Jesucristo meditando bajo un árbol

Semana 6 — Material para el maestro

La fe en Jesucristo y el perdón por medio de Él

Todos podríamos beneficiarnos de tener una mayor capacidad para dejar de pecar y arrepentirnos de verdad. Muchos también tenemos un profundo deseo de sentir que nuestros pecados son perdonados. En ambos casos, la fe en Jesucristo es un primer paso importante. En esta lección, los alumnos tendrán la oportunidad de explicar por qué la fe en el Salvador es una condición necesaria para el arrepentimiento y el perdón y analizar y planificar cómo pueden nutrir su propia fe en Cristo. Considerarán cómo pueden entregar de mejor manera toda su alma a Dios mientras buscan Su perdón.

Ideas para la enseñanza

Capítulo 9

La fe en Jesucristo da lugar al poder y a la fortaleza que necesitamos para arrepentirnos y sentirnos perdonados

• Si lo desea, y para comenzar la clase, podría invitar a un alumno a resumir la historia que el élder Andersen menciona en los primeros tres párrafos del capítulo 9. (Considere invitar a alguien, antes de la clase, para que se prepare para resumir el relato). O bien podría mostrar el video “Fe en Jesucristo” (2:54), en el que el élder Andersen relata la historia.

  Después del video, podría preguntar:

  • ¿Por qué creen que llegar a conocer al Salvador tiene más poder en nuestro arrepentimiento que simplemente centrarnos en los métodos de cambio?

  • ¿Qué verdad dirían que está enseñando el élder Andersen con esta historia? (Ayude a los alumnos a encontrar una verdad similar a la del encabezamiento de esta sección, que aparece más arriba).

• Recuerde a los alumnos que, más adelante en este capítulo, el élder Andersen habla sobre las enseñanzas y experiencias de Amulek y Enós. Considere invitar a la mitad de la clase a leer Alma 34:8, 15–18 y a la otra mitad a leer Enós 1:5–8. Invite a ambos grupos a buscar lo que esos versículos enseñan sobre la fe que conduce al arrepentimiento y al perdón. Luego, podrían analizar una o más de las siguientes preguntas:

  • ¿Por qué creen que Amulek enseñó al pueblo sobre la expiación del Salvador antes de hablarles sobre el arrepentimiento?

  • ¿Qué le enseñó el Señor a Enós acerca de cómo se podría borrar su culpa?

  • ¿Qué saben acerca de Jesucristo que los ayude a creer que Él tiene poder para ayudarlos a cambiar y sentirse perdonados?

Nuestra fe en Jesucristo crecerá a medida que demos cabida a Él y a Sus enseñanzas en nuestra vida Podemos nutrir nuestra fe en nuestro Salvador mediante la diligencia y la paciencia.

• Podría escribir la siguiente pregunta en la pizarra: ¿Cómo puedo aumentar mi fe en Cristo? Después podría invitar a los alumnos a comentar cómo contestarían esa pregunta. (Anime a los alumnos a que recurran a lo que aprendieron durante el estudio del capítulo 9). Considere utilizar los comentarios de los alumnos para hacer la transición a una o a más de las siguientes actividades o preguntas que podrían ayudar a profundizar su deseo de aumentar su propia fe en Cristo:

  • Invite a los alumnos a leer Alma 32:27–29, 41–42 y a buscar verdades que enseñen cómo podemos nutrir nuestra fe. Los alumnos podrían buscar verdades similares a las que se hallan en el encabezamiento de esta sección, que aparece más arriba.

  • ¿Qué podemos hacer para dar más cabida en nuestro corazón al Salvador y a Sus enseñanzas?

  • ¿Cómo le explicarían a otra persona el proceso de nutrir su fe en Jesucristo?

