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Lección 6: ¿Cuál es el ciclo emocional de la separación, y cómo nos afectará a mi familia y a mí?


“Lección 6: ¿Cuál es el ciclo emocional de la separación, y cómo nos afectará a mi familia y a mí?” Cómo llegar a ser una familia autosuficiente y fuerte ante la adversidad, 2016

“Lección 6”, Cómo llegar a ser una familia autosuficiente y fuerte ante la adversidad

Lección 6

¿Cuál es el ciclo emocional de la separación, y cómo nos afectará a mi familia y a mí?

El propósito de esta lección es ayudar a las familias de militares a comprender y sobrellevar el ciclo emocional que se experimenta durante los períodos de separación.

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hombre con los ojos cerrados

Recursos

A continuación encontrará una lista de recursos que puede utilizar para estudiar este tema.

Video:

Reseña de aprendizaje

Lea la siguiente declaración escrita por Jonathan Kehr, infante de marina de los Estados Unidos, quien participó en cuatro emplazamientos militares:

“Antes de mis cuatro emplazamientos en el Medio Oriente como infante de marina, mi familia y yo lidiamos con muchísimas emociones. Por supuesto, había clases obligatorias para todos los marinos antes de los emplazamientos, las cuales trataban el estrés que experimentan las familias antes de la separación. El saber que tendría estrés no aliviaba la ansiedad que sentía dentro…

“En lo personal, me afectaba física y emocionalmente. En el aspecto físico, no dormía bien ni hacía ejercicio porque los días de trabajo tranquilamente podían ser de 18 horas, y el resto del día lo pasaba preocupándome por los problemas restantes que requerían mi atención. En lo emocional, sentía que en el trabajo tenía sobre los hombros todo el peso del mundo debido a mis responsabilidades y a la incertidumbre del futuro inmediato. Sentía que no tenía el control de mi vida porque por lo general nuestro entrenamiento de combate previo al emplazamiento tenía lugar lejos de casa y pasaba muy poco tiempo en casa durante los meses previos a mis emplazamientos. Aunque mi familia era amorosa y fuerte, a menudo me sentía solo, incluso cuando estábamos juntos. Tuve que prepararme mentalmente, y casi le cierro el corazón a mi familia mientras trataba de lidiar con esas emociones. Oraba y estudiaba las Escrituras a diario, recibí bendiciones del sacerdocio, y sé que estas me dieron paz y entendimiento y fortalecieron mi determinación. Al mirar atrás, sé que mi confianza y fe estaban en el Señor. Sabía que era mi deber servir en el Medio Oriente, y lo hacía por un propósito más grande que yo mismo”.

Reflexione en experiencias parecidas que haya tenido o imagine cómo podría sentirse en esa situación. ¿Cómo puede evitar ser presa de las emociones negativas durante situaciones como esa? ¿Qué puede hacer a fin de prepararse para esas circunstancias?

Principio 1: El ciclo emocional del emplazamiento militar es natural y normal.

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mujer triste

Es natural y normal que usted sienta una gran variedad de emociones mientras se esté preparando para un emplazamiento militar y mientras se encuentre en uno. Las personas que sufren ese tipo de separación casi siempre sienten ansiedad por la seguridad de su cónyuge y sus seres queridos. El cónyuge que se queda en casa se preocupa por la seguridad del que parte a una zona de operación militar, y este se preocupa por la seguridad y bienestar de la familia que deja en casa. Usted podría sentirse insensible, confundido o abrumado; hasta podría sentir lástima de sí mismo.

¿De qué manera el comprender que sus sentimientos son normales le ayuda a salir adelante? ¿Qué puede hacer en situaciones en las que se sienta emocionalmente abrumado?

El élder David S. Baxter, de los Setenta, enseñó lo siguiente a los padres que crían solos a sus hijos, y sus enseñanzas también pueden aplicarse a los cónyuges que experimentan un emplazamiento militar.

