Anne C. Pingree
Segunda Consejera de la Presidencia General de la Sociedad de Socorro
A Anne C. Pingree le encanta leer; pero aún más, le encanta ayudar a otras personas a aprender a leer.
Mientras servía con su esposo, George C. Pingree, cuando él presidía la Misión Nigeria Port Harcourt, la hermana Pingree concentró su labor en promover el alfabetismo, en especial entre los líderes de las organizaciones auxiliares. “Jamás olvidaré lo feliz que se sentían las hermanas cuando aprendían a leer. Cuando se ponían de pie en las reuniones de capacitación y leían frases sencillas acerca de su responsabilidad como líderes, las demás hermanas les aplaudían; se sentían tan felices”, dice la hermana Pingree. “Les abría un mundo totalmente nuevo”.
Habiendo obtenido una licenciatura en Inglés de la Universidad de Utah, la hermana Pingree ha sido voluntaria para trabajar con los niños de edad escolar que hablan español en el “Programa puedo leer” y actuar de tutora para inmigrantes laosianos mediante una organización de voluntarios para la alfabetización.
“Creo que el Señor nos da la experiencia en la vida que nos prepara para cosas que están por venir”, afirma la hermana Pingree, quien adjudica a esas experiencias con la alfabetización el que estuviese preparada para su nuevo llamamiento. En calidad de segunda consejera en la presidencia general de la Sociedad de Socorro, tiene la esperanza de continuar fomentando el alfabetismo como énfasis constante de la Sociedad de Socorro.
La hermana Pingree agrega que el trabajar con personas de otros países también la ha preparado de maneras adicionales. “Mi perspectiva, mi punto de vista y mi entendimiento de las mujeres de todo el mundo ha aumentado; ellas me han enseñado más acerca de la fe y del testimonio que lo que yo les haya enseñado”, afirma.
El servicio que ha prestado como miembro de la mesa general de la Sociedad de Socorro, como presidenta de la Sociedad de Socorro de estaca y de barrio, como consejera en la presidencia de las Mujeres Jóvenes de estaca y presidenta de la Primaria del barrio han dado también a la hermana Pingree un gran amor y aprecio por las mujeres de la Iglesia. “Espero tender una mano de ayuda a toda mujer y ayudarle a sentirse importante ante los ojos del Señor. Los profetas nos han dicho que, como mujeres del convenio, tenemos una importante aportación que hacer en la edificación del reino en estos últimos días. Nuestra influencia de rectitud hará la diferencia en este mundo”, afirma.
La hermana Pingree nació el 11 de junio de 1941 en Salt Lake City, hija de Ezra T. y Maude Erickson Clark. Ella y su esposo se casaron en el Templo de Salt Lake en 1963; tienen cinco hijos y cuatro nietos.