Voces de los miembros
Para la Fortaleza de la Juventud, al estilo caribeño
Más de 3500 jóvenes de veintitrés países participaron en el evento de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Para la Fortaleza de la Juventud. Hubo ocho sesiones diferentes que reunieron a jóvenes en la fe y la esperanza bajo el lema “Todo lo puedo en Cristo” (Filipenses 4:13).
Para la Fortaleza de la Juventud (PFJ) es una conferencia especial para jóvenes de catorce a dieciocho años que dura cinco días e incluye clases, devocionales, conversaciones y actividades, todo con el propósito de fortalecer su fe en Jesucristo. A través de actividades divertidas, atractivas y espirituales, los jóvenes aprenden a poner en práctica esa fe en Cristo en su vida diaria.
Se realizó en tres ubicaciones diferentes: República Dominicana, Puerto Rico y Trinidad y Tobago, los participantes se reunieron para asociarse con sus pares, compartir creencias, aprender cómo acceder al Espíritu Santo y recibir orientación a través del estudio de las Escrituras, las conversaciones y la oración. A los jóvenes los guiaron las palabras y el ejemplo de 889 jóvenes adultos, les enseñaron cómo vivir con entusiasmo el Evangelio de Jesucristo, cómo aumentar su autoestima y cómo transmitir confianza en su naturaleza divina.
La experiencia de cada joven fue diferente, pero cada una fue poderosa a su manera. A continuación, algunas voces del PFJ de 2023:
Hermano Andry y hermana Amarylis, de la República Dominicana, quienes sirvieron como directores casados, dijeron: “PFJ es un ambiente de revelación para cada uno de los jóvenes, son ellos quienes se convierten. Hemos sido guiados por el Espíritu Santo. Hemos crecido a través de esa influencia divina”.
José, un joven de la República Dominicana, dijo: “He aprendido mucho más sobre Jesucristo y que deberíamos apreciar mucho más el sacrificio que Él hizo y seguir Sus mandamientos y Su ejemplo”.
Amelia, de la República Dominicana, una de los numerosos jóvenes que asistieron al PFJ como amigos de la Iglesia, dijo: “Me siento como en familia. No soy miembro de la Iglesia, pero siento que lo soy”.
Isaac, un joven adulto soltero de Puerto Rico, dijo: “PFJ no solo cambia tu testimonio, sino que te fortalece. Lo sé porque me cambió. Fue en PFJ donde decidí servir en una misión”.
Makeda, de Santa Lucía, dijo: “No importa qué ocurra, Cristo siempre está contigo. No importa por lo que estés pasando, Cristo siempre está ahí cuando lo necesitas”.
Marilin, de la República Dominicana, dijo: “El año pasado, cuando vine a PFJ, estaba inactiva, pero fue una experiencia tan maravillosa que me volví a activar y ahora tengo un llamamiento en mi barrio… Mi responsabilidad es testificar de Cristo e invitar a otros a venir a Él”.
Deejah, una consejera de las Bahamas dijo: “Antes de venir aquí, nunca sentí una alegría real en mi corazón. Cuando escuché a otros hablar sobre la alegría que el Padre Celestial nos brinda, pensé: ‘Démosle una oportunidad’ y realmente lo experimenté… No cambiaría esto por nada en el mundo”.
Carlo, de Guadalupe, dijo: “Cuando tenemos momentos de pruebas, es Él quien nos ayuda. Cristo, para mí, es mi guía”.
Priya, una joven que no es miembro y asistió al PFJ en Trinidad, dijo: “Vine a PFJ y me ha mostrado que Jesús realmente es nuestro Salvador. Me ha guiado por un camino que sé que me ayudará en mi futuro”.
Stephanie, de Jamaica, dijo: “No tengan miedo de embarcarse en el bendito viaje de ser seguidores de Jesucristo”.
Los jóvenes de la Iglesia son poderosos. Son una luz en un mar de oscuridad. Su fe y valentía inusuales los hacen únicos en el Caribe y bien posicionados para tener un impacto positivo en la familia, los compañeros y la sociedad. PFJ les brinda la oportunidad de ver que no están solos, sino que son un ejército de Dios y que, aunque son jóvenes, son poderosos e influyentes para el bien.
Élder Eduardo Gavarret, presidente del Área Caribe, dijo: “Al concluir PFJ, no todo se detiene, más bien, es el comienzo de algo. Continúen poniendo en práctica lo que han aprendido aquí y eso fortalecerá su testimonio y los convertirá, no solo en personas más fieles, sino en personas que podrán prestar un gran servicio a la comunidad y no solo a la Iglesia. Pongamos a Cristo en primer lugar y sigamos Su ejemplo”.
Hermana Norma Gavarret, dijo: “Y sean una luz para el mundo. Somos llamados a ser una luz para el mundo porque el Evangelio de Jesucristo trae luz”.
Países y territorios que participaron en 2023
Antigua
Aruba
Bahamas
Barbados
Bonaire
Curazao
Dominica
Gran Caimán
Granada
Guadalupe
Guyana
Jamaica
Martinica
República Dominicana
Puerto Rico
San Martín
San Vicente
Santa Cruz
Santo Tomás
St. Kitts
Surinam
Tórtola
Trinidad y Tobago