“¿Qué sucede si no puedo decir que sé que el Evangelio es verdadero?”, Para la Fortaleza de la Juventud, julio de 2024.
Al grano
¿Qué sucede si no puedo decir que sé que el Evangelio es verdadero?
Si sientes que no puedes decir: “Yo sé”, está bien. Comienza con lo que crees. Y si no estás seguro al respecto, comienza con lo que deseas creer. Luego “dej[a] que este deseo obre en” ti (Alma 32:27), y que te lleve a actuar: a orar, a estudiar, a arrepentirte, a servir. Cuando ejerzas la fe, presta atención a tus pensamientos y sentimientos. Con el tiempo, es posible que digas con confianza: “Yo creo”.
“La palabra creencia es de gran valor, y un acto aún más valioso, y […] nunca t[ienes] que disculpar[te] por ‘creer solamente’”.
Atesora las verdades del Evangelio en que creas. Actúa de acuerdo con ellas. Sé fiel a ellas. Al hacerlo, serás bendecido con el Santo Espíritu. Y puedes sentirte cómodo en la Iglesia sin importar qué clase de testimonio tengas. Como dijo el presidente Dieter F. Uchtdorf, quien fuera Segundo Consejero de la Primera Presidencia: “En las puertas de nuestros centros de reuniones no hay carteles que digan: ‘Su testimonio debe ser así de fuerte para poder entrar’”.