Lección 38
La paz reinaba entre los nefitas
Objetivo
Que los niños se sientan motivados a buscar la paz y la felicidad que se obtienen al vivir el Evangelio de Jesucristo.
Preparación
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Estudie, con la ayuda de la oración, 3 Nefi 28:1–16, 23–40 y 4 Nefi. Después, estudie la lección y decida qué método empleará para enseñar a los niños el relato de las Escrituras. (Véase “Cómo preparar las lecciones”, pág. VII, y “La enseñanza por medio de las Escrituras”, pág. VIII.)
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Elija las preguntas para analizar y las actividades complementarias que promuevan la participación de los niños y que mejor los ayuden a alcanzar el objetivo de la lección.
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Materiales necesarios: Un ejemplar del Libro de Mormón para cada niño.
Sugerencias para el desarrollo de la lección
Pida a uno de los niños que ofrezca la primera oración.
Actividad para despertar la atención
Pida a los niños que se imaginen cómo sería si el Salvador viviera con su familia por una semana y cómo sería el ambiente en su hogar durante ese tiempo. Indique a uno de los niños que lea 4 Nefi 1:15–16. Explíqueles que esos versículos describen cómo las personas en América se comportaban unas con otras después de la visita de Jesucristo. Asista a los niños a analizar cómo sería vivir bajo esas condiciones.
• ¿En qué forma sería diferente nuestra vida si todos obedecieran los mandamientos? (No habría necesidad de cerraduras, ni de llaves, ni de policía, etc.) Ayúdelos a comprender que una de las claves más importantes para la felicidad es la forma de comportarse con los demás. Al vivir las enseñanzas de Jesucristo, trataremos con más bondad y menos egoísmo a nuestros familiares y amigos, y de esa forma lograremos mayor paz y felicidad.
Relato de las Escrituras
Enseñe a los niños el relato registrado en 3 Nefi 28:1–16, 23–40 y 4 Nefi acerca de los discípulos nefitas y de la paz y felicidad que el pueblo encontró al guardar los mandamientos. (Para sugerencias de cómo enseñar el relato de las Escrituras, véase “La enseñanza por medio de las Escrituras”, pág. VIII.)
Preguntas para analizar y aplicar
Al preparar la lección, estudie las preguntas y los pasajes de las Escrituras que se encuentran a continuación. Después, utilice las preguntas que usted considere que mejor ayudarán a los niños a comprender las Escrituras y a aplicar los principios a su vida. El leer los pasajes en clase con los niños hará que éstos entiendan mejor las Escrituras.
• ¿Qué deseaban los discípulos de Jesús que Él les concediera? (3 Nefi 28:2, 4–7.) ¿Por qué se permitió a tres de los discípulos permanecer en la tierra hasta el final? (3 Nefi 28:6, 9.) ¿Qué cambios se efectuaron en sus cuerpos para que eso fuera posible? (3 Nefi 28:38–39.)
• ¿Cómo fueron protegidos estos tres discípulos mientras enseñaban a la gente? (3 Nefi 28:18–22.) ¿Qué escribió Mormón acerca de esos tres discípulos? (3 Nefi 28:24–26. Haga notar que Mormón vivió unos 350 años después de Jesucristo.)
• ¿Qué hicieron los discípulos después que el Salvador se fue de entre ellos? (3 Nefi 28:18.) ¿Qué hizo la gente después que oyeron las palabras de los discípulos? (4 Nefi 1:1–2.) ¿Cuántas personas se convirtieron? Señale que en esa época ya no había nefitas ni lamanitas sino que estaban todos unidos en un mismo pueblo.
• ¿Qué quieren decir las palabras contenciones y disputas? (4 Nefi 1:2. Pelear o discutir.) ¿En qué forma han sido bendecidos ustedes y su familia cuando no ha habido contención en el hogar? ¿Cómo pueden ser pacificadores y evitar que haya contención en la familia?
• ¿Qué quiere decir que las personas “…tenían en común todas las cosas”? (4 Nefi 1:3.) ¿Les gustaría vivir de esa manera? ¿Por qué? ¿Por qué piensan que sería difícil?
• ¿Qué milagros efectuaron los discípulos de Jesucristo? (4 Nefi 1:5.)
• ¿Qué bendiciones recibió el pueblo? (Véase la actividad complementaria 1.)
• ¿Por qué no había contenciones en la tierra? (4 Nefi 1:15.) ¿Qué quiere decir tener el “amor de Dios” en el corazón? ¿Cuándo han sentido el amor de Dios en su vida? ¿Qué podemos hacer para que otras personas también sientan ese amor?
