Seminario
Lección 48: Doctrina y Convenios 30–36, Parte 2: “Abrid vuestra boca y será llena”


“Doctrina y Convenios 30–36, Parte 2: ‘Abrid vuestra boca y será llena’”, Doctrina y Convenios: Manual del maestro de Seminario, 2025

“Doctrina y Convenios 30–36, Parte 2”, Doctrina y Convenios: Manual del maestro de Seminario

Lección 48: Doctrina y Convenios 30–36

Doctrina y Convenios 30–36, Parte 2

“Abrid vuestra boca y será llena”

Imagen
un joven y una joven leyendo las Escrituras

Cuando el Señor llamó misioneros a predicar Su Evangelio poco después de la organización de Su Iglesia, les dio consejos para fortalecerlos y guiarlos en su servicio misional. Esta lección puede ayudar a los alumnos en sus esfuerzos por compartir el Evangelio.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

Preocupaciones en cuanto a compartir el Evangelio

Considere la posibilidad de comenzar la lección planteando la situación hipotética y las preguntas siguientes.

Mientras un discursante de la reunión sacramental hablaba de la importancia de la obra misional, Carlos sintió que se resistía a la idea de hablar del Evangelio con otras personas. Carlos es bastante callado por naturaleza. Además, nunca ha tenido realmente una conversación del Evangelio con alguien que no fuera miembro de la Iglesia. Le preocupa cómo sería una conversación así. Su naturaleza callada y su falta de experiencia lo hacían sentirse incómodo ante la idea de iniciar una conversación sobre el Evangelio con otra persona.

  • ¿Qué crees que resultaría útil que Carlos comprendiera sobre la obra misional?

  • ¿Qué otras preocupaciones suelen tener las personas a la hora de compartir el Evangelio del Salvador?

Recuerde a los alumnos que en la lección anterior aprendieron sobre muchas personas que fueron llamadas al servicio misional poco después de que se organizara la Iglesia. Algunos de estos hombres habían conocido el Evangelio restaurado poco tiempo antes de ser llamados a misiones.

Invite a los alumnos a compartir algunas de las preocupaciones que pudieron tener estos misioneros recién llamados. También puede pedir a los alumnos que reflexionen sobre sus propias preocupaciones a la hora de compartir el Evangelio con los demás. Luego, comparta lo siguiente como ayuda a fin de preparar a los alumnos para estudiar.

Hoy estudiarás las enseñanzas del Señor en Doctrina y Convenios 30–36 que pueden ayudarte a reconocer Su deseo de ayudarte a compartir Su Evangelio. Mientras estudias, busca enseñanzas que puedan ayudarte a aumentar tu disposición y capacidad para compartir el Evangelio de Jesucristo.

El Señor brinda consejos útiles a Sus misioneros

Dé tiempo a los alumnos para estudiar el consejo del Señor que se encuentra en los versículos siguientes. Una manera de hacerlo es dividir la clase en cinco grupos. Entregue a cada grupo una hoja de papel en blanco e invítelos a diseñar una página con un título como “Útil consejo misional del Señor”.

Asigne un conjunto de versículos a cada grupo. Luego, los alumnos podrían agregar a sus páginas al menos tres puntos de consejo que encuentren en sus versículos. Si lo desean, ellos podrían agregar ilustraciones a sus páginas. A continuación, puede invitar a los alumnos a compartir con la clase las páginas que hayan completado.

Lee los versículos siguientes en busca un consejo que el Señor dio que podría ayudarte a estar más dispuesto y ser más capaz de compartir el Evangelio.

Doctrina y Convenios 30:5, 8–11 (Podría resultar útil saber que el “hermano” de Peter Whitmer al que se hace referencia en el versículo 5 era Oliver Cowdery, quien había sido llamado a predicar en una revelación anterior [véase Doctrina y Convenios 28:14–16]).

