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La parábola del noble: Una lección de obediencia
Doctrina y Convenios 101:43–62 presenta una parábola que se dio para explicar por qué los santos habían sido expulsados de Misuri.
En la parábola, los siervos comienzan a edificar una torre, pero luego deciden que “no hay necesidad” de ello (Doctrina y Convenios 101:49). Al no edificar la torre, no ven las señales de peligro cuando un enemigo irrumpe y destruye la viña.
¿Cuestiono a veces los mandamientos de Dios?
¿Se han preguntado alguna vez, al igual que los siervos, si un mandamiento es realmente necesario? Esta parábola nos enseña que los mandamientos del Señor nos protegen y nos ayudan a vivir una vida feliz (véanse también Mosíah 2:41; Doctrina y Convenios 82:8–10).
¿Qué podemos hacer cuando no vemos la necesidad de algún mandamiento?
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Estudiar el tema y orar para que el Señor nos ayude a “senti[r] que está bien” (Doctrina y Convenios 9:8).
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Recordar ocasiones del pasado en las que la obediencia trajo bendiciones1.
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Actuar con fe, confiando en que entenderemos “después de la prueba de [n]uestra fe” (Éter 12:6).