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Lección 2 — Material de preparación para la clase: La Primera Visión


“Lección 2 — Material de preparación para la clase: La Primera Visión”, Fundamentos de la Restauración: Material de preparación para la clase, 2019

“Lección 2 — Material de preparación para la clase”, Fundamentos de la Restauración: Material de preparación para la clase

Lección 2 — Material de preparación para la clase

La Primera Visión

La Primera Visión

El presidente Joseph F. Smith describió la Primera Visión de José Smith como “[e]l acontecimiento más grande […] desde la resurrección del Hijo de Dios” (Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Joseph F. Smith, 1998, pág. 15). A medida que estudias la Primera Visión, piensa en el significado de este sagrado acontecimiento y en el efecto que ha tenido en tu vida y en el mundo.

Sección 1

¿Qué verdades aprendemos de la Primera Visión de José Smith?

Hablando de la Primera Visión de José Smith, el élder Richard J. Maynes, de los Setenta, enseñó:

Es una experiencia asombrosa e inspiradora analizar lo que aprendemos de esa sagrada e impresionante experiencia […] acerca de la naturaleza eterna de nuestro Padre Celestial y de Su Hijo Jesucristo; de la realidad de Satanás; de la lucha entre el bien y el mal; así como otros aspectos importantes del gran Plan de Salvación […].

La Primera Visión de José Smith es la clave para desvelar muchas verdades que habían estado ocultas durante siglos. No olvidemos ni subestimemos las muchas y preciadas verdades que hemos aprendido de la Primera Visión. (Richard J. Maynes, “La Primera Visión: La clave de la verdad”, Liahona, junio de 2017, págs. 30, 31)

José Smith creció en una época de gran confusión religiosa. Las diversas iglesias cristianas en la región donde vivía competían por ganar conversos y disputaban acaloradamente las unas con las otras tocante a la doctrina y las prácticas religiosas. A medida que estudies el siguiente relato de la Primera Visión, registrado en 1838 y actualmente incluido en los libros canónicos como José Smith—Historia, anota las impresiones que recibas y marca las verdades del Evangelio que sean personalmente significativas para ti.

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Estudia a fin de prepararte para la clase

Lee José Smith—Historia 1:8, 11–19.

Los deseos de mi corazón (La Primera Visión), Walter Rane.
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Anota tus ideas

Anota en un diario, o en el espacio que se da a continuación, las verdades que pudiste encontrar en el relato que hizo José Smith de la Primera Visión en 1838. Escribe también por qué crees que es importante entender esas verdades. Ve a la clase preparado para compartir lo que hayas escrito.

Sección 2

¿Cómo contribuyen los múltiples relatos de la Primera Visión de José Smith a una mayor comprensión acerca de este sagrado acontecimiento?

texto de Los documentos de José Smith

Manuscrito de José Smith de su relato de la Primera Visión, 1832.

El relato de la Primera Visión de 1838, registrado en José Smith—Historia, fue dictado por José en una época de oposición a fin de “presentar a los que buscan la verdad los hechos” (José Smith—Historia 1:1). Este es el relato preponderante de la Primera Visión, y la Iglesia lo recoge como parte de la historia oficial de José Smith. En 1880 se incluyó en las Escrituras junto con el resto de La Perla de Gran Precio, y en ese momento pasó a formar parte de los libros canónicos de la Iglesia.

Además del relato de 1838, el profeta José Smith registró o dictó otros tres relatos de su experiencia. También hay cinco relatos indirectos de la Primera Visión registrados por contemporáneos de José Smith.

Los diversos relatos de la Primera Visión narran una historia uniforme, aunque naturalmente difieren en énfasis y detalles. Los historiadores anticipan que cuando una persona vuelve a contar una experiencia en varios entornos y a diferentes audiencias a lo largo de muchos años, cada relato hará hincapié en diversos aspectos de la experiencia y contendrá detalles únicos. De hecho, existen diferencias similares a las de los relatos de la Primera Visión en los múltiples relatos de las Escrituras acerca de la visión de Pablo en el camino a Damasco y de la experiencia de los apóstoles en el Monte de la Transfiguración. Sin embargo, a pesar de las diferencias, existe una uniformidad básica a través de todos los relatos de la Primera Visión. Algunos han argumentado erróneamente que cualquier variación en el relato de la historia es evidencia de que es una invención. Pero, por el contrario, la abundancia de registros históricos nos permite aprender más acerca de este notable acontecimiento que si estuviera menos documentado.(Véase “Relatos de la Primera Visión”, Temas del Evangelio, temas.laiglesiadejesucristo.org)

Si lo deseas, a medida que lees los siguientes extractos de otros relatos en primera persona de la Primera Visión de José Smith, marca los detalles y las verdades que te llamen la atención. También podrías anotar las preguntas que tengas y llevarlas a la clase.

