“Principio 2: Sé humilde, sé honesto y busca la verdad”, Ayuda para personas involucradas en la pornografía, 2019
“Principio 2: Sé humilde, sé honesto y busca la verdad”, Ayuda para personas involucradas en la pornografía
Principio 2: Sé humilde, sé honesto y busca la verdad
Conforme reconozcamos con humildad nuestras debilidades, ejerzamos la fe en Cristo y nos arrepintamos, Él hará que las cosas débiles sean fuertes. Al buscar la verdad, se nos colmará de paz y sabremos que la verdad es lo que nos hace libres.
La humildad
El Salvador declaró: “Doy a los hombres debilidad para que sean humildes; y basta mi gracia a todos los hombres que se humillan ante mí; porque si se humillan ante mí, y tienen fe en mí, entonces haré que las cosas débiles sean fuertes para ellos” (Éter 12:27). Al volvernos a Cristo con humildad, Él puede ayudarnos a vencer nuestros pecados. El orgullo nos conduce a ocultar y engañar, pero la humildad nos conduce a ser francos, enseñables y a estar dispuestos a buscar ayuda.
La sinceridad
Ser sinceros nos ayudará a progresar con éxito en nuestra travesía hacia el cambio. Podemos comenzar por repasar nuestra vida y nuestro progreso. Los esfuerzos que hagamos serán más eficaces a medida que comprendamos también las posibles consecuencias de nuestras acciones, tanto las positivas como las negativas. Aceptar la verdad sobre nuestra vida nos permite aceptar información y puntos de vista que pueden inspirar nuestros esfuerzos por cambiar.
No obstante, si tenemos una idea desacertada de nuestra conducta malsana, nosotros mismos podríamos privarnos de la revelación personal y de la ayuda de otras personas. La negación, la justificación, la minimización, la racionalización, el ocultamiento, el culpar a otros y la mentira son todas formas de engañar, primero a nosotros mismos y luego a los demás.
La sinceridad trae paz y simplifica la vida. Vivir con sinceridad comienza con la determinación de terminar con el ocultamiento, de dejar de llevar una doble vida, engañar a nuestros seres queridos y usar una fachada en la que parecemos estar bien cuando no lo estamos. Reconocer nuestra necesidad de ayuda para vencer la pornografía nos permite obtener esa ayuda de fuentes adecuadas. Al hacer todo lo posible por ser sinceros, podemos empezar a recuperar la confianza de los seres queridos. Además, ser sinceros y humildes nos abre el corazón para buscar la ayuda de nuestro Padre Celestial y del Salvador, y nos prepara para descubrir ideas y seguir los susurros del Espíritu que conducen al arrepentimiento y la sanación.
En el video anterior, el élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, afirma: “Tanto la humildad como la honestidad son cruciales […]. Si van a dejar de ser el hombre natural y hacerse ‘santo[s] por la expiación de Cristo’, es necesario llegar a ser ‘como un niño: sumiso, manso, humilde’ [Mosíah 3:19] […]; la honestidad es igualmente crucial” (“Sé humilde, sé honesto y busca la verdad”, [video]).
Buscar la verdad
La humildad y la sinceridad nos conducen a buscar la verdad y nos ayudan a disipar las tinieblas. A medida que aprendemos de fuentes confiables a vencer el consumo de pornografía, sentimos esperanza y restauramos la paz en nuestra vida; además, podemos quedar libres de las mentiras del adversario.
El estudio de la misión de Jesucristo y Su sacrificio expiatorio puede edificar nuestra confianza y fe en Él. Podemos avanzar por el camino al arrepentimiento gozoso conforme aumenta nuestro amor y comprensión del Salvador. El arrepentimiento es un don que se extiende a todos nosotros a medida que nos humillamos ante Él.
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Ponga en práctica este principio
A continuación se ofrecen algunas ayudas sobre más temas a fin de aumentar su conocimiento y poner en práctica el principio.
“Fue solo un tropiezo. ¿Realmente tengo que decírselo a alguien de nuevo?”
Es importante ser humilde y sincero con los demás. La mayoría de nosotros tropezará mientras procura cambiar sus hábitos y comportamientos. El cambio es un proceso y no sucederá instantáneamente. Ser sinceros sobre las recaídas nos ayuda a seguir progresando; mientras que el secretismo nos conduce a la vergüenza y facilita el regreso a la pornografía.
“¿Por qué sigue ocurriendo esto?”
Sea humilde y sincero consigo mismo. El cambio duradero ocurre cuando somos francos con nosotros mismos y cuando se ablanda el corazón. Conforme reconozcamos nuestras debilidades, el Salvador podrá ayudarnos a superarlas.
Estudio complementario
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David A. Bednar, “Limpios de manos y puros de corazón”, Liahona, noviembre de 2007, págs. 80–83
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Dieter F. Uchtdorf, “No temas, cree solamente”, Liahona, noviembre de 2015, págs. 76–79
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Dieter F. Uchtdorf, “Portadores de luz celestial”, Liahona, noviembre de 2017, págs. 78–81
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Kent F. Richards, “La Expiación sana todo dolor”, Liahona, mayo de 2011, págs. 15–17
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Robert D. Hales, “De la oscuridad a Su luz maravillosa”, Liahona, julio de 2002, págs. 77–80
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Steven E. Snow, “Sé humilde”, Liahona, mayo de 2016, págs. 36–38
Material relacionado
“Principio 1: Encontrar esperanza y fortaleza en el Padre Celestial y Jesucristo”
“Principio 3: Establecer conexiones y relacionarse”