Escuela Dominical: Doctrina del Evangelio
‘Jamás ha creído en mí el hombre como tú lo has hecho’


Lección 45

“Jamás ha creído en mí el hombre como tú lo has hecho”

Éter 1–6

Objetivo

Ayudar a los miembros de la clase a comprender, basándonos en el ejemplo del hermano de Jared, la forma en que la fe nos puede habilitar para entrar en la presencia del Señor eternamente.

Preparación

  1. Lea los pasajes de las Escrituras que se mencionan a continuación y medite y ore al respecto:

    1. Éter 1. El Señor concede las peticiones del hermano de Jared y promete dirigir a los jareditas a una tierra prometida.

    2. Éter 2. Los jareditas inician su viaje a la tierra prometida.

    3. Éter 3. El hermano de Jared ve a Jesucristo.

    4. Éter 4. Moroni sella los escritos del hermano de Jared hasta el tiempo en que los gentiles se arrepientan y ejerzan la fe.

    5. Éter 6:1–12. Los jareditas viajan a la tierra prometida, y cuando llegan alaban al Señor por Sus tiernas misericordias sobre ellos.

  2. Lectura complementaria: Génesis 11:1–9; Mosíah 8:7–11.

  3. Si está disponible la lámina El hermano de Jared ve el dedo del Señor (62478; Las bellas artes del Evangelio, 318), prepárese para usarla durante la lección.

Sugerencias para el desarrollo de la lección

Actividad para despertar interés

Si lo desea, utilice la siguiente actividad, o una de su preferencia, para comenzar la lección. Escoja la actividad que sea más apropiada para su clase.

Relate la siguiente historia a los miembros de la clase:

“Mientras vivían en Kirtland, el élder Reynolds Cahoon y su esposa tuvieron un hijo. Un día, cuando el presidente José Smith pasaba junto a su puerta, el hermano Cahoon llamó al Profeta, le pidió que entrara y bendijera a su hijo y le diera el nombre. José hizo lo que se le había pedido y le dio al niño el nombre de Mahonri Moriáncumer. Después de bendecir al infante, lo acostó en su cuna y, volviéndose al élder Cahoon, le dijo: ‘El nombre que le he dado a tu hijo es el nombre del hermano de Jared; el Señor me lo acaba de revelar’ ” (George Reynolds, “The Jaredites”, Juvenile Instructor, 1º de mayo de 1892, pág. 282; citado en El Libro de Mormón, Doctrina del Evangelio, Suplemento para el maestro [PCSS56M6SP], pág. 165). El élder Cahoon… escuchó al Profeta hacer esta declaración a su padre, y esa fue la primera vez que se conoció el nombre del hermano de Jared en la Iglesia en esta dispensación” (George Reynolds, “The Jaredites”, Juvenile Instructor, 1º de mayo de 1892, pág. 282).

Explique que en esta lección se habla del hermano de Jared, Mahonri Moriáncumer, de quien el Señor dijo: “…jamás ha creído en mí el hombre como tú lo has hecho” (Éter 3:15). Debido a la fe del hermano de Jared, los jareditas fueron bendecidos para que su lenguaje fuera preservado después de lo que ocurrió en la torre de Babel, y fueron guiados a salvo a la tierra prometida. Su ejemplo puede aumentar nuestra comprensión de la importancia y del poder de la fe.

Análisis y aplicación de las Escrituras

Con la ayuda de la oración, seleccione los pasajes de las Escrituras, las preguntas y otros materiales de la lección que mejor satisfagan las necesidades de los miembros de la clase. Analicen la forma en que los pasajes seleccionados se aplican al diario vivir. Anime a los miembros de la clase a compartir experiencias que hayan tenido que se relacionen con los principios que se encuentran en las Escrituras.

1. El Señor concede las peticiones del hermano de Jared.

Analicen Éter 1. Pida a los miembros de la clase que lean en voz alta los versículos que usted haya seleccionado. Explique que el profeta Éter escribió el registro de los jareditas, quienes salieron de Babilonia cuando el Señor confundió el lenguaje de los que intentaban edificar la torre de Babel (Éter 1:33–43; véase también Génesis 11:1–9). Éter escribió el registro en veinticuatro planchas de oro, las cuales después encontró el pueblo de Limhi (Mosíah 8:7–11). El libro de Éter contiene el compendio que Moroni hizo del registro de Éter .

• Cuando el pueblo fue esparcido y su lenguaje confundido, Jared pidió a su hermano que acudiera al Señor. ¿Qué clase de persona era el hermano de Jared? (Véase Éter 1:34.)

