Aquí se habla con amor
Extractos
Hablemos hoy de tres lenguajes del amor del Evangelio…
Primero, el lenguaje del afecto y de la reverencia…
Con afecto y reverencia, nuestra reunión sacramental y otras reuniones se centran en Jesucristo…
… Hablemos siempre con reverente y afectuosa gratitud sobre la obra y la gloria de Dios, y sobre los méritos, la misericordia y la gracia de Jesucristo y Su sacrificio expiatorio.
Segundo, el lenguaje del Evangelio del servicio y del sacrificio…
… Los llamamientos para servir al Señor y a los demás en Su Iglesia brindan la oportunidad de crecer en compasión, aptitudes y humildad…
… Fomentamos la conexión y luchamos contra el aislamiento a medida que ministramos regularmente y con el corazón en los hogares […] de unos y otros…
… [Las] actividades bien planificadas ayudan a que todos se sientan valorados, incluidos y llamados a desempeñar una función necesaria…
… La fe, el servicio y el sacrificio nos hacen mirar más allá de nosotros mismos y nos acercan a nuestro Salvador…
Y eso nos lleva al lenguaje del Evangelio de la pertenencia al convenio…
Jesucristo nos ofrece un camino mejor: relaciones cimentadas en convenios divinos, más fuertes que los lazos de la muerte. La pertenencia por convenio con Dios, y unos con otros, puede sanar y santificar nuestras relaciones más preciadas. En verdad, Él nos conoce mejor y nos ama más de lo que nos conocemos o amamos a nosotros mismos. En verdad, cuando ofrecemos en convenio todo lo que somos, llegamos a ser más de lo que somos. El poder y la sabiduría de Dios pueden bendecirnos con toda buena dádiva, en Su tiempo y a Su manera.