“… testifico que si ponen su mejor empeño en este, el más difícil de los desafíos humanos, los cielos los favorecerán. Realmente no están solos. Permitan que el tierno poder redentor de Jesucristo ilumine su vida y los llene de esperanza en la promesa eterna. Sean valientes; tengan fe y esperanza; piensen en el presente con fortaleza y miren al futuro con confianza” (“Fe, fortaleza y satisfacción: Un mensaje para los padres y madres que crían solos a sus hijos”, Liahona, mayo de 2012, pág. 39).

Las siguientes son emociones comunes que ocurren durante las diferentes etapas del emplazamiento militar. Al leer, considere las ideas que tenga para lidiar con estas emociones. Recuerde que sobrellevar las emociones no significa suprimirlas; a menudo significa confiar en una red de apoyo establecida. Usted puede empezar a crear esta red al comunicarse con otras personas que hayan pasado o que estén experimentando situaciones parecidas en su vida. Es importante comprender que atravesar esos ciclos emocionales no es un proceso simple y ordenado. En realidad, es poco probable que alguien atraviese esas emociones en orden y a tiempo. Tanto los adultos como los niños pueden pasar por alto etapas enteras, pero cuando usted reconoce las señales y los comportamientos, eso puede darle pie para iniciar un diálogo amoroso con los miembros de su familia.

Encontrará todo el ciclo emocional del emplazamiento militar al final de este manual.

EL CICLO EMOCIONAL DE UN EMPLAZAMIENTO MILITAR (ECOD, por sus siglas en inglés)

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etapa 1 del ciclo
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etapa 2 del ciclo
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etapa 3 del ciclo

¿Qué puede hacer si necesita apoyo o ayuda durante alguna de esas experiencias?

¿Qué vivencias ha tenido que podrían ser parecidas a esas?

¿Qué aprendió por medio de esas experiencias acerca de acudir a otras personas y a su Salvador para recibir ayuda?

Principio 2: Los niños también experimentan un ciclo de emociones durante los períodos de separación y necesitan de su ayuda para comprenderlo.

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niño triste

Lea las siguientes declaraciones acerca de las emociones que los niños experimentan en esas situaciones y qué puede hacer para ayudarlos:

“Vivimos en una época en la que situaciones difíciles como el divorcio, la muerte, los accidentes, los desastres naturales, los conflictos bélicos y la pérdida del empleo, amenazan el sentimiento de seguridad en el hogar. Sin embargo, los padres pueden hacer muchas cosas para ayudar a los niños a sentir estabilidad, seguridad y protección a pesar de estas influencias perturbadoras” (Shawn Evans, “Cómo ayudar a los niños a sentirse seguros”, Liahona, febrero de 2011, pág. 16).

“Durante los períodos de separación de la familia, los niños pueden tener sentimientos de abandono, pérdida de amor y resentimiento. Los miembros que han partido hacia una zona de operación militar deben comunicarse frecuentemente con cada hijo, no solo con su cónyuge. El mostrar fotografías de la persona que ha partido mientras se comparten mensajes de ella puede ayudar a los niños pequeños a permanecer en comunicación. El hacer actividades con los miembros de otro barrio también puede ser muy útil, en especial si las familias tienen hijos de edades parecidas. Cuanto más amor pueda compartirse con los hijos, mejor afrontarán la separación” (“Supporting Military Families”, LDS.org, pág. 3).

Para ayudar a los niños a sobrellevar un emplazamiento militar y otras situaciones en las que afronten la separación de uno de sus padres, primero debe estar en condiciones de reconocer sus reacciones y comprender cómo ayudarlos a adaptarse.

Para ver los recursos para los niños, consulte SesameStreetForMilitaryFamilies.org.

Las siguientes son conductas o emociones típicas que los niños pueden manifestar durante los momentos de separación. Al leer estas listas, piense en las experiencias que haya tenido con sus propios hijos, y añada otras conductas que haya observado en ellos. Hable con su cónyuge sobre lo que descubra.

EL CICLO EMOCIONAL DE UN EMPLAZAMIENTO MILITAR (para los niños)

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Desde el nacimiento hasta los 6 años
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De 7 a 10 años
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De 11 a 18 años

¿Qué ha hecho, o qué podría hacer, para ayudar a sus hijos durante los períodos de separación?

Si usted es quien debe partir hacia la zona de operación militar, ¿qué puede hacer para permanecer en contacto con sus hijos y ayudarlos a adaptarse a la situación?

La siguiente declaración puede servir como una serie de pautas para los cónyuges que se quedan en casa:

“Es importante que el padre que está en casa mantenga la estructura y las rutinas de la familia. Una disciplina o supervisión permisivas pueden conducir a modelos o hábitos de comportamiento indeseables. A pesar de los esfuerzos de uno de los padres, a veces los niños y los jóvenes presentan una conducta inusual mientras el otro padre está lejos de casa por extensos períodos de tiempo. Esos problemas de comportamiento pueden manifestarse en maneras tales como ser problemático, abstraerse, desarrollar tics nerviosos, llorar, estar deprimido continuamente o dar la impresión de rechazar el amor y la bondad. El procurar la ayuda de líderes y maestros de los jóvenes puede ser un gran recurso para la familia durante ese momento crítico a fin de prevenir que los jóvenes busquen asociaciones poco saludables fuera del hogar” (“Supporting Military Families”, LDS.org, págs. 3–4).

Cuando se trate de enseñar a sus hijos, necesitará ayuda y apoyo. Haga una lista de personas de su localidad que podrían ayudarle o entablar amistad con sus hijos durante los períodos de separación. Fije la meta de ponerse en contacto con esas personas y comenzar ahora a forjar una relación de dar y recibir.

El élder M. Russell Ballard, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó:

“¿De qué manera traemos… paz a la vida de nuestros hijos, quienes están creciendo en tiempos difíciles y preocupantes?… Los mejores y mas significativos recursos se hallan en el hogar donde padres devotos y fieles, y hermanos y hermanas compasivos, se aman y se enseñan el uno al otro acerca de su naturaleza divina” (“Great Shall Be the Peace of Thy Children”, Ensign, abril de 1994, pág. 60).

La siguiente declaración también podría serle de ayuda a medida que se esfuerza para que sus hijos reciban una medida de paz, ya sea en casa o a la distancia:

“Al obrar con fe en el Padre Celestial y en Su Hijo, usted recibirá bendiciones de consuelo y apoyo. Los hijos recibirán una medida adicional de consuelo y estabilidad a medida que usted y ellos vivan de acuerdo con las palabras de los profetas y continúen las prácticas que traen paz al hogar, tales como la oración personal y familiar, el estudio de las Escrituras y la adoración en el templo” (Shawn Evans, “Cómo ayudar a los niños a sentirse seguros”, Liahona, febrero de 2011, pág. 19).

Mire el video “Caminos equivocados”.

En este video, el élder Jeffrey R. Holland, del Cuórum de los Doce Apóstoles, explica por qué debemos seguir confiando en Dios aun cuando parezca que las cosas no salen bien. ¿De qué manera ha sido bendecido al seguir confiando en Dios?

Decídase a actuar

Lea el artículo del élder M. Russell Ballard, “Great Shall Be the Peace of Thy Children” (Ensign, abril de 1994, págs. 59–61), y señale dos principios que puede implementar, los cuales serán una bendición para usted y su familia.

Al final de la semana

¿Qué aprendió de esa experiencia?

Resumen de los puntos clave de la lección 6

  1. Sus sentimientos durante los períodos de separación son parte de un proceso natural y normal que con el tiempo conduce a emociones más estables.

  2. Existen emociones comunes relacionadas con un emplazamiento militar, pero cada persona reacciona de manera diferente. Algunas personas tal vez experimenten tan solo algunas de las etapas emocionales.

  3. Los niños también atraviesan un ciclo emocional durante los momentos de separación, y sus reacciones varían según la edad.

  4. Desarrollar una red de apoyo en su localidad le ayudará a usted y a sus hijos a sobrellevar el emplazamiento militar.

  5. La paz más grande que usted puede recibir en su hogar llegará mediante el conocimiento del evangelio de Jesucristo.

Notas

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