2021
Los amo
Enero 2021


Un mensaje del profeta

Los amo

Adaptado de “Restoration Conversations with President Russell M. Nelson”, colección de videos, Recursos del Evangelio.

President Nelson talking with children

El presidente Nelson se reunió con algunos niños de la Primaria en una casa de troncos en Palmyra, Nueva York, EE. UU. Se parece a la casa en la que vivía José Smith cuando tuvo la Primera Visión. Estas son algunas de las cosas que el presidente Nelson dijo a los niños.

Todos somos hijos de Dios

No importa dónde hayan nacido, ni la bandera que ondeen, ni el idioma que hablen, todos somos hijos del Padre Celestial, y progresaremos hasta ser como Él.

Esfuerzos y recompensas

Ser profeta requiere mucho trabajo y mucho estudio. Todo lo que tiene que ver con ser más como el Salvador requiere esfuerzo. Cuando Dios quiso darle a Moisés los Diez Mandamientos, ¿adónde le dijo que fuera? A lo alto del monte Sinaí. Así que Moisés tuvo que caminar hasta la cima de ese monte para recibir los Diez Mandamientos. El Señor se complace en el esfuerzo, porque el esfuerzo brinda recompensas que no pueden recibirse sin él.

La familia del profeta

Somos padres de diez hijos: nueve hermosas hijas y un hijo. Dos de ellas ahora viven en el cielo. Su tiempo en esta tierra fue breve, y ellas nos animan desde el cielo. Estamos unidos en un matrimonio en el templo, lo cual significa que estaremos juntos para siempre cuando todos hayamos pasado nuestro breve período en la tierra.

Una receta para la felicidad

Las Escrituras son como un libro de recetas. Si no tienes un libro de recetas y simplemente comienzas a mezclar harina, leche y huevos, puede que el bizcocho no salga bien. Dios nos ha dado una receta para la felicidad, llamada los mandamientos.

La palabra mandamiento suena como si fuera una orden, como si nos estuvieran diciendo lo que tenemos que hacer, pero en realidad es un atajo hacia el aprendizaje. Por ejemplo, Él nos ha mandado que no bebamos alcohol ni consumamos tabaco y otras sustancias que nos hacen daño. ¿Por qué? Porque de ese modo vivirán más tiempo y serán más felices. ¿Ustedes creen que yo habría llegado a los noventa y cinco años si hubiera estado fumando y bebiendo? No, y soy feliz. Puedo esquiar con mis nietos.

Algo maravilloso

El arrepentimiento significa que cada día ponemos un poco más de esfuerzo y hacemos un poco más para llegar a ser como el Señor Jesucristo. Yo aún me arrepiento. Cada día trato de aprender más y de ser más como el Señor desea que sea. Y eso no es un castigo. Es una gozosa oportunidad. Todos los días salto de la cama por la mañana y digo: “¡Hoy va a suceder algo maravilloso! Voy a ser más como Jesús”. ●

Friend Magazine, Global 2021/01 Jan

Ilustraciones por David Habben.