Manuales y llamamientos
7: Vencer la oposición


7

Vencer la oposición

Comiencen con una oración.

Informar:

Empecemos por presentarnos al grupo y compartamos las experiencias que tuvimos al cumplir con los compromisos de la semana pasada. Cuando se presente, tenga a bien compartir lo siguiente:

  • Su nombre

  • Su misión

  • Cuánto hace que terminó la misión

  • Una reflexión o una pregunta que tuvo al cumplir con los compromisos de la semana pasada

Las bendiciones del Señor

Leer:

El presidente Thomas S. Monson enseñó lo siguiente:

“Ninguno de nosotros pasa por esta vida sin problemas ni desafíos, y a veces tragedias e infortunios… Aunque las nubes se arremolinen, aunque las lluvias desciendan sobre nosotros, nuestro conocimiento del Evangelio y el amor que tenemos por el Padre Celestial y nuestro Salvador nos consolarán y nos sostendrán, y darán gozo a nuestro corazón al caminar con rectitud y guardar los mandamientos. No hay nada en este mundo que pueda derrotarnos. Mis queridos hermanos y hermanas, no teman. Sean de buen ánimo. El futuro es tan brillante como su fe” (“Sed de buen ánimo”, Liahona, mayo de 2009, págs. 89, 92).

El Señor nos ha enseñado que enfrentar la oposición es una parte necesaria de nuestra experiencia terrenal. Las pruebas y la oposición nos brindan la oportunidad de edificar la fe y forjar una personalidad fuerte. Sin pruebas jamás podemos llegar a ser lo que nuestro Padre Celestial necesita que seamos.

Hermana Bonnie D. Parkin

“Las misericordias y las bendiciones vienen de diferentes maneras, a veces como cosas difíciles. Sin embargo, el Señor dice: ‘Darás las gracias al Señor tu Dios en todas las cosas’ (D. y C. 59:7). Todas las cosas significa precisamente eso: las cosas buenas y las cosas difíciles, no sólo algunas cosas. Él nos ha mandado que seamos agradecidos porque sabe que el serlo nos hará felices, lo cual es otra evidencia de Su amor”.

Bonnie D. Parkin, “Gratitud: Un sendero hacia la felicidad”, Liahona, mayo de 2007, pág. 35.

Ver:

“Soy mormón, atleta, amputado y me hice una prótesis”. (¿No tiene el video? Lea el guion a continuación).

2:3

Jarem Frye: “Se me descubrió cáncer de hueso [en la rodilla]. Todo fue rápido. Me llevaron al hospital, me hicieron pruebas. No sabía qué pasaría… Me dieron tres opciones: una rodilla artificial, un reemplazo de hueso o una amputación. Lo evalué y escogí la amputación.

“Recibí una llamada telefónica. Llevaba un solo días desde que había vuelto del hospital. Era de mi mejor amigo. Contesté y me preguntó si iría al baile. Le dije: ‘Acabo de perder mi pierna’. Él me contestó: ‘Ah, cierto. Lo olvidé. ¿Vas a venir?’. Desde entonces, me levanté y dije: ‘Voy a vivir la vida. No voy a parar’. Me dijeron que no podría andar en bicicleta en la montaña. Que no podría escalar ni hacer lo que quisiera. Pero he hecho todo eso; no me di por vencido. Nunca acepté que no podría hacer algo.

“Que te digan que en cualquier momento puedes morir y de ver que los amigos del hospital ya no están, porque fallecieron, el ver que la vida es realmente frágil puede ser duro para un niño. Pero me enseñó algo que no nunca olvidaré: cuando hay dificultades y piensas que no hay respuestas lógicas, yo tengo la respuesta que se ha comprobado por la experiencia: todo va a estar bien. Dios me ama y desea lo mejor para todos nosotros. Si solo confiamos en Él, todo estará bien. Estaremos bien”.

Analizar:

¿Qué función tienen las pruebas y la oposición en el plan del Padre Celestial? ¿Cómo puede prepararse para enfrentar los retos y las pruebas que le impiden lograr sus metas y planes?