  • Conceda a los alumnos tiempo para leer individualmente o en grupos pequeños los últimos tres párrafos del capítulo 9 (comenzando con “Para experimentar los milagros de Dios…”) e invítelos a buscar formas prácticas de aumentar su fe en Jesucristo. También podría guiar a los alumnos a analizar lo que el élder Andersen promete a quienes edifiquen un fundamento de fe en el Salvador.

• Podría invitarlos a meditar sobre lo que creen que deberían hacer en su vida para aumentar su fe en Cristo. Concédales tiempo para que elaboren un plan sobre cómo seguirán adelante. Es posible que desee brindar una oportunidad para que los alumnos compartan sus planes a fin de aprender los unos de los otros.

Capítulo 10

El perdón únicamente puede provenir de nuestro Padre Celestial y de Jesucristo

• Podría invitar a los alumnos a compartir lo que más les impresionó del capítulo 10 sobre la necesidad de tener una relación con nuestro Padre Celestial y Su Hijo. Enseguida, podría repasar los dos primeros párrafos del capítulo 10 y ayudar a los alumnos a encontrar una verdad similar a la que se indica en el encabezamiento de esta sección, que aparece más arriba. Luego, podrían analizar una o más de las siguientes preguntas:

  • ¿Por qué creen que las “conversaciones sinceras” (primer párrafo del capítulo 10) con nuestro Padre Celestial son el núcleo de nuestro arrepentimiento y perdón?

  • ¿Por qué es más eficaz reconocer en primer lugar nuestros pecados ante nuestro Padre Celestial y nuestro Salvador en lugar de acudir primero a la familia, los amigos, los programas de recuperación o el asesoramiento a fin de arrepentirnos? ¿Qué podría estar mal en el hecho de confiar únicamente en “llevar la cuenta de las cosas” relacionadas con el arrepentimiento? (véase el párrafo 4).

  • ¿Cómo debemos acercarnos a nuestro Padre Celestial cuando nos arrepentimos sinceramente? (Podría invitar a los alumnos a buscar ideas en los primeros cuatro párrafos de la sección “Clamar al Señor”). ¿Por qué?

• Considere invitar a los alumnos a pensar en ejemplos de las Escrituras de personas que suplicaron perdón a Dios. A medida que los alumnos los comenten, podría preguntar qué podemos aprender de esos ejemplos. Si es necesario, podría utilizar como ejemplo estas referencias de las Escrituras: Enós 1:1–4; Mosíah 4:1–2; Alma 36:17–18. (Podría invitar a los alumnos a realizar esta actividad en grupos pequeños).

El Señor perdonará y redimirá a los que le ofrezcan toda su alma, sin retener nada

• Podría repasar Omni 1:26 y pedir a los alumnos que analicen lo que creen que significa ofrecer toda nuestra alma a Dios. Como parte de su análisis, considere leer los dos primeros párrafos bajo el título “Ofrecer nuestra alma entera a Dios” para buscar una verdad similar a la que se encuentra en el encabezamiento de esta sección, que aparece más arriba. Después podrían analizar la siguiente pregunta:

  • ¿Cuáles son algunas de las cosas que podrían impedir que alguien ofrezca toda su alma a Dios mientras procura el arrepentimiento?

• Considere analizar en qué maneras la oración en voz alta puede añadir poder a nuestras oraciones (véanse los párrafos del 3 al 8, que comienzan con “Existe un tremendo poder…”, bajo el título “Ofrecer nuestra alma entera a Dios”).

• Invite a los alumnos a meditar en la relación que tienen con su Padre Celestial y su Salvador y a considerar con espíritu de oración lo que harán para ofrecer toda su alma a Dios conforme se arrepienten y buscan el perdón.

Para la próxima vez

Considere invitar a los alumnos a pensar en las siguientes preguntas mientras estudian los capítulos 11 y 12 de El don divino del perdón: ¿Cómo trata el diablo de engañarnos para impedir nuestro arrepentimiento? ¿Cómo podemos reconocer sus engaños y resistirlos? ¿Cómo pueden el miedo y el orgullo impedir que nos arrepintamos?