El diario del bautismo
La autora vive en Kuala Lumpur, Malasia.
Extraño a mis amigos. Ojalá pudiera tener una fiesta de cumpleaños este año, pero hay demasiados casos de COVID-19.
Padre Celestial, por favor, ayúdame a encontrar paz.
¡Ya sé! ¡Puedo mirar el diario de mi bautismo!
Mi testimonio
El Espíritu Santo me consolará…
Gracias por haberme recordado sobre el diario de mi bautismo y por el Espíritu Santo. Ahora me siento mucho mejor.
Unos días más tarde…
¡Feliz cumpleaños!
¡Toc, toc!
¡Beatriz!, nuestra vecina está aquí.
¡Feliz cumpleaños!
¡Gracias! ¿Cómo estás?
Para ser sincera, me siento sola, pero estoy tratando de ser feliz.
Yo también. ¡Quiero mostrarte algo!
Esto es de cuando me bautizaron el año pasado. Me ayuda a sentirme mejor cuando estoy sola.
¡Qué hermoso!
Me recuerda que Jesús me ama y que todo va a estar bien.