“Introducción: Antes de Doctrina y Convenios,” Relatos de Doctrina y Convenios (2002), 1–5 “Introducción,” Relatos de Doctrina y Convenios, 1–5 Introducción Antes de Doctrina y Convenios Antes de venir a la tierra, vivíamos con nuestro Padre Celestial. No teníamos cuerpos de carne y huesos como los tenemos ahora; éramos espíritus. Nuestro Padre Celestial creó un plan para que recibiéramos un cuerpo y llegáramos a ser más como Él. A eso se le llama el plan de salvación. Ese plan requería que dejáramos a nuestro Padre Celestial por un tiempo y que viniéramos a la tierra. Si seguimos el plan, regresaremos a vivir con Él. Jesús vivía con nosotros en el cielo y deseaba seguir el plan de nuestro Padre Celestial. Jesús dijo que vendría a la tierra para hacer posible que regresáramos al cielo. Satanás también vivía con nosotros en el cielo. Él no siguió el plan de nuestro Padre Celestial, así que nuestro Padre Celestial mandó que se fuera. Satanás quiere destruir el plan de salvación. Jesús hizo la tierra para que los hijos de nuestro Padre Celestial vivieran en ella. Jesús envió profetas para enseñar a la gente a ser buena. Algunas personas obedecieron a los profetas, pero otras obedecieron a Satanás y se volvieron malas. El Antiguo Testamento habla de las personas que vivieron antes de que Jesús naciera. Los profetas enseñaron a esas personas que Jesús vendría a la tierra para que pudieran ser limpios del pecado y que vencieran la muerte. El Libro de Mormón habla de otras personas que vivieron hace mucho tiempo. Esas personas viajaron de Jerusalén al continente americano. Los profetas también les enseñaron a esas personas sobre Jesús, y Él los visitó después de que resucitó. El Nuevo Testamento habla acerca de la vida de Jesús en la tierra. Habla de Su nacimiento, de Sus enseñanzas, de Su muerte y Su resurrección. Jesús enseñó a las personas Su evangelio y les enseñó a obedecer los mandamientos de nuestro Padre Celestial. Jesús escogió a doce hombres para que fueran apóstoles y les dio el sacerdocio. Él comenzó Su Iglesia. Muchas personas amaban a Jesús y eran buenas y obedientes a Sus enseñanzas. Satanás no quería que las personas siguieran a Jesús, así que las tentaba para que odiaran a Jesús, y algunas de ellas lo clavaron a una cruz y lo mataron. Tres días después de que Jesús murió, resucitó. ¡Estaba vivo otra vez! Habló con Sus apóstoles y les dijo que enseñaran el Evangelio a todas las personas. Jesús también visitó a la gente buena en el continente americano y más tarde regresó a los cielos para estar con Su Padre. Los apóstoles eran los líderes de la Iglesia de Jesucristo y viajaron a muchas tierras y enseñaron a las personas en cuanto a Jesús. Muchos creyeron en Él y fueron bautizados. Los apóstoles dieron el sacerdocio a los hombres que eran buenos y había muchos miembros de la Iglesia. Satanás quería destruir la Iglesia y tentó a las personas para que dejaran de creer en Jesús. A los apóstoles y a muchos otros miembros de la Iglesia los mataron; al poco tiempo ya no había líderes que dirigieran la Iglesia y nuestro Padre Celestial quitó el sacerdocio de la tierra. La Iglesia que Jesús comenzó ya no existía y algunas personas hicieron sus propias iglesias. Cambiaron muchas de las enseñanzas de Jesús y también algunos de los mandamientos. Pasaron cientos de años y llegó a haber muchas iglesias sobre la tierra, pero ninguna de ellas era la verdadera Iglesia de Jesucristo. Los miembros de estas iglesias creían en Jesús, pero las iglesias no tenían el verdadero Evangelio, ni la autoridad del sacerdocio, ni profetas, ni apóstoles. Jesús había dicho que vendría otra vez a la tierra, pero primero tenía que ser restaurada Su Iglesia y el sacerdocio. Estas bendiciones fueron restauradas por medio del profeta José Smith. Nuestro Padre Celestial ha llamado otra vez a profetas y apóstoles para que dirijan la Iglesia en este tiempo, y Jesús les da revelaciones para decirnos lo que Él quiere que sepamos y hagamos. Doctrina y Convenios es un libro de las revelaciones que dio Jesús. La mayoría de ellas las recibió el profeta José Smith y, en ellas, Jesús da instrucciones a Su Iglesia y enseña las doctrinas de Su evangelio. Este libro que estás leyendo habla sobre algunas de las revelaciones de Doctrina y Convenios y sobre algunos de los relatos en cuanto a la restauración y a la historia inicial de la Iglesia de Jesucristo en estos últimos días.