Doctrina y Convenios 31:4–9, 11–13

Doctrina y Convenios 32:1–5

Doctrina y Convenios 33:8–12, 16–17

Doctrina y Convenios 35:13–15, 24

Cuando los alumnos hayan terminado de estudiar, bríndeles la oportunidad de compartir lo que aprendieron. Una manera de hacerlo podría ser invitar a varios alumnos a compartir el consejo que encontraron en sus versículos que les resultó más significativo y a hablar de una verdad que podamos aprender de este consejo. Usted podría escribir esas verdades en la pizarra o invitar a los alumnos a escribirlas.

Algunos ejemplos de verdades que los alumnos podrían mencionar son los siguientes: En lugar de temer a los demás, podemos confiar en que el Señor nos ayudará a compartir Su Evangelio (véase Doctrina y Convenios 30:11); el Señor abrirá el corazón de las personas a las que enseñemos (véase Doctrina y Convenios 31:7); el Señor estará con nosotros al procurar compartir Su Evangelio (véase Doctrina y Convenios 32:3); al abrir la boca para compartir el Evangelio, el Señor nos ayudará a saber qué decir (véase Doctrina y Convenios 33:8–10); el Señor da el poder de Su Espíritu a los débiles que le sirven (véase Doctrina y Convenios 35:13–14).

  • ¿Por qué crees que el Señor está tan deseoso por ayudarnos a compartir el Evangelio?

  • ¿Cómo podrían ayudarnos estas verdades sobre el Señor en nuestros esfuerzos por predicar el Evangelio?

Ideas para abrir la boca y compartir el Evangelio

Dedique algún tiempo a ayudar a los alumnos a conocer y analizar maneras específicas en que ellos pueden cumplir el mandamiento del Señor de “abri[r] [su] boca” (Doctrina y Convenios 33:8–10; véase también 30:5, 11) y compartir el Evangelio. Ayudar a los alumnos a ver maneras específicas y alcanzables de hacerlo puede reforzar su confianza para compartir el Evangelio.

Una manera de hacerlo podría ser mostrando uno o varios de los videos siguientes. Invite a los alumnos a buscar diferentes maneras en que la gente abría la boca e invitaba a las bendiciones del Señor. También podría compartir otros recursos de las páginas “Compartir el Evangelio” en LaIglesiadeJesucristo.org.

Los videos siguientes comparten ideas sobre cómo puedes “abr[ir] [tu] boca” (Doctrina y Convenios 30:5) e invitar a los demás de forma natural y significativa a experimentar el Evangelio de Jesucristo.

  • ¿Qué experiencias has tenido al compartir el Evangelio? ¿Cuál crees que fue la preparación más útil para esas experiencias?

Elabora un plan

Dé tiempo a los alumnos para que escriban un plan sencillo sobre lo que harán a fin de compartir el Evangelio con los demás. Las preguntas siguientes podrían darles ideas de qué escribir.

  • ¿Con quién crees que podrías compartir el Evangelio?

  • A partir de lo que has aprendido hoy, ¿de qué maneras naturales y significativas podrías ayudar a esta persona a acercarse más a Jesucristo?

  • ¿Qué obstáculos crees que podrían impedirte seguir tu plan?

  • ¿Qué verdades acerca del Salvador has aprendido en Doctrina y Convenios 30–36 que puedan ayudarte a superar estos obstáculos?

Considere cómo puede alentar a los alumnos a actuar con fe de acuerdo con lo que sintieron hoy. Usted podría invitarlos a considerar establecer un período de tiempo para hacer lo que escribieron. Comparta su confianza en la capacidad del Salvador para tocar el corazón de los demás a través de ellos.

Invite a los alumnos a vivir lo que aprenden: Para obtener capacitación sobre cómo hacer un seguimiento con los alumnos de sus planes para que vivan lo que están aprendiendo, consulte la capacitación titulada “Invite a los alumnos a vivir lo que están aprendiendo”, que se encuentra en Habilidades para el desarrollo del maestro.

Imprimir