“Exámenes sorpresa y oración”, Para la Fortaleza de la Juventud, julio de 2024.
Voces de los jóvenes
Exámenes sorpresa y oración
Tayana C., 17 años, Abiyán, Costa de Marfil
Recientemente había estado estresada porque no tenía las calificaciones que deseaba. Pensé en ello y me di cuenta de que no estaba orando ni leyendo las Escrituras. Así que decidí leer las Escrituras y orar cada mañana. Al poco tiempo, mis calificaciones empezaron a mejorar poco a poco. Leer las Escrituras y orar en verdad me ha ayudado.
En otra ocasión, tuvimos un examen sorpresa en la escuela y yo no había estudiado. Nadie había estudiado; el maestro nos había sorprendido. Todos empezaron a hacer trampa en la prueba. No voy a mentir; yo también tenía muchos deseos de hacer trampa, pero algo me dijo: “Tienes que sentarte y hacer lo mejor que puedas con lo que sabes”. Era una voz suave. Estaba nerviosa, pero la voz me calmó el corazón. Así que no miré a la izquierda ni a la derecha y respondí lo que sabía. Al final, fui la única que obtuvo una calificación alta. Me alegro de haber escuchado al Espíritu Santo.