el hacer eso podría invitar la ayuda del Señor?

Si los alumnos necesitan ayuda para responder la última pregunta, considere sugerir que las personas de las situaciones hipotéticas podrían pedir consejo a sus padres, a sus líderes y a profesionales. Además, podrían consultar al Padre Celestial por medio de la oración respecto a la mejor manera de responder a su situación.

Aplicar a tu vida

Podría invitar a los alumnos a reflexionar cómo la decisión de ejercer fe en Jesucristo podría influir tanto en sus circunstancias actuales como futuras. Luego invítelos a reflexionar en las preguntas siguientes y a responderlas en sus diarios de estudio:

• ¿En qué aspecto de tu vida te gustaría llegar a ser más autosuficiente?

• ¿Qué puedes hacer para superar los obstáculos que afrontas?

• ¿Cómo podrías actuar con fe en Jesucristo mientras buscas la ayuda que necesitas?

Recursos adicionales

Al esforzarme por ejercer fe en Jesucristo, ¿cómo puedo lograr un equilibrio entre mis deseos y la voluntad de Dios?

El élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, dijo lo siguiente:

No debemos pensar en el plan de Dios como si fuera una máquina expendedora cósmica en la que (1) seleccionamos una bendición deseada, (2) insertamos la suma total requerida de buenas obras y (3) el pedido se entrega sin demora.

Ciertamente, Dios honrará Sus convenios y las promesas hechas a cada uno de nosotros; no hay que preocuparse por ello. El poder expiatorio de Jesucristo —quien descendió debajo de todas las cosas y luego ascendió a lo alto, y que posee toda potestad en el cielo y en la tierra— garantiza que Dios puede cumplir Sus promesas, y lo hará. Es indispensable que observemos y obedezcamos Sus leyes, pero no todas las bendiciones que se basan en la obediencia a la ley se amoldan, diseñan y programan de acuerdo con nuestras expectativas. Hacemos todo lo que podemos, pero debemos dejar a Dios el manejo de las bendiciones, tanto temporales como espirituales (D. Todd Christofferson, “Nuestra relación con Dios”, Liahona, mayo de 2022, págs. 78–79).

¿Qué puedo hacer para llegar a ser más autosuficiente?

El presidente Dieter F. Uchtdorf, en ese entonces miembro de la Primera Presidencia, enseñó lo siguiente:

Las personas son responsables de su propia autosuficiencia. Nuestros recursos incluyen la oración personal, las habilidades y talentos que Dios nos ha dado, los recursos que están disponibles para nosotros por medio de nuestra propia familia, los diferentes recursos de la comunidad y, desde luego, el amoroso apoyo de los cuórums del sacerdocio y de la Sociedad de Socorro. Esto nos conducirá a través del inspirado modelo de la autosuficiencia […].

Al final, deben hacer […] lo que los discípulos de Cristo han hecho en toda dispensación: sentarse en consejo, usar todos los recursos disponibles, buscar la inspiración del Espíritu Santo, pedir la confirmación del Señor y ponerse a trabajar (Dieter F. Uchtdorf, “El proveer conforme a la manera del Señor”, Liahona, noviembre de 2011, pág. 55).

El élder Hugo E. Martínez, de los Setenta, aconsejó lo siguiente:

Nos volvemos autosuficientes en el transcurso de nuestra vida al crecer en fortaleza espiritual, mejorar la salud física y emocional, procurar nuestra educación y empleo, y al estar preparados temporalmente. ¿Terminará esta tarea en algún momento de nuestra vida? No, es un proceso de aprendizaje, crecimiento y trabajo para toda la vida. Nunca termina; es un proceso continuo y diario […].

Sigamos a nuestro Salvador Jesucristo y Su Evangelio al llegar a ser autosuficientes a lo largo de nuestra vida (Hugo E. Martínez, “Enseñar la autosuficiencia a los niños y los jóvenes”, Liahona, mayo de 2022, págs. 95, 96).

¿Cómo podemos ejercer fe en Jesucristo?

El ensayo de Temas y preguntas sobre la fe indica lo siguiente:

Tener fe en Jesucristo significa confiar totalmente en Él: confiar en Su poder, inteligencia y amor infinitos, lo cual incluye creer en Sus enseñanzas; significa creer que aunque no entendamos todas las cosas, Él sí las entiende. Debido a que ha experimentado todos nuestros dolores, aflicciones y enfermedades, Él sabe cómo ayudarnos a superar las dificultades que tenemos día a día (véanse Alma 7:11–12; Doctrina y Convenios 122:8). Él ha “vencido al mundo” (Juan 16:33) y ha preparado el camino para que recibamos la vida eterna. Siempre está dispuesto a ayudarnos conforme nosotros recordemos Su exhortación: “Mirad hacia mí en todo pensamiento; no dudéis; no temáis” (Doctrina y Convenios 6:36) […].

Expresamos nuestra fe por medio de hechos, por medio de la forma en que vivimos (Temas y preguntas, “Fe en Jesucristo”, LaIglesiadeJesucristo.org).

Actividades de aprendizaje complementarias

La fe como un principio de acción

A fin de ayudar a los alumnos a comprender mejor las acciones que provienen de la fe en Jesucristo, podría mostrarles el video “Ejerce fe en Jesucristo”. En este video, el élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseña cómo la fe conduce a la acción. Invite a los alumnos a pensar en qué tipo de acciones se derivan de la fe en Jesucristo.

Después del video, podría invitar a los alumnos a reflexionar sobre sus propios desafíos temporales. Podría hacer las preguntas siguientes:

• ¿Qué medidas podría tomar alguien para intentar superar este tipo de desafíos?

• ¿De qué manera una acción como esta demuestra la fe en Jesucristo?

¿Qué sucede si mi fe no parece mejorar mis circunstancias?

Es posible que a los alumnos les preocupe que si bien tienen fe en Jesucristo, siguen enfrentando pruebas. A fin de ayudar a los alumnos a sentir esperanza mientras se sigue ejerciendo fe en Jesucristo, podría mostrarles el video “Pan de cada día: Experiencia” (3:12). El élder D. Todd Christofferson compartió una experiencia en cuanto a una prueba temporal que no pudo superar durante varios años. Podría pedir a los alumnos que averigüen qué hizo el élder Christofferson que demuestra la fe constante que ejerció durante esos momentos de prueba. Después del video, podría pedirles que expliquen por qué piensan que el élder Christofferson no perdió la fe en Jesucristo en aquellos momentos.