“¿Cómo puedo ser humilde sin sentir baja autoestima?”, Para la Fortaleza de la Juventud, junio de 2021, pág. 31.
Al grano
¿Cómo puedo ser humilde sin sentir baja autoestima?
El Señor siempre ha mandado a las personas que se humillen ante Él y a menudo les ha advertido cuando no han sido lo suficientemente humildes (véase Doctrina y Convenios 67:10).
Lamentablemente, algunas personas pueden sentir que el tratar de ser humilde significa menospreciarse, pero no es así.
“La humildad no significa convencernos a nosotros mismos de que tenemos poco o ningún valor, ni de que somos insignificantes […]. No logramos humildad al pensar menos de nosotros mismos; logramos humildad al pensar menos en nosotros mismos. La humildad llega conforme nos ocupamos de nuestra labor con la actitud de servir a Dios y a nuestros semejantes”1.
Cuando seamos verdaderamente humildes, comenzaremos a desarrollar una profunda reverencia y amor por el Padre Celestial, reconociendo que Él es todopoderoso, omnisciente y amoroso. Esto debería hacernos sentir agradecidos por todos nuestros dones y bendiciones, entre ellos el don de Su Hijo, Jesucristo. Entonces tendremos el deseo de servir a Dios y a los demás. A medida que hagamos esto, el Espíritu Santo estará con nosotros y seremos más felices y nos sentiremos mejor con nosotros mismos también.