• Como respuesta a las peticiones de Jared, su hermano “suplicó al Señor” (Éter 1:34–39). ¿Cuál es la diferencia que existe entre “suplicar al Señor” y simplemente hacer nuestras oraciones? ¿Qué podemos hacer para que nuestras oraciones sean más eficaces? (Véase Alma 34:17–28.)

• Cada vez que el hermano de Jared oró, el Señor “se compadeció” de él y de su pueblo (Éter 1:35, 37, 40). ¿En qué forma han sentido la compasión del Señor en respuesta a sus oraciones?

• ¿Qué preparativos debía hacer el pueblo por instrucción del Señor? (Véase Éter 1:41–42.) ¿Por qué razón prometió el Señor que guiaría a los jareditas a una tierra prometida? (Véase Éter 1:43. Nótense las palabras del Señor: “Me has suplicado todo este largo tiempo”.) ¿Qué podemos aprender de ese ejemplo acerca del poder de la oración?

2. Los jareditas inician su viaje a la tierra prometida.

Lean y analicen los versículos de Éter 2 que usted haya seleccionado.

• El Señor prometió guiar a los jareditas a “la tierra de promisión, que era una tierra escogida sobre todas las demás” (Éter 2:7). ¿Para quiénes había preservado el Señor esa tierra escogida? (Véase Éter 2:7.) ¿Qué advertencia hizo el Señor al hermano de Jared con respecto a la tierra de promisión? (Véase Éter 2:8.)

• ¿Qué dijo Moroni acerca de los decretos de Dios relacionados con la tierra de promisión? (Véase Éter 2:9–12. Indique que la advertencia y la promesa se aplicaban a todos los que habitaran las Américas, no sólo a los jareditas.)

• Cuando llegaron al mar, los jareditas plantaron sus tiendas y permanecieron allí cuatro años (Éter 2:13). Al finalizar ese lapso de tiempo, el Señor habló con el hermano de Jared. ¿Por qué lo reprendió? (Véase Éter 2:14.) ¿Por qué a veces no invocamos al Señor?

• El hermano de Jared se arrepintió y comenzó a construir las embarcaciones para cruzar el mar (Éter 2:15–17). ¿Qué problemas enfrentó el hermano de Jared después de construir las embarcaciones? (Véase Éter 2:19.) ¿Qué instrucciones dio el Señor al hermano de Jared para que en las embarcaciones hubiera aire para respirar? (Véase Éter 2:20.)

• ¿Qué respondió el Señor cuando el hermano de Jared le preguntó cómo habría de alumbrar las embarcaciones? (Véase Éter 2:23–25.) ¿Qué podemos aprender de lo que respondió el Señor? (Véase la cita que figura a continuación.) ¿Por qué es importante que hagamos todo lo que esté de nuestra parte además de pedir la ayuda del Señor?

El élder Russell M. Nelson dijo que con frecuencia ha escuchado al presidente Gordon B. Hinckley decir: “No me imagino cómo llevar algo a buen término sin antes arrodillarme y suplicar ayuda, y entonces levantarme y poner manos a la obra” (“Capacidad espiritual”, Liahona, enero de 1998, pág. 18).

• El desafío que enfrentó el hermano de Jared de encontrar la manera de alumbrar las embarcaciones, ¿cómo le ayudó a crecer? ¿Cómo pueden ayudarnos los desafíos que enfrentemos en la vida?

2. El hermano de Jared ve a Jesucristo.

Lean y analicen los versículos de Éter 3 que usted haya seleccionado.

• ¿Cómo propuso el hermano de Jared resolver el problema de alumbrar las embarcaciones? (Véase Éter 3:1–5.) ¿En qué forma demostró esto su humildad y su fe? (Si lo desea, pida a los miembros de la clase que indiquen las palabras o frases que pronunció el hermano de Jared, las cuales demuestren su humildad y su fe.)

• Cuando el hermano de Jared terminó de hablar, el Señor tocó las piedras una por una con Su dedo (Éter 3:6). ¿Por qué sintió tanto temor el hermano de Jared cuando vio el dedo del Señor? (Véase Éter 3:6–8. Si va a usar la lámina El hermano de Jared ve el dedo del Señor, muéstrela ahora.) ¿Qué dijo el Señor acerca de la fe del hermano de Jared? (Véase Éter 3:9.)

• ¿Qué le preguntó el Señor al hermano de Jared antes de mostrarse a él? (Véase Éter 3:11.) ¿En qué forma la respuesta que dio el hermano de Jared demostró la profundidad de su fe? (Véase Éter 3:12. Aceptó las palabras del Señor aun antes de escucharlas.) ¿Qué podemos hacer para seguir su ejemplo?

