Discapacidades
¿Cuál es mi responsabilidad como líder?


“¿Cuál es mi responsabilidad como líder?”, Servicios para personas con discapacidad: Líderes, 2020

“¿Cuál es mi responsabilidad como líder?”, Servicios para personas con discapacidad: Líderes

¿Cuál es mi responsabilidad como líder?

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Man speaking from a pulpit

Los líderes de la Iglesia tienen la responsabilidad sagrada de cuidar de cada miembro de su rebaño y de tender la mano a la persona en particular, lo cual incluye acercarse a los miembros que tienen discapacidad y a quienes los cuidan. Cuando la motivación para saber más en cuanto a las personas surge del amor y la compasión, pueden ocurrir cosas maravillosas. Los líderes y maestros de la Iglesia deben tener en mente lo siguiente al trabajar con las personas que tengan alguna discapacidad y deben esforzarse por aumentar la concienciación y la comprensión de esta:

  • Hacerlas sentir bienvenidas. Busque maneras de ayudar a las personas con discapacidad a sentirse queridas, aceptadas e incluidas.

  • Proveer oportunidades. Con espíritu de oración, encuentre oportunidades significativas en las que los miembros con discapacidad puedan prestar servicio. Reúnase con las personas y con quienes las cuidan para determinar cuáles son sus habilidades y talentos. Analice con ellos las formas en que esas habilidades y talentos se puedan utilizar de la mejor manera. Toda persona tiene algo que puede contribuir.

  • Determinar cuáles son las necesidades específicas. Hable con las personas y las familias en cuanto a sus necesidades. Es posible que necesiten apoyo físico, espiritual y emocional, así como descanso de su rutina diaria. Recuerde que los miembros que tienen discapacidad y sus familias por lo general son el mejor recurso para aprender en cuanto a la discapacidad. Ellos saben en cuanto a las fortalezas y los desafíos que son producto de una discapacidad específica y pueden ayudarle a reconocer en qué necesitan ayuda. Usted ganará una mayor comprensión al hacer preguntas respetuosas a las personas, a los miembros de su familia y a otros cuidadores, tales como las siguientes:

    • “¿Qué sería útil que yo supiera sobre ustedes a fin de que yo pueda hacer mi mejor esfuerzo para ayudarles a tener una experiencia más significativa en la Iglesia?”.

    • “¿Qué les gustaría que yo supiera en cuanto a su hijo?”.

    • “¿Qué cosas les han sido útiles en el pasado que yo podría tratar de implementar en la Iglesia?”.

  • Ayudar a los demás a comprender. Después de consultar con los miembros que tengan alguna discapacidad sobre lo que están dispuestos a que se comparta sobre ellos con los demás, ayude a los miembros del barrio a entender la discapacidad y las necesidades de la persona. Eso puede ayudar a los miembros del barrio a tener mayor compasión, comprensión e inspiración en cuanto a la manera de brindar apoyo.

  • Localizar recursos. Al reunirse con las personas, las familias y los líderes, llegará a entender cuáles son las mayores necesidades y cuáles son las fortalezas y los dones que los miembros están dispuestos a compartir. Cuando sea apropiado, averigüe los recursos que haya disponibles en la comunidad, el barrio y la estaca para atender esas necesidades.

  • Deliberar juntos en consejo. Cuando sea apropiado, invite a las personas, a sus padres o a otras personas que actúan de cuidadores a hablar con los líderes del barrio sobre sus fortalezas, así como sobre los desafíos y los obstáculos que pudieran evitar que ellos participen plenamente en el barrio. Ayude a los padres a ponerse en contacto con otros padres que tengan hijos con discapacidades similares.

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