“Habiendo yo sido ciego, ahora veo”

Juan 9–10

• Jesús sanó a un hombre que había nacido ciego (Juan 9:1–7). ¿Cómo creció el testimonio de ese hombre a medida que seguía compartiéndolo? (Véase Juan 9:11, 17, 33, 38.) ¿Cómo ha crecido el testimonio de usted al compartirlo?

• ¿Cómo respondieron los padres del ciego cuando los fariseos les preguntaron acerca del milagro? (Véase Juan 9:18–23.) ¿Por qué respondieron de esa manera los padres? (Véase Juan 9:22.) ¿En qué situaciones nos comportamos como los padres de ese hombre? ¿Qué puede hacer para ser más valiente en su testimonio?

• En el análisis de Jesús del pastor y las ovejas, ¿a quiénes representan las ovejas? (Véase Juan 10:4, 27.) ¿Quién es el pastor? (Véase Juan 10:11.) ¿Cuáles son algunas cualidades de un buen pastor? (Véase Juan 10:3–4, 7, 9–15.) ) ¿Por qué es Jesús el ejemplo perfecto de un pastor?

Sugerencia para el análisis en familia

Lean Juan 9:1–38 y pida a los miembros de la familia que, al leer, pongan atención en las formas en que el Salvador ayudó al hombre ciego a ver tanto en lo físico como en lo espiritual. Analicen en qué son similares y en qué son diferentes la vista espiritual y la física. Pida a los miembros de la familia que hablen acerca de las maneras de incrementar su habilidad de “ver” las verdades del Evangelio.

Cadena de pasajes de las Escrituras: Jesucristo: “ El buen pastor”.

Salmos 23:1–6
Isaías 40:11
Ezequiel 34:11–12
Juan 10:11
Mosíah 26:21
Alma 5:60