¡Puedo tocarlo!
Yo sé que me ama el Salvador
Con reverencia [negra] = 120–132
1. Pasó hace tiempo en un bello lugar,
Cristo bendijo a los niños.
Les enseñó que debían amar
y siempre ser como Él.
Ese amor que a los niños dio
también es para mí.
Un testimonio yo tengo de Él,
yo sé que me ama sin fin.
2. Heme aquí en un bello lugar,
obedeciendo a Cristo.
Sus enseñanzas, la noche de hogar
fuerte me hacen crecer.
Con mi familia me quiero esforzar
y amar al Señor.
Heredaremos mansión celestial,
no hay mayor galardón.
Estribillo: ¡Él vive, sí! Cristo vive para mí.
Le doy mi corazón.
Yo sé que me ama el Señor.