Sección 69
Revelación dada por medio de José Smith el Profeta en Hiram, Ohio, el 11 de noviembre de 1831. La recopilación de revelaciones que se tenía por objeto publicar en breve se había aprobado en la conferencia especial del 1–2 de noviembre. El día 3 de noviembre se agregó la revelación que aparece en esta obra como la sección 133, a la que más tarde se le llamó el Apéndice. A Oliver Cowdery se le había nombrado previamente para que llevara el manuscrito de las revelaciones y los mandamientos recopilados a Independence, Misuri, con el fin de que se publicaran. También debía llevar consigo el dinero que se había aportado para la edificación de la Iglesia en Misuri. En esta revelación se le instruye a John Whitmer que acompañe a Oliver Cowdery, y también se le indica a Whitmer que viaje y recopile material histórico relacionado con su llamamiento de historiador y registrador.
1–2, John Whitmer ha de acompañar a Oliver Cowdery a Misuri; 3–8, También ha de predicar, recopilar, anotar y escribir datos históricos.
1 Escuchadme, dice el Señor vuestro Dios, por el bien de mi siervo Oliver Cowdery. No me parece prudente que se le confíen los mandamientos ni el dinero que llevará a la tierra de Sion, salvo que vaya con él uno que sea leal y fiel.
2 Por tanto, yo, el Señor, dispongo que mi siervo John Whitmer acompañe a mi siervo Oliver Cowdery.
3 Y también que él continúe escribiendo y recopilando una historia de todas las cosas importantes que él observe y sepa concernientes a mi iglesia;
4 y además, que reciba consejo y ayuda de mi siervo Oliver Cowdery y de otros.
5 Y también mis siervos que andan por la tierra deben enviar un informe de sus mayordomías a la tierra de Sion;
6 porque la tierra de Sion será la cabecera, así como el lugar para recibir y hacer todas estas cosas.
7 No obstante, viaje mi siervo John Whitmer varias veces de un lugar a otro, de iglesia en iglesia, para que más fácilmente adquiera conocimiento,
8 predicando y explicando, escribiendo, copiando, seleccionando y obteniendo todas las cosas que sean para el bien de la iglesia, y para las generaciones futuras que crecerán en la tierra de Sion, para poseerla de generación en generación para siempre jamás. Amén.