• ¿Cuál fue el motivo del cambio que ocurrió en esa feliz sociedad? (4 Nefi 1:23–29.) ¿Cómo trató el pueblo a los discípulos? (4 Nefi 1:30–34.) ¿Qué es el orgullo? ¿Qué podemos hacer para superar el orgullo?
• ¿Qué quiere decir rebelarse “intencionalmente… contra el evangelio de Cristo”, como lo hizo esa gente? (4 Nefi 1:38.)
• ¿En qué condiciones se encontraba el pueblo trescientos años después de la visita de Cristo? (4 Nefi 1:45–46.)
Actividades complementarias
Utilice en cualquier momento de la lección o como repaso, resumen o cometido una o más de las siguientes actividades:
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Prepare tiras de papel o cartulina con las siguientes frases de 4 Nefi 1:2–3, 5, 15–17:
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“Obraban rectamente unos con otros”.
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“Tenían en común todas las cosas”.
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“Obraban toda clase de milagros”.
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“No había contenciones en la tierra”.
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“[El] amor de Dios… moraba en el corazón del pueblo”.
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“No había envidias”.
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“No había… tumultos”.
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“No había… mentiras”.
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“No había ladrones”.
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“No había… asesinos”.
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“Eran uno, hijos de Cristo”.
Ponga las tiras de papel en un recipiente y pida a los niños que por turno tomen una y la pongan a la vista. Esas frases de 4 Nefi explican por qué el pueblo vivía en paz y eran felices.
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Lea y analice con la clase la siguiente declaración del presidente Ezra Taft Benson, decimotercer Presidente de la Iglesia:
“El Señor nos advierte en Doctrina y Convenios: ‘Cuidaos del orgullo, no sea que lleguéis a ser como los nefitas de la antigüedad’ (D. y C. 38:39)” (“Cuidaos del orgullo”, Liahona, julio de 1989, pág. 4). El presidente Benson nos enseñó que podemos vencer el orgullo, ser humildes, mansos y dóciles si:
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Amamos a nuestro Padre Celestial y lo ponemos en primer lugar en nuestra vida.
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No nos preocupamos de lo que los demás piensan de nosotros sino solamente de lo que piensa nuestro Padre Celestial.
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Evitamos los chismes y las críticas.
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No envidiamos ni gastamos más de lo que tenemos.
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No discutimos ni peleamos con nuestros familiares.
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Tratamos de que otras personas se sientan bien consigo mismas.
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Aceptamos el consejo de nuestros líderes.
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Perdonamos a quienes nos hayan ofendido.
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Somos generosos.
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Prestamos servicio a los demás.
Si lo desea, escriba estas declaraciones en tiras de papel y colóquelas en una bolsa para que los niños vayan sacándolas una por una y analicen cómo ese principio nos ayuda a vencer el orgullo dentro de la familia.
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Lea, analice con los niños y ayúdelos a aprender de memoria parte o todo el pasaje de 4 Nefi 1:15–16.
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Pida a los niños que representen situaciones de la vida real en las que haya contención. Luego, hágales representar cómo cambiaría la situación si viviéramos en una sociedad como la nefita, sin contención. (Sugerencias: dos niños desean ser los primeros de la fila, dos hermanitas quieren jugar con el mismo juguete, etc.)
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Lea y analice con los niños la siguiente declaración del élder Marvin J. Ashton:
“ ‘¿Cómo se puede saber si alguien está convertido a Jesucristo?… Lo que nos indica mejor y más claramente si estamos progresando espiritualmente y acercándonos a Cristo es la forma en que nos tratemos los unos a los otros’ ” (“La lengua puede ser una espada aguda”, Liahona, julio de 1992, págs. 21–22).
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Ayude a los niños a aprender de memoria el decimotercer Artículo de Fe. Analice con ellos cómo se aplica a la forma en que los nefitas vivían después de la visita de Jesucristo y cómo podemos vivir ahora.
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Lea y analice con la clase Doctrina y Convenios 19:23.
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Canten o repitan la letra de las canciones “Siento el amor de mi Salvador” (Canciones para los niños, Nº 42) o “Siempre obedece los mandamientos” (Canciones para los niños, Nº 68).
Conclusión
Testimonio
Testifique que podemos experimentar paz y felicidad si vivimos con humildad como el Salvador nos enseñó.
Sugerencias de lectura
Sugiera a los niños que estudien en casa 4 Nefi 1:1–18 como repaso de la lección de hoy.
Pida a uno de los niños que ofrezca la última oración.