Seguir juntos a Jesús
Mi familia y yo ayunamos y oramos juntos varias veces por mi prima, que estaba enferma. Yo también hice mis propias oraciones por ella. Sé que el Padre Celestial escucha nuestras oraciones.
Collin C., 9 años, Utah, EE. UU.
Sé que el Libro de Mormón es verdadero porque el Espíritu Santo me lo dijo. Estaba emocionado por decírselo a mi mamá. Ella me dio un abrazo fuerte y me sentí muy feliz.
Matías M., 10 años, Cundinamarca, Colombia
Mi familia me ayuda a lograr mis metas. ¡Amo a mi familia!
Robin A., 6 años, Carolina del Norte, EE. UU.
Vi a un niño en la escuela que estaba solo. Lo invité a ser mi amigo, ¡y ahora somos amigos!
William P., 7 años, Durham, Inglaterra
Tejí unos ositos y se los regalé a las enfermeras que cuidaban a los pacientes del COVID-19 para darles las gracias. Estoy agradecida por prestar servicio en mi comunidad.
Emi L., 11 años, Nuevo México, EE. UU.
Durante la pandemia me centré en las cosas que podía hacer en lugar de las cosas que no podía hacer. Eso me ayudó a acercarme más a mi familia y a Jesús.
James S., 9 años, Michigan, EE. UU.
Mi familia fue sellada en el templo cuando yo tenía seis años. Me alegra saber que nuestra familia es eterna.
Yoleannys C., 7 años, Miranda, Venezuela
Rafaela S., 9 años, Paraná, Brasil
Bradley y Evelyn S., 8 y 9 años, Iowa, EE. UU.
Elias M., 6 años, Aargau, Suiza
Lucy E., 8 años, California, EE. UU.
Avery S., 10 años, Alberta, Canadá