Aunque la ley permanente de Dios sobre el matrimonio es entre un hombre y una mujer (véase Jacob 2:27, 30), ha habido ocasiones en las que Él ha mandado a algunos de Sus hijos practicar el matrimonio plural. Los primeros años de la Iglesia restaurada fueron una de esas épocas de excepción. El Señor mandó al profeta José Smith practicar el matrimonio plural y enseñar el principio a los demás. Esta lección puede ayudar a los alumnos a entender más acerca del mandamiento del Señor a algunos santos de practicar el matrimonio plural en los primeros días de la Iglesia.
Algunas posibles actividades de aprendizaje
Los mandamientos difíciles
El presidente Russell M. Nelson enseñó lo siguiente:
Dios siempre ha pedido a Sus hijos del convenio que hagan cosas difíciles (Russell M. Nelson, “Vivan como verdaderos milénicos”, Liahona, octubre de 2016, pág. 49)
¿Cuáles son algunos ejemplos de cosas difíciles que Dios ha pedido a Sus hijos que hagan?
¿Por qué creen que Dios a veces manda a Sus hijos que hagan cosas difíciles?
En nuestra dispensación, el Señor le pidió al profeta José Smith que hiciera muchas cosas difíciles. Un mandamiento difícil que Dios le dio a José Smith fue instituir la práctica del matrimonio plural, también conocida como poligamia, en los primeros días de la Iglesia.
Las instrucciones del Señor sobre el matrimonio plural
Mientras traducía la Biblia, el profeta José Smith leyó acerca de algunos de los siervos de Dios que se casaron con más de una esposa. Para averiguar lo que José le preguntó a Dios, lean Doctrina y Convenios 132:1. Luego lean los versículos 2 y 34–37 para saber cómo respondió el Señor a la pregunta del Profeta.
¿Qué verdad aprenden de esos versículos acerca de cuándo el matrimonio plural es aceptable para el Señor?
En el Libro de Mormón aprendemos que algunos nefitas comenzaron a contraer matrimonios plurales en contra de la voluntad de Dios. Justificaron sus acciones basándose en los relatos de las Escrituras del Antiguo Testamento (véase Jacob 2:23–24; véase también Doctrina y Convenios 132:38–39). El Señor condenó esas acciones y enseñó a los nefitas Su norma para el matrimonio.
Lean Jacob 2:26–27, 30 y busquen las enseñanzas del Señor a los nefitas.
¿Qué agregaron esos versículos a su entendimiento en cuanto al matrimonio plural?
¿Cómo podría ayudar ese conocimiento con las preguntas que podrían tener acerca de la práctica del matrimonio plural en los primeros días de la Iglesia?
El matrimonio plural entre los primeros santos
¿Qué aprendieron de su estudio que les haya resultado útil?
¿Cómo fue para José Smith y otros primeros miembros de la Iglesia, que se les pidiera que practicaran el matrimonio plural?
¿Cómo ayudó Dios a los santos con ese difícil mandamiento?
El élder Neil L. Andersen, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó lo siguiente:
15:1
La fe nunca exige una respuesta para cada pregunta, sino que procura la seguridad y el valor para seguir adelante, a veces admitiendo que “no sé todo, pero sé lo suficiente para seguir en el camino del discipulado” (Neil L. Andersen, “La fe no es una casualidad, sino una elección”, Liahona, noviembre de 2015, pág. 66)
Haz un resumen de lo que aprendiste
Imaginen que tienen una conversación con un amigo que se pregunta si José Smith iba en contra de la voluntad de Dios cuando instituyó la práctica del matrimonio plural en la Iglesia. Dediquen un momento a reseñar en su diario personal algunos puntos que podrían compartir con su amigo, con bondad y paciencia.