Leer:

A veces, cuando suplicamos alivio de las dificultades físicas, mentales emocionales o espirituales, quizás Él aumente nuestra resolución y capacidad para perseverar (véase Mosíah 24:14–15). Por un tiempo, tal vez permita que padezcamos aun siendo inocentes, como Job, a fin de convertirnos en oro (véase Job 23:10). Tal vez las bendiciones que recibamos de las ventanas de los cielos sean más capaces de cambiar nuestras circunstancias en lugar de esperar que alguien o algo las cambie (véase Malaquías 3:10).

Meditar:

Actividad: (5 minutos)

Formen grupos de tres y analicen la pregunta siguiente: ¿Qué bendiciones han recibido por medio de sus pruebas y dificultades?

Oposición del adversario

Ver:

“No perdáis, pues, vuestra confianza”. (¿No tiene el video? Lea el guion a continuación).

3:51

Élder Jeffrey R. Holland: “Recordarán ustedes que el libro de Moisés comienza cuando él es llevado a ‘una montaña extremadamente alta’ donde, dice la Escritura, ‘vio a Dios cara a cara, y habló con él, y la gloria de Dios cubrió a Moisés’…

“Esta experiencia es notable en todos los aspectos; es una de las grandes revelaciones dadas en la historia de la humanidad y es uno de los registros más gloriosos que tenemos de la experiencia de cualquier profeta con la Divinidad.

“Pero el mensaje de Moisés para nosotros en la actualidad es: no bajen la guardia; no piensen que una gran revelación, un momento maravilloso e iluminador, el descubrir un sendero inspirado, sea el fin de todo. Recuerden: el partido no ha terminado hasta que no suena el silbato final. Lo que a continuación le acontece a Moisés tras ese momento tan espiritual sería algo absurdo de no ser tan peligroso y algo que era de esperarse…

“‘Satanás gritó en alta voz y bramó sobre la tierra, y mandó y dijo: Yo soy el Unigénito, adórame a mí.

“… Moisés empezó a temer grandemente; y al comenzar a temer, vio la amargura del infierno. No obstante, clamando a Dios [la misma frase utilizada por José Smith], recibió fuerza’…

“No podemos enrolarnos en una batalla de significado y de consecuencias tan eternas sin saber que habrá una lucha, una lucha bien dura y en la que resultaremos vencedores, pero una lucha al fin y al cabo…

“En su carta a los hebreos, el apóstol Pablo estaba intentando animar a los nuevos miembros que se acababan de unir a la Iglesia y que, sin duda, habían tenido experiencias espirituales y recibido la luz pura del testimonio para descubrir que sus problemas no solo no habían terminado, sino que más bien algunos de ellos apenas habían empezado…

“Y a continuación sigue este gran consejo, esencia de mi consejo para ustedes…: ‘No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene gran recompensa, porque la paciencia os es necesaria, para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa…’.

“En el argot de los Santos de los Últimos Días equivaldría a decir: ‘Claro que es difícil; lo fue antes de unirse a la Iglesia, mientras estaban en el proceso de unirse y después de haberlo hecho’…

“…No cedan ante la presión… y, sobre todo, no se rindan a ese ser que está laborando concienzudamente para destruir su felicidad … Hagan frente a las dudas; controlen sus temores. ‘No perdáis, pues, vuestra confianza’. Manténganse fieles y admiren la belleza de la vida que se despliega ante ustedes” (véase “No perdáis, pues, vuestra confianza”, Liahona, junio de 2000, págs. 37, 38).

Analizar:

¿Qué ha hecho para mantener el curso durante las dificultades y la oposición?

Leer:

Satanás trabaja constantemente para desviarnos del camino e impedir que llevemos a cabo la obra y el plan del Señor. Él desea engañarlo, confundirlo, distraerlo y disuadirlo. Él quiere justificar el pecado y lo hace apelando a cualquier debilidad de la carne, incluso el orgullo y los deseos de lucro y ambición personales. Él se enfrentará a usted e intentará que se cuestione sus creencias y su identidad como un hijo o una hija de nuestro Padre Celestial. Al esforzarse por hacer y observar compromisos espirituales en su vida, él lo atacará como hizo con Moisés (véase Moisés 1:12–22, Jesucristo (véase Mateo 4:1–11), José Smith (véase José Smith—Historia 1:15) y muchos otros.

