La estrella de la Natividad
¿Qué papel podría representar Cayden en la Natividad?
Era Nochebuena. ¡Eso significaba que había llegado el momento de la representación de la Natividad de la familia! Representar la historia del nacimiento de Jesucristo era una de las tradiciones navideñas favoritas de Cayden.
El papá sacó la caja con los disfraces. “¿Quiénes quieren ser este año?”, preguntó al hermano y a la hermana menores de Cayden.
“¡Yo seré José!”, dijo Grant. Metió la mano en la caja y sacó los disfraces.
“¿Puedo ser María?”, preguntó Hannah. La mamá asintió y le entregó un muñeco. Hannah envolvió cuidadosamente el muñeco en una manta y lo puso en una pequeña caja a modo de pesebre.
Cayden sonrió. Hannah quería hacer el papel de María cada año.
“Seré un pastor”, dijo Brynne, la hermana mayor de Cayden, y tomó un animal de peluche. “Y esta será mi oveja”.
“Mamá sería un hermoso ángel”, dijo el papá.
La mamá sonrió. “¿Ven lo sabio que es papá? Él sería genial como un sabio rey mago”.
“Alguien fuerte tiene que ser el asno”. Scott, el hermano mayor de Cayden, enseñó los músculos. “Supongo que ese soy yo”.
“¿Y tú, Cayden?”, preguntó el papá, “¿qué papel quieres representar?”.
Cayden guardaba silencio. Entonces tuvo una idea.
Corrió para quitar la manta amarilla de la cama y la sostuvo para que la viera el papá. “Es un papel que no hemos tenido antes. Quiero ser la estrella, la que muestra el camino hacia Jesús”.
“Es una idea excelente”, dijo el papá.
Todos se pusieron sus disfraces. Cayden se echó la manta amarilla sobre los hombros y la anudó. Entonces el papá leyó el relato de las Escrituras.
Cayden sonrió cuando Scott se puso a cuatro patas para ser el asno. El papá puso a Hannah sobre la espalda de Scott para que fuera María. Grant, que hacía de José, trató de sostenerla mientras caminaban por el salón. Cayden escuchó atentamente. Sabía que su parte estaba por venir.
“Y he aquí, aparecerá una estrella nueva”, leyó el papá.*
Cayden se puso de pie con los brazos extendidos. Pensó en la estrella que brillaba sobre Belén. Él quería ayudar a las personas a encontrar a Jesús, tal como lo hizo la estrella en esa primera noche de Navidad.