Capítulo 53 1:58La crucifixión de Jesús Los soldados golpearon a Jesús con látigos. Le pusieron un manto púrpura. Hicieron una corona de espinas y se la pusieron en la cabeza. Se rieron de Él y le escupieron. Dijeron que era el “Rey de los judíos”. Marcos 15:15–20 Mucha gente siguió a los soldados mientras llevaban a Jesús a un cerro cerca de Jerusalén. Lo obligaron a cargar Su propia cruz. Le clavaron las manos y los pies a la cruz, y la levantaron. También crucificaron a otros dos hombres que eran ladrones. Lucas 23:27, 33; Juan 19:17–18 Jesús oró y le pidió al Padre Celestial que perdonara a los soldados que lo habían crucificado porque ellos no sabían que Él era el Salvador. Lucas 23:34 María, la madre de Jesús, estaba de pie cerca de la cruz. El apóstol Juan también estaba allí. Jesús le pidió a Juan que cuidara a la madre de Él, y Juan se llevó a su casa a la madre de Jesús. Juan 19:25–27 La tierra quedó cubierta de oscuridad. El Salvador sufrió en la cruz por muchas horas. Finalmente Su espíritu dejó Su cuerpo, y murió. Mateo 27:45, 50 Cuando murió, hubo un terremoto que rompió grandes rocas en pedazos. Una cortina del templo, llamada velo, se partió en dos. Los soldados romanos sintieron miedo. Mateo 27:51, 54 Uno de los discípulos de Jesús bajó el cuerpo del Salvador de la cruz. Lo envolvió en un lienzo y lo colocó en una tumba, un lugar donde se sepulta a las personas. Rodaron una piedra muy grande enfrente de la tumba para cubrir la entrada. Mateo 27:57–60