Seminario
Mateo 13:3–8, 18–23


Mateo 13:3–8, 18–23

La parábola del sembrador

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Tomato seedlings growing in the soil

Jesús enseñó una parábola sobre un hombre que sembraba semillas. Estas semillas cayeron en diferentes tipos de terreno, lo que produjo diferentes resultados. Del mismo modo, aquellos que escuchan la palabra de Dios la reciben de diferentes maneras. Esta lección te ayudará a preparar tu corazón para recibir y nutrir la palabra de Dios.

Utilizar objetos e ilustraciones. Los objetos y las ilustraciones pueden ayudar a los alumnos a visualizar a las personas, los lugares, los acontecimientos, los objetos y los símbolos que se mencionan en las Escrituras. Por ejemplo, en lugar de solo hablar sobre los objetos que se mencionan en las Escrituras, invite a los alumnos a que los dibujen.

Preparación del alumno: Invite a los alumnos a reflexionar sobre esta pregunta del bosquejo de esta semana en Ven, sígueme — Para uso individual y familiar: “¿Por qué es que, a veces, nuestros corazones son más receptivos a la verdad mientras que, otras veces, nos vemos tentados a resistirla?” (“20 – 26 marzo. Mateo 13; Lucas 8; 13: ‘El que tiene oídos para oír, oiga’”, Ven, sígueme — Para uso individual y familiar: Nuevo Testamento 2023).

Algunas posibles actividades de aprendizaje

Prepárate para escuchar la palabra de Dios

Para comenzar la clase, considere invitar a varios alumnos a compartir sus respuestas a la pregunta sobre la que se les invitó a reflexionar en preparación para la clase.

Dedica un tiempo para evaluar qué tan dispuesto estás tú a recibir la palabra de Dios. Utiliza esta escala con cada uno de los siguientes enunciados:

Con frecuencia – A veces – Rara vez

Muestre las afirmaciones o léalas lentamente de modo que los alumnos tengan tiempo de pensar en su receptividad personal a la palabra Dios. Los alumnos deben meditar sobre sus respuestas en silencio, no responder en voz alta.

Estudio las Escrituras con la intención de aprender y crecer.

Intento notar la influencia del Espíritu en mi vida y seguir las instrucciones que se me dan.

Escucho y obedezco el consejo que brinda el Señor a través de Sus profetas y apóstoles.

Busco fortalecer mi testimonio personal de Jesucristo y Su evangelio.

Ahora que has examinado tu actitud con respecto a la palabra de Dios, estás listo para estudiar la parábola del sembrador. En este parábola, el Señor detalló algunos posibles problemas que podrían impedir que las semillas crecieran, echaran raíz y produjeran fruto. Al igual que con todas Sus parábolas, el Señor utilizó elementos familiares para enseñar lecciones espirituales.

Utiliza el siguiente modelo de cuatro pasos para estudiar la parábola del sembrador. Independientemente de cómo hayas respondido a los enunciados anteriores, esta lección está diseñada con el fin de ayudarte a preparar tu corazón para recibir las bendiciones que el Señor quiere darte. A medida que estudias, busca maneras de tener una experiencia significativa con la palabra Dios.

Si este modelo se presentó en la lección anterior, considere pedirles a los alumnos que recuerden cada uno de los pasos y, a continuación, escríbalos en la pizarra.

  1. Busca detalles importantes.

  2. Realiza comparaciones espirituales.

  3. Descubre lecciones valiosas.

  4. Determina la aplicación personal.

Busca detalles importantes

Para la siguiente actividad, los alumnos pueden trabajar de a dos. Un alumno de cada par de alumnos puede leer el primer grupo de versículos, mientras que el otro señala los detalles importantes. Luego, ambos podrían dibujar una imagen en sus diarios de estudio. A continuación, los alumnos pueden cambiar de función y repetir el proceso con los otros grupos de versículos.

Una manera de visualizar los detalles importantes es dibujar cada parte de la parábola. Divide una página de tu diario de estudio en cuatro secciones. Lee los versículos y haz un dibujo sencillo de lo que se describe.