Meditar:

Actividad: (5 minutos)

Formen nuevos grupos de tres y analicen la pregunta siguiente: ¿Qué medidas tienen la intención de tomar para protegerse de las mentiras y los ataques de Satanás?

Actividad: (15 minutos)

Lea las doctrinas de la tabla siguiente y medite en ellas.

  1. Lea “Mentiras de Satanás en cuanto a la doctrina” para entender los diversos métodos que usa para atacar o impedir la fe en estas preciadas verdades.

  2. Lea las enseñanzas adicionales que hay en la tercera fila de la tabla acerca de cómo evitar las mentiras de Satanás.

  3. Anote en su diario de estudio otras mentiras que Satanás usa para engañarnos, distraernos y disuadirnos a no abrazar las doctrinas del Señor.

Ejemplo 1

Ejemplo 2

Ejemplo 3

Doctrina

Dios es mi Padre; Él me conoce y me ama.

Cristo tiene poder para llevarme de regreso a mi Padre.

Dado que soy un hijo de Dios, puedo ser bendecido con todos los dones y talentos necesarios para volver a vivir con Él.

Mentiras de Satanás acerca de la doctrina

Dios no contesta mis oraciones.

Es muy difícil conocer la diferencia entre el Espíritu y mis propios pensamientos y emociones.

Necesito hacer esto por mi cuenta.

Así es como soy; no hay necesidad de arrepentirse.

No soy nadie especial y no tengo muchos talentos.

No soy una persona realmente espiritual y no encajo con los miembros de la Iglesia.

El Señor se preocupa más por los hombres que por las mujeres.

Lea enseñanzas sobre cómo evitar las mentiras de Satanás

Moisés 1.

David A. Bednar, “En la fuerza del Señor”, Liahona, noviembre de 2004, págs. 76–78.

Sheri L. Dew, “You Were Born to Lead, You Were Born for Glory”, devocional de la Universidad Brigham Young, 9 de diciembre de 2003, speeches.byu.edu.

Moisés 7.

Analizar:

¿Qué impresiones recibió durante la actividad?

El Salvador y cómo vencer la oposición

Leer:

Del Salvador mismo procede una gran reflexión que hay en las Escrituras acerca de cómo sobrellevar la oposición cuando el Padre le pidió que descendiera debajo de todo. En las Escrituras se enseña que, a medida que se aproximaba a Getsemaní, “comenzó a afligirse” (Marcos 14:33) por el sacrificio que se requería de Él. Finalmente, deseó “no tener que beber la amarga copa y desmayar”. Sin embargo, perseveró, glorificó al Padre y “bebió”, es decir, se sometió, y acabó todo lo que el Padre había requerido de Él (D. y C. 19:18–19).

A fin de cumplir con el plan que el Padre tiene para su vida y desarrollar su gran potencial, necesitará confiar en Jesús, pues Él venció todas las cosas, y así perseverar y lograr todo lo que el Padre requiera de usted.

Desarrolle hábitos que lo fortalezcan y así se preparará para las dificultades que se avecinen.

El Salvador en Getsemaní

Meditar:

Analizar:

¿Qué medida siente que debe tomar para estar más cerca del Salvador y vencer la oposición?

Comprométase:

  • ¿Qué hizo durante la misión para ayudar a otras personas a fortalecer su fe? Cree un plan para protegerse espiritualmente de la oposición que sufra su fe.

  • Comparta lo que haya aprendido hoy con otro misionero retornado, otro joven adulto soltero o un familiar.

Seleccione un compañero de acción para esta semana y dediquen un par de minutos a compartir el uno con el otro los compromisos en los que han sentido que deben trabajar. Decidan cómo van a realizar el seguimiento el uno con el otro durante la semana.

Ofrezcan la última oración.