Nota: El registro completo de cada relato está disponible en “Joseph Smith’s Accounts of the First Vision”, en josephsmithpapers.org.

El relato de 1832

Este relato fue escrito al principio del libro de cartas de José Smith y es el único que contiene un fragmento escrito de su puño y letra, así como una parte manuscrita por el escribiente de José.

Cuando tenía alrededor de doce años, comencé a inquietarme seriamente con respecto a todo lo importante que tenía que ver con el bienestar de mi alma inmortal […].

Mi mente se turbó en gran manera, pues me sentí culpable de mis pecados […]. Sentí pesar por mis propios pecados y por los pecados del mundo […].

[E]ntonces clamé al Señor pidiendo misericordia, porque no existía nadie más a quien dirigirme para obtenerla. El Señor escuchó mi ruego en aquel lugar solitario y, mientras me encontraba en actitud de acudir al Señor, en el decimosexto año de mi vida, una columna de luz, más brillante que el sol al mediodía, descendió hasta descansar sobre mí y fui lleno del Espíritu de Dios. El Señor abrió los cielos sobre mí y vi al Señor.

Y Él me habló y me dijo: “José, hijo mío, tus pecados te son perdonados. Sigue tu camino, anda en mis decretos y guarda mis mandamientos. He aquí, Yo soy el Señor de gloria. Fui crucificado por causa del mundo para que todos los que crean en mi nombre puedan tener vida eterna. He aquí, en este momento el mundo yace en el pecado y no hay quien haga lo bueno, ni siquiera uno. Se han apartado de mi Evangelio y no guardan mis mandamientos; con sus labios me honran, pero su corazón está lejos de mí. Mi ira está encendida en contra de los habitantes de la tierra y caerá sobre ellos de acuerdo con su impiedad y para llevar a cabo aquello que se ha declarado por boca de los profetas y los apóstoles. He aquí, vengo pronto, como está escrito, en las nubes y revestido de la gloria de mi Padre”.

Y mi alma se llenó de amor, y por muchos días me regocijé y sentí una gran dicha. El Señor estaba conmigo, pero no podía encontrar a nadie que creyera en la visión celestial. No obstante, medité esas cosas en mi corazón.

El relato de 1835

Este relato es un registro en el que José Smith describe la Primera Visión a una persona que lo visitó en su hogar. Está escrito en el diario de José, de mano de su escribiente.

Pude elevar al Señor una ferviente oración. Apareció una columna de fuego arriba de mi cabeza; esta gradualmente descendió hasta descansar sobre mí y fui lleno de un gozo indescriptible. Un Personaje surgió de entre medio de esa columna de fuego, la cual se extendía a todas partes y, aun así, no había consumido nada. Enseguida apareció otro Personaje, de la misma manera que lo hizo el Primero. Él me dijo: “Tus pecados te son perdonados”, y me testificó que Jesucristo es el Hijo de Dios. Y vi muchos ángeles en esa visión. Yo tenía unos catorce años cuando recibí esa primera comunicación.

El relato de 1842

Este relato procede de una carta escrita a fin de responder a las preguntas del editor de un periódico de Chicago llamado John Wentworth.

Me retiré a un lugar aislado en el bosque y comencé a invocar al Señor. Mientras me encontraba concentrado en ferviente súplica, mi mente fue apartada de todo lo que me rodeaba y me envolvió una visión celestial, y vi a dos gloriosos Personajes, que se asemejaban exactamente el uno al otro en rasgos y apariencia, rodeados de una luz brillante que eclipsó la del sol al mediodía. Me dijeron que todas las denominaciones religiosas creían doctrinas incorrectas y que ninguna era reconocida por Dios como Su Iglesia y reino; y se me mandó expresamente “no seguirlas”, al mismo tiempo que recibí la promesa de que la plenitud del Evangelio se me daría a conocer en un tiempo futuro.

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Medita a fin de prepararte para la clase

¿Cómo contribuyen estos relatos adicionales a aumentar tu comprensión y tu gratitud por la Primera Visión de José Smith? ¿Qué otras verdades puedes añadir a la lista que hiciste en la sección 1 de este material? ¿Cómo ha influido en tu vida tu testimonio de este sagrado acontecimiento?