  1. Mateo 13:3–4

  2. Mateo 13:5–6

  3. Mateo 13:7

  4. Mateo 13:8

Si los alumnos necesitan ayuda para comprender qué dibujar, considere brindarles ejemplos como los siguientes:

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Drawings of a bird with a seed, the sun shining on a plant, thorns growing around a plant, a wheat plant.

Realiza comparaciones espirituales

Lee las explicaciones de Jesús sobre la parábola en los siguientes versículos. Escribe todas las comparaciones que Él hizo junto a tus dibujos.

Los alumnos pueden trabajar de forma individual, de a dos o en grupos pequeños. Si trabajan en grupos, divida los versículos entre los miembros del grupo y pida a los alumnos que le cuenten a su grupo lo que encuentren.

  1. Mateo 13:19

  2. Mateo 13:20–21

  3. Mateo 13:22

  4. Mateo 13:23

Descubre lecciones valiosas

Para descubrir lecciones valiosas, puede ser útil hacer preguntas que permitan que el Espíritu Santo te enseñe de forma personal. Además de las siguientes preguntas, piensa en otras que podrías hacer.

  • ¿Qué querría el Salvador que yo aprendiera de esta parábola?

  • ¿Por qué querría el Salvador que yo supiera cómo es mi corazón?

También puedes imaginar cómo se podría poner en práctica la parábola en la vida real. Por ejemplo, trata de imaginar cómo las acciones de una persona cuyo corazón es como terreno pedregoso o espinoso podrían ser diferentes de las acciones de una persona cuyo corazón es como buena tierra. A medida que piensas en estas acciones, considera escribir algunas de ellas junto a cada uno de tus dibujos.

Se podría pedir a los alumnos que den algunos ejemplos de las acciones que escribieron. Si los alumnos tienen dificultad para pensar en ejemplos, los casos hipotéticos de la sección “Actividades de aprendizaje complementarias” podrían ser de utilidad.

  • ¿Qué sugerencias le podrías dar a alguien cuyo corazón es duro, pedregoso o espinoso?

Determina la aplicación personal

Piensa en la condición de tu propio corazón y cuál de los cuatro tipos de terreno te describe mejor. Si la condición espiritual actual de tu corazón no es como quieres que sea, recuerda que puedes cambiar.

Basándote en lo que has aprendido hoy, tómate un minuto para meditar sobre lo que puedes hacer a fin de mejorar la condición de tu corazón.

  • ¿Qué harás para invitar la palabra de Dios a tu corazón?

  • ¿Qué medidas tomarás para mejorar la condición de tu corazón?

  • ¿Qué obstáculos le pedirás al Señor que te ayude a superar?

Dé a los alumnos la oportunidad de compartir lo que aprendieron hoy sobre el Señor y Su deseo de que Su palabra crezca en nuestros corazones.

Comentarios e información de contexto

El presidente Dallin H. Oaks, de la Primera Presidencia, dio un mensaje sobre la parábola del sembrador en la conferencia general. Las respuestas a las siguientes preguntas están basadas en sus explicaciones.

¿Qué representan las semillas que “cay[eron] junto al camino”? (véase Mateo 13:4, 19)

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Official Portrait of President Dallin H. Oaks taken March 2018.

… [L]as semillas que “cay[eron] junto al camino” ( Marcos 4:4) no han alcanzado el terreno mortal donde pueden crecer; son como las enseñanzas que caen en un corazón endurecido o sin preparación.

(Véase Dallin H. Oaks, “La parábola del sembrador”, Liahona, mayo de 2015, pág. 32)

¿Qué podría causar que el corazón de alguien se encuentre en “pedregales”? (véase Mateo 13:5, 20–21)

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Official Portrait of President Dallin H. Oaks taken March 2018.

Jóvenes […], aquí tienen un ejemplo específico. Si cuando se reparten los emblemas de la Santa Cena ustedes están enviando textos, cuchicheando, jugando a videojuegos o haciendo cualquier otra cosa para negarse a ustedes mismos la nutrición espiritual esencial, estarán cortando sus raíces espirituales y colocándose en un terreno pedregoso.

(Dallin H. Oaks, “La parábola del sembrador”, Liahona, mayo de 2015, pág. 33)

¿Cómo podríamos reconocer los “espinos” de la vida? (véase Mateo 13:7, 22)

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Official Portrait of President Dallin H. Oaks taken March 2018.

Nos rendimos a los “placeres de esta vida” [ Lucas 8:14 ] (1) cuando nos volvemos adictos, lo cual afecta al preciado y divino don del albedrío; (2) cuando nos seducen las distracciones triviales, lo cual nos aleja de lo que tiene importancia eterna; y (3) cuando adoptamos la mentalidad de tener derecho a todo, lo cual afecta al crecimiento personal necesario a fin de calificar para nuestro destino eterno.

Nos superan “los afanes […] de esta vida” [ Lucas 8:14 ] cuando nos paraliza el miedo al futuro, lo cual obstaculiza nuestro avance con fe, confiando en Dios y en Sus promesas.

(Véase Dallin H. Oaks, “La parábola del sembrador”, Liahona, mayo de 2015, págs. 34–35)

¿Qué se necesita para producir fruto en “buena tierra”? (véase Mateo 13:8, 23)

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Official Portrait of President Dallin H. Oaks taken March 2018.

… Tenemos la semilla de la palabra del Evangelio y depende de cada uno de nosotros el establecer las prioridades y el hacer aquello que cause que la tierra sea buena y la cosecha abundante. Debemos procurar estar firmemente arraigados en el evangelio de Jesucristo y convertidos a él (véase Colosenses 2:6–7). Logramos esa conversión al orar, al leer las Escrituras, al prestar servicio y al participar de la Santa Cena con regularidad para tener siempre Su Espíritu con nosotros.

(Dallin H. Oaks, “La parábola del sembrador”, Liahona, mayo de 2015, pág. 35)

Actividades de aprendizaje complementarias

Examina la tierra antes de sembrar

Divida a los alumnos en grupos pequeños y proporcione a cada grupo un pequeño recipiente lleno con uno de los tipos de tierra descrito en la parábola del sembrador. Invite a los alumnos a examinar la tierra y a analizar lo que harían a fin de que fuera ideal para plantar una semilla. Se les puede pedir a los alumnos que estudien la parábola en busca de lo que ese tipo de tierra podría representar en un sentido espiritual y que analicen con su grupo lo que pueden aprender de eso.

Ver y escuchar la parábola del sembrador

Considere mostrar el video “Parábola del sembrador” (4:36) desde el minuto 0:00 hasta el minuto 0:55 e invitar a los alumnos a describir los detalles importantes. Luego, los alumnos podrían mirar el video desde el minuto 3:00 hasta el minuto 4:36 y establecer conexiones espirituales basadas en las explicaciones de Jesús. Podría ser útil pausar el video luego de cada detalle para permitir que los alumnos analicen lo que están aprendiendo.

La parábola en la vida real

Considere utilizar los siguientes casos hipotéticos para ayudar a los alumnos a identificar tipos de tierra o condiciones del corazón. Los alumnos podrían hacer sugerencias para ayudar a la persona en cada caso hipotético a acercarse más al Salvador y permitir que la palabra de Dios crezca en su corazón.

Sergio conoció el Evangelio por sus amigos y poco después fue bautizado. Sin embargo, unos meses después de que se unió a la Iglesia, algunas personas comenzaron a burlarse de él por sus nuevas creencias. Sergio sentía que no podía manejar la atención negativa de los demás.

Julia se desempeña bien en la escuela, está en una obra de teatro y le encanta su trabajo. Debido a sus responsabilidades escolares y laborales, Julia ha decidido no asistir a las actividades de la Iglesia y no se ha inscrito en Seminario este año. Ella realmente quiere enfocarse en su educación y en su futura carrera.

Realizar comparaciones con el Libro del Mormón

Invite a los alumnos a leer la comparación que hizo Alma entre la palabra de Dios y una semilla (véase Alma 32:26–43). También podrían estudiar el sueño de Lehi del árbol de la vida y comparar cada grupo descrito en la visión con los tipos de tierra en la parábola del sembrador (véase 1 Nefi 8:19–34). Los alumnos podrían comentar cómo estos relatos del Libro de Mormón los ayudan a comprender mejor las enseñanzas del Salvador en la parábola del sembrador.

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