• ¿Qué descripción de sí mismo le dio el Señor al hermano de Jared? (Véase Éter 3:13–14. Si lo desea, pida a un miembro de la clase que lea estos versículos en voz alta.) ¿Qué se precisaba para que el hermano de Jared estuviera en la presencia del Señor? ¿Qué se precisa para que nosotros estemos en la presencia del Señor eternamente?

• ¿Qué le mostró el Señor al hermano de Jared? (Véase Éter 3:15–18, 25–26.) ¿Qué le indicó el Señor al hermano de Jared acerca de lo que debía hacer después de ver estas cosas? (Véase Éter 3:21–24, 27–28; 4:1.)

4. Moroni sella los escritos del hermano de Jared.

Lean y analicen los versículos de Éter 4 que usted haya seleccionado.

• ¿Cómo describió Moroni la visión del hermano de Jared? (Véase Éter 4:4.) ¿Qué le mandó el Señor a Moroni que hiciera con el registro del hermano de Jared y los intérpretes? (Véase Éter 4:3, 5.) ¿Cuándo podremos recibir esos registros? (Véase Éter 4:6–7. Los podremos recibir cuando nuestra fe sea tan grande como la del hermano de Jared y nos santifiquemos.)

• ¿Qué enseñó el Señor acerca de los que nieguen Sus palabras en el postrer día? (Véase Éter 4:8, 10, 12.) ¿Qué bendiciones recibirán los que crean las palabras del Señor? (Véase Éter 4:11.) ¿Cuáles son las formas en que el Espíritu Santo les ayuda a ustedes a saber que las palabras del Señor son verdaderas?

• El Señor exhortó a los gentiles y a la casa de Israel a venir a él y a recibir grandes bendiciones y conocimiento (Éter 4:13–14). ¿Qué dijo que debemos hacer para venir a él? (Véase Éter 4:15, 18.) ¿Qué bendiciones prometió a los que hagan estas cosas? (Véase Éter 4:15–19.)

5. Los jareditas viajan a la tierra prometida.

Lean y analicen los versículos de Éter 6:1–12 que usted haya seleccionado. Explique que estos versículos son la continuación del registro de los jareditas en el transcurso de su viaje a la tierra prometida. Analicen la forma en que la jornada de los jareditas a la tierra prometida se puede asemejar a nuestra propia jornada por la vida.

• El Señor hizo que las piedras en las embarcaciones “brillaran en las tinieblas para dar luz a los hombres, mujeres y niños” (Éter 6:3). ¿Qué “luces” nos ha proporcionado el Señor para nuestra jornada por la vida?

• ¿Qué hicieron los jareditas después de haber preparado todo lo que les fue posible para su jornada? (Véase Éter 6:4. Se encomendaron al Señor.) ¿De qué manera podemos demostrar esa misma confianza en el Señor?

• Al soplar los vientos y al avanzar los jareditas, ¿qué hicieron ellos durante todo el día y toda la noche? (Véase Éter 6:8–9.) ¿Cuáles son algunas de las formas en que podemos alabar al Señor?

• ¿Qué hicieron los jareditas cuando llegaron a la tierra prometida? (Véase Éter 6:12.) ¿En qué forma se podría asemejar lo que ellos hicieron a nuestro regreso al Padre Celestial?

Conclusión

Lean la siguiente declaración del élder Jeffrey R. Holland:

“El hermano de Jared tal vez no haya creído mucho en sí mismo, pero su creencia en Dios no tenía precedente. En ello yace la esperanza para todos nosotros. En su fe no había duda ni límites… De una vez por todas se declaró que las personas comunes y corrientes que tuvieran desafíos comunes podrían desgarrar el velo de la incredulidad y entrar en el ámbito de la eternidad” (Christ and the New Covenant, 1997, pág. 29).

De acuerdo con la inspiración del Espíritu, testifique de las verdades que se analizaron durante la lección.

Sugerencia adicional para la enseñanza

El siguiente material complementa las sugerencias para el desarrollo de la lección. Si lo desea, utilice este concepto como parte de la lección.

Enseñanzas de Éter 5.

• ¿A quién está dirigido el capítulo 5 de Éter ? (A José Smith.) ¿Quiénes fueron los tres testigos de los que habló Moroni en Éter 5:3? (Oliver Cowdery, David Whitmer y Martin Harris. Véase El testimonio de tres testigos en las páginas preliminares del Libro de Mormón.) ¿De qué manera ha servido el testimonio de los tres testigos para fortalecer el testimonio que tienen ustedes del Libro de Mormón?