Atracción hacia personas del mismo sexo
¿Debo recomendar la terapia profesional a los miembros gais o a sus familiares?


“¿Debo recomendar la terapia profesional a los miembros gais o a sus familiares?”, Atracción hacia personas del mismo sexo: Líderes de la Iglesia, 2020

“¿Debo recomendar la terapia profesional a los miembros gais o a sus familiares?”, Atracción hacia personas del mismo sexo: Líderes de la Iglesia

¿Debo recomendar la terapia profesional a los miembros gais o a sus familiares?

La terapia puede reforzar los patrones de vida saludables

Los padres, los líderes o los consejeros profesionales no deben esperar ni exigir un cambio en el sentimiento de atracción como resultado de la terapia. No obstante, el recurrir a un consejero profesional es una señal de fortaleza y humildad. Si una persona decide buscar ese tipo de ayuda, los demás deben respetar su derecho a determinar los resultados deseados.

A veces puede ser difícil verse a sí mismo de manera objetiva. El buscar la ayuda de un consejero profesional puede contribuir a muchos aspectos de la vida, desde la forma de abordar patrones de depresión y ansiedad hasta la manera de fortalecer el matrimonio. Como el élder Jeffrey R. Holland ha indicado, la ayuda profesional a veces puede ser tan importante como la ayuda espiritual (véase “Como una vasija quebrada”, Liahona, noviembre de 2013, págs. 40–42).

Cuando alguien busca terapia, la Iglesia recomienda métodos que respeten la “autodeterminación del cliente”. En otras palabras, la persona tiene derecho a determinar los resultados deseados, y los terapeutas y consejeros deben respetar sus deseos. Para una persona que experimenta atracción hacia personas del mismo sexo o se identifica como gay, el asesoramiento puede ayudarla a que enfoque su sexualidad de maneras más saludables y satisfactorias. Sin embargo, no todo el mundo necesita asesoramiento y terapia.

Si bien en algunas personas pueden producirse cambios en la sexualidad, no es ético centrar el tratamiento profesional en el supuesto de que ocurrirá un cambio en la orientación sexual o que este debe ocurrir. Una vez más, la persona tiene derecho a determinar el resultado deseado.