2021
3 preguntas y respuestas del élder y de la hermana Rasband sobre la historia de la Iglesia
Julio de 2021


Jóvenes adultos

El élder y la hermana Rasband contestan tres preguntas sobre la historia de la Iglesia

De un evento Cara a Cara con el élder Ronald A. Rasband, del Cuórum de los Doce Apóstoles, y su esposa, la hermana Melanie Rasband, el 13 de septiembre de 2020. Para ver el devocional completo, vaya a FacetoFace.ChurchofJesusChrist.org.

En ocasiones, todos tenemos preguntas, pero, afortunadamente, tenemos amorosos apóstoles que pueden ayudarnos a encontrar las respuestas.

Elder and Sister Rasband

¿Cómo llegaron a saber que José Smith realmente fue llamado por Dios para ser el Profeta de la Restauración del evangelio de Jesucristo?

Élder Rasband: Sabemos que el modo en que ustedes lleguen al conocimiento de su testimonio puede que sea diferente al nuestro. Yo nací en el seno de una familia devota y cuando era joven recibí un testimonio que ha permanecido conmigo hasta el día de hoy.

Me gustaría compartir con ustedes un pasaje de las Escrituras acerca de [la manera de recibir un testimonio del Evangelio restaurado] que se encuentra en la sección 46 de Doctrina y Convenios, donde se habla en cuanto a los dones del Espíritu que se nos podrían conceder.

Vayamos a los versículos 13 y 14, dos versículos en los que se habla acerca del don del testimonio. Versículo 13: “A algunos el Espíritu Santo da a saber que Jesucristo es el Hijo de Dios, y que fue crucificado por los pecados del mundo”. Deseo que sepan que este es el punto en el que nos encontramos mi querida esposa y yo. Nosotros tenemos un testimonio del Señor Jesucristo que arde en nuestro pecho, y sabemos que Él es nuestro Salvador.

En el versículo 14 se sugiere otro don, y hago hincapié en que también se trata de un don: “[A] otros les es dado creer en las palabras de aquellos, para que también tengan vida eterna, si continúan fieles”. Así pues, nuestros jóvenes amigos, todos vamos por una senda diferente con ese testimonio [del Evangelio restaurado]. Algunos tenemos ese testimonio ardiente; otros creen en el testimonio de otras personas, y eso está bien. Ustedes pueden creer en el nuestro, o pueden creer en el de sus amigos, sus padres, sus líderes o sus maestros. Está bien aceptar el testimonio de otras personas. De hecho, es un don poder hacerlo. De modo que, para aquellos de ustedes que están trabajando en sus testimonios, recuerden que este es un trayecto y un proceso.

En la proclamación sobre la Restauración1 leemos: “[E]n calidad de Sus apóstoles invitamos a todos a saber —como nosotros lo sabemos— que los cielos están abiertos”. ¿Qué significa esa invitación para ustedes? Si Dios desea hablar con nosotros, ¿por qué es tan difícil que lo escuchemos?

Hermana Rasband: Bueno, yo creo que la mayoría de las cosas que valen la pena en esta vida no se logran fácilmente, y creo que buscar con humildad y orar para saber cómo escuchamos nosotros al Espíritu Santo es una clave para saber cómo escucharlo a Él. Por lo general, simplemente nos sentimos bien. A veces podríamos ver algo. En ocasiones ciertamente escuchamos palabras, y erróneamente creemos que lo que oímos son nuestros propios pensamientos y sentimientos. Creo que es importante que seamos capaces de saber cómo escuchar al Espíritu Santo por nosotros mismos.

Los invito a cada uno a mirar siempre atentamente hacia el cielo, con un corazón dispuesto y oídos prestos a escucharlo a Él (véase 3 Nefi 11:5).

Élder Rasband: Yo he encontrado la palabra del Señor al leer las Escrituras. Si tengo problemas que me afligen o me preocupan en nuestra familia, en mi trabajo, en mi asignación o en mi llamamiento, busco por temas y encuentro algo que puedo poner en práctica, y luego algo capta mi atención, y es como si el Señor me estuviese dando instrucciones muy específicas por medio de Su santa palabra en las Escrituras.

Esto puede suceder de multitud de maneras. Cada uno de ustedes tendrá su propia manera. El Padre Celestial los conoce. Él los ama. Ustedes son Sus hijos e hijas, y Él les responderá de maneras que les resulten familiares y sean las correctas para ustedes.

¿Cuál es su parte favorita de la Restauración o de la Primera Visión? ¿Cuáles son las verdades que atesoran como fruto de ese acontecimiento?

Hermana Rasband: Para mí es sencillo. Cuando Dios el Padre se dirigió a José Smith y lo llamó por su nombre, diciendo: “José, este es mi Hijo Amado. ¡Escúchalo!”, mi testimonio de que Dios el Padre y el Hijo nos conocen a todos y cada uno de nosotros simplemente aumentó. Ellos nos aman. Y si escuchamos al Hijo, descubriremos las vías [del Padre] y se nos enseñará cómo obtener la vida eterna.

Élder Rasband: El aspecto de la Restauración que atesoro es que José Smith era un joven de catorce años cuando fue a una arboleda como consecuencia de lo que había leído en las Escrituras, a fin de preguntar a su Padre Celestial en humilde oración. José Smith realmente fue un ejemplo para nosotros en ese sentido: él tenía una pregunta que le había estado preocupando durante mucho tiempo, y llevó su pregunta al Padre Celestial esperando recibir una respuesta, y así fue.

Nota

  1. Véase “La Restauración de la plenitud del evangelio de Jesucristo: Una proclamación para el mundo en el bicentenario”, LaIglesiadeJesucristo.org.