Pornografía
Principio 3: Establecer conexiones y relacionarse


“Principio 3: Establecer conexiones y relacionarse”, Ayuda para personas involucradas en la pornografía, 2019

“Principio 3: Principio 3: Establecer conexiones y relacionarse”, Ayuda para personas involucradas en la pornografía

Imagen
un matrimonio se abraza y ríe

Principio 3: Establecer conexiones y relacionarse

El Salvador enseñó que los mayores mandamientos son “Amarás […] al Señor tu Dios” y “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (Marcos 12:30–31). Vivir dichos mandamientos nos ayuda a edificar y recuperar las relaciones de confianza, y aumenta nuestra capacidad de hallar la sanación.

Edificar y reconstruir relaciones sanas es una ardua labor, independientemente de las circunstancias. Al procurar progresar en relaciones que hayan sido dañadas por el consumo de pornografía, tal vez experimentemos sentimientos de soledad y desesperación.

Nuestra conducta ha causado dolor a los que amamos; conforme vemos tal dolor, podemos afianzar nuestra determinación de cambiar. Cuando reconocemos el dolor que hemos ocasionado, significa que tenemos el Santo Espíritu con nosotros y que Él está tratando de guiarnos para que nos apartemos de las conductas negativas. Al mismo tiempo, Satanás intenta desalentarnos y quiere que creamos que no hay esperanzas de reparación; desea que estemos solos y que nos separemos de quienes amamos.

Podemos comenzar a sentirnos unidos en amor cristiano al cultivar una relación con el Señor. Tal como el élder Ronald A. Rasband, del Cuórum de los Doce Apóstoles, ha dicho:

“Uno nunca puede escapar de la necesidad de tener una relación personal con el Salvador. Cuanto más hagan, más profundo se volverá su amor por nuestro Salvador. Cuanto más lo amen, más desearán seguirlo” (“Establecer conexiones y relacionarse” [video]).

El Espíritu Santo nos ayudará en ese proceso de cultivar una relación con Jesucristo. Invitar al Espíritu Santo a nuestra vida nos acerca más al Salvador; el Espíritu también nos ayuda a reconstruir otras relaciones de nuestra vida.

Mediante la guía del Espíritu, se nos dirigirá apaciblemente en cuanto a la manera de reedificar las relaciones que pudieran haber resultado dañadas por nuestras decisiones. Reconstruir las relaciones requiere tiempo, hacer el esfuerzo por restituir y paciencia. Al procurar reparar y reconstruir las relaciones con el Señor y con nuestros seres queridos, podemos empezar a sentirnos vinculados con los demás de nuevo.

Anote las impresiones que reciba

Dedique un momento a escribir lo que haya sentido al estudiar este principio.

Ponga en práctica este principio

A continuación se ofrecen algunas ayudas sobre más temas a fin de aumentar su conocimiento y poner en práctica el principio.

¿Puedo hacer esto yo solo?

Sincerarse por primera vez puede resultar difícil; el consumo de pornografía prolifera en el secretismo y el aislamiento. Al ser sinceros, derribamos la fachada y eliminamos el secretismo que con frecuencia nos mantiene atrapados.

¿Dónde puedo buscar ayuda?

Determine lo que podría ayudarle y procure la ayuda que necesita. El deseo de cambiar debe provenir del interior; ninguna otra persona puede tomar esa decisión por nosotros. Sin embargo, si hemos estado esforzándonos por vencer nuestras conductas por un tiempo y hemos tenido dificultades para lograr el éxito, quizá resulte beneficioso considerar otros métodos.

Estudio complementario

Material relacionado

Imagen
persona leyendo las Escrituras

Principio 2: Sé humilde, sé honesto y busca la verdad

Imagen
una agenda abierta

Principio 4: Trazar y adaptar planes

Imagen
padre, madre y dos hijos

Reseña para las personas involucradas en la pornografía

Imprimir