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Pathway me ayudó a prepararme para ir a la misión
Soy un converso reciente y cuando empecé a asistir a la Iglesia los miembros me hablaron de Pathway. Después aprendí más acerca de este programa educativo en la página de la Iglesia y por experiencias de otros jóvenes.
Tengo 23 años y ya terminé mi carrera universitaria. Siempre pensé que debía seguir estudiando y además aprender inglés, así que investigué más sobre Pathway y decidí comenzar mis estudios en línea.
Para mi sorpresa me di cuenta de que en Pathway no sólo aprendes y obtienes mayor confianza para hablar inglés, sino que puedes desarrollar otras habilidades espirituales, emocionales, mentales, laborales y económicas. Al pasar las semanas pude notar un progreso en mi vida y eso me hizo sentir feliz; en ese tiempo me pude identificar con la Escritura de 1 Nefi 8:10–11 en donde dice:
“Y sucedió que vi un árbol cuyo fruto era deseable para hacer a uno feliz.
“Y aconteció que me adelanté y comí de su fruto; y percibí que era de lo más dulce, superior a todo cuanto yo había probado antes. Sí, y vi que su fruto era blanco, y excedía a toda blancura que yo jamás hubiera visto”.
Creo que Pathway es uno de estos frutos del árbol. En el versiculo siguiente del libro de Nefi podemos leer:
“Y al comer de su fruto, mi alma se llenó de un gozo inmenso; por lo que deseé que participara también de él mi familia, pues sabía que su fruto era preferible a todos los demás” (1 Nefi 8:12).
Pathway me ha hecho feliz y deseo que otras personas sean felices, puedo decir que esta experiencia fue un factor importante para que yo saliera a una misión. Recientemente fui asignado a la misión México, Cancún.
Es mi testimonio que Dios desea que estudiemos y que nos preparemos académica y secularmente, sé que es un mandamiento y una obligación [que tengo] como hijo de Dios, y ahora como misionero podré compartir con los demás el fruto del árbol de la vida: el evangelio de Jesucristo.