“Una conversación con Eilish sobre el Espíritu Santo”, El Amigo, enero de 2024, págs. 40–41.
Una conversación con Eilish sobre el Espíritu Santo
Eilish es una niña de 12 años de la Región Este de Singapur. Le preguntamos de qué manera la ayuda el Espíritu Santo.
Cuéntanos de ti.
Me gusta mucho leer y jugar vóleibol, y mi materia favorita en la escuela es Matemáticas. Mi comida favorita es la lasaña y mi color favorito es el rojo. Cuando sea mayor, espero ser abogada y trabajar en un tribunal.
¿Cómo sientes el Espíritu Santo?
Siento el Espíritu Santo como si tuviera un amigo cercano conmigo. Siento que Él es alguien con quien puedo contar cuando guardo los mandamientos y mis convenios con el Padre Celestial. Pienso en Él como mi guía y compañero. Él me puede ayudar a tomar buenas decisiones.
¿Qué consejo le darías a alguien que no está seguro de haber sentido el Espíritu Santo?
A veces tampoco tengo la certeza de estar sintiendo el Espíritu Santo, pero si realmente piensas en ello, lees las Escrituras y oras, y te sientes bien al respecto, ese es el Espíritu Santo. A veces escuchar al Espíritu Santo no es solo un sentimiento. También puede ser un pensamiento o una idea. Si aún te sientes confundido, siempre puedes orar y pedir ayuda al Señor otra vez.
¿En qué ocasión has sentido el Espíritu Santo?
El año pasado, jugué en un torneo de vóleibol. Como la mayoría de mis compañeras de equipo, estaba nerviosa. Cuando comencé a jugar, nuestro equipo ya había perdido los dos primeros juegos. Estábamos desanimadas. Luego, las personas que estaban viendo el partido dijeron algunas palabras poco amables y nos sentimos aún peor. Y perdimos.
Cuando mi madre me preguntó cómo me había ido, comencé a llorar. Yo estaba muy desilusionada. Fui a mi habitación, que era agradable y tranquila, e hice una oración. Después de orar, sentí más calma y paz en el corazón. Sabía que el Espíritu Santo me había consolado y que Él siempre me ayudaría. Sé que Él estará conmigo cuando juegue en otro torneo que tendrá lugar este año.
¿De qué otra manera te ha ayudado el Espíritu Santo?
El Espíritu Santo también me ayudó cuando pasé de la Primaria a las Mujeres Jóvenes. Estaba entusiasmada por pasar a las Mujeres Jóvenes, pero me sentía muy nerviosa al mismo tiempo. También estaba un poco triste de dejar la Primaria.
Antes de mi primera clase, hice una oración y le pedí al Padre Celestial que me ayudara a disfrutar las Mujeres Jóvenes. Sentí paz en el corazón al entrar en mi nuevo salón de clases. Estaba lista para aprender. ¡Me ayudó a recordar que el Espíritu Santo siempre estará cerca de mí!
Ilustraciones por